La misteriosa criatura del océano

En el fondo del océano se escucha un ruido misterioso y lejano, por lo que los peces del mar le temían a lo que posiblemente podrían encontrar. La tortuga estaba preocupada y asustada por un extraño sonido  que no la dejaba nadar tranquila. A pesar de su miedo que sentía en esos momentos decide enfrentarse al misterioso ser del océano para buscar quien posiblemente la asustaba. Busco en las áreas donde siembre nadaba y dormía, pero en esa zona no había nadie. Al ver que no había nadie en su hogar siguio buscando y navegando los posibles lugares que provenía el sonido.
Los peces se le unieron y juntos empezaron a buscar en lugares abiertos y ocultos donde creen que sería un buen escondite. El lugar donde buscaba tampoco encontraron nada, así que decidieron seguir a otra parte del océano. La tortuga sabía que tal vez podría ser algo peligroso, pero no se quitó y siguió su camino junto a los peces. Lo que ellos no sabían es que había una tierna criaturia que solo buscaba atención. Las medusas se acercaron para darle la bienvenida al océano y cuidarla por ser de su misma especie. 

La pequeña miraba a los lejos a la tortuga y a los peces, cómo se acercaba lentamente, hacia ella. Ella sonrío al ver que tiene nuevo amigos marinos y estaba muy feliz por conocerlos. La tortuga se acercó y la miró, detenidamente buscando que era exactamente esa misteriosa criatura que no paraba de sonreírle tiernamente. La tortuga notó que no era una criatura aterradora que buscaba asecharles para asustarlos, si no, buscaba su atención. El bebe la miro y sigue jugando con sus manitas para que la tortuga jugara con ella.

Los peces vieron que ella no era un peligro para ellos y deciden acercarse a contemplar al hermoso bebe. La tortuga la llamo "Jelly" y ella aplaudió con una sonrisa y reía haciéndole saber con sus gestos a todos que le gustaba su nombre. L única duda que tenían todos los peces es: ¿Qué propósito tenía Jelly en el océano?

La tortuga se puso de espalda invitando a Jelly a subirse a su espalda y juntos empezarán una gran aventura en el fondo del océano. La tortuga se lleva a Jelly a conocer todo lo hermoso y bello que podía conocer de su nuevo hogar. Ambos se divirtieron y empezaron su nueva aventura para que se sintiera parte de ellos. 

Jelly sentía tanta felicidad que le gustaba estar con sus nuevos amigos, divirtiéndose y aprendiendo a conocer lo que sería su nuevo hogar. 
 

Fin