La mentira que siempre soñe

3. ¡Gane!

—¡¡¿Qué?!!—pregunto sorprendida, ¡oh oh! Se vienen problemas.
—Si, el es el padre del idiota de Luis— dice con una calma que me preocupa. —Y eso significa…—no me deja terminar
—Que Luis se paseara por aquí—dice en trance de nuevo.
—Por dios!, Amy reacciona— la sacudo y despierta me preocupa
— Si, ya estoy bien, ¿Qué voy hacer Ki?—dice presionandome mi mano ¡Ay que fuerza!
—¡¡Por ahora soltarme mi brazo antes de que deje de fluir mi circulación!!!—la regaño, me mira apenada
—¡Ups! Lo siento—quita su mano de mi brazo, trato de decirle algo, pero una voz me interrumpe.
—Gracias, a todos, estoy contento de formar de esta gran cadena, mi familia y yo estamos orgullosos de este nuevo logro, ya que en unos años mi hijo Luis Acosta Villarreal será el encargado de todas mis acciones y empresas, espero que tanto Amy y Luis aprendan uno del otro para seguir de socios en el futuro, gracias David por esta oportunidad—dice el padre de Luis, para retirarse y todos aplaudimos, Amy se ve tensa.
—Gracias Jorge y gracias a todos por venir, ahora que siga esta fiesta—finaliza el señor Taylor. En ese momento Amy se va a no se donde, trato de seguirle el paso hasta que la alcanzo en los baños.

—Amy—es lo único que digo para que me abrace, no llora, ella no es demostrar sentimientos, pero el abrazo significa mucho.—Tranquila, si necesitas desahogarte hazlo, estoy aquí, no te dejare, recuerda—digo y ella solo llora, no deja de abrazarme, llora hasta que se siente mejor. Se separa de mi y dice
—Gracias, eres la mejor, eres mi inspiración, eres mi hermana ¿lo sabes?—dice y asiento, siento mis ojos húmedos, por que ella no se expresa tanto y lloro cuando dice algo así
—La que tiene que llorar soy yo, no tú , y ya lo hice—dice y me rio y nos volvemos abrazar. Hasta que nos lavamos la cara, por suerte no traíamos tanto maquillaje, no retocamos y salimos.


—¿Ahora que?—pregunto y ella se encoge los hombros

—Nada, ya no hay más que hacer, tranquila estaré bien, solo lo soportare más, de vez en cuando, quédate tranquila—me trata de reconfortar, pero se que es por que no quiere dejarme más carga, si la conozco, pero no insistiré.

—¿Amy?–dice Ada acompañada con Eva, mi amiga las abraza y me uno.
—Gracias, chicas, estaré bien, creo que a todas nos paso algo diferente hoy ¿verdad?—dice con gracia y nos hace reír.

—Amy, Kiara–dice Noah, rompiendo el momento, las chicas me notaron tensa

—¡Noah!, hola–digo normal

—hola, las buscan sus papas—nos avisa, miro a mis amigas, ahi me doy cuenta de que no las he presentado
—Que descortés, de mi parte, chicas, el es Noah amigo de la familia, Noah ellas son Amanda y Evaluna, mis amigas—los presento sonriendo.

—Mucho gusto chicas—dice Noah y mis amigas se quedan casi embobadas, ¡que discretas!.

—¿Noah eres tu?—pregunta Ada saliendo del encanto

—¡En persona!—les da un sonrisa, se acercan abrazarlo

—¡Dios cuanto tiempo!, ¡Que alegria verte!—le dice Ada

—¡Que lindo verte!— saluda Evaluna

—Igualmente, ¡Que bellas estan!—las alaba sonrojandolas

—Bueno… gracias por el aviso Noah, diles que ya vamos—aviso en nombre de las dos. –
—Claro, nos vemos—se va algo incomodo por laa miradas de mis amigas y mi actitud

—Adiós—decimos las cuatro.

—Dios, ¿enserio es Noah?—exclama  Ada, asiento
—¡Wow!, esta guapo—dice Eva
—Si esta guapo, pero es un tonto— ellas me ven confundidas.—Larga historia—suspiro.

—Oye,¡ teníamos que ir con nuestros padres!—avida Amy, nerviosa y espantada
—Oh, oh, tienes razón nos vemos chicas—me despido.
—Perdón por la espera—se disculpa Amy en nombre de las dos miro a todos

—Tranquilas chicas esta bien, justo llegan para la cena—dice Gabriella. ¡fiu!

Nos empieza a servir la cena, se escucha la música y los padres hablando, Noah, Ximena, Amy y yo estamos callados.
—Ki, ya viste quien esta cerca—niego sin dejar de ver el plato

—Mira disimuladamente, hacia mi lado—lme vokteo rapido, con la mirada reprendedora de mi amiga, esta nada menos que Zac, ¡no me sorprende!. 
—¡Au!—exclamo fuerte por el golpe en la mano que me dió y todos los de la mesa nos miran, sonrio a modo de disculpa, ellos siguen en sus asuntos
—Te dije discretamente—me regaña Amy
—¡Increíble!, ¡no se cansa de joder!—–digo  frustrada

—Si, pero ya ves como es—–dice Amy.


—Que lenguaje el de la señorita–dice de mi lado izquierdo Noah sonriendo
—Que metiche el señor—–digo sonriendo, el solo me ve ofendido
—–Disculpa, no soy señor, soy muy joven para ese adjetivo—se hace el ofendido.
—A lado mío, tu eres un señor—explico sonriendo.
—Perdóname, pero solo te llevo 6 años—contesta
—Exactamente, tu lo dijiste 6 años, aparte mayor de edad, así que ¿alguna declaración señor?—enfatizo el “señor”, con mi sonrisa inocente

Touche, entonces como tu mayor debo decirte que las groserías no son correcto—me regaña, (de buena manera).

—Pero no lo haras—espeto sonriente— sabes que como mi mayor, debes de darme el ejemplo, y lo que me estas dando de ejemplo es que debo escuchar conversaciones ajenas—argumento y así es ¡gane!.

—Bueno, solo lo hice por que estas a mi lado, pero tienes razón ¡ganaste!—dice lo ultimo susurrando.
—Que buen perdedor eres, gracias–—digo victoriosa.
—Oye Noah, no se si sepas pero tengo que decirle algo a mi amiga, así que por favor, tantito–dice Amy.él solo asiente.

—¿Que tanto discutías?–pregunta, apunto de hablar me interrumpe

—no me digas, al rato me cuentas, en lo que tu estabas en tu disputa, Zac te estaba viendo, su cara no era la mejor, y yo tenia un guerra de miradas con Luis, que me señalaba a él y a mi y después afuera, creo que quiere hablar, le hice con mis dedo en círculos que estaba loco—me cuenta y me rio, por que a veces Amy es así.




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