Virg
Nil hizo que apartara la vista.
Apretaba mi mano de manera inusual, mientras me guiaba en otra dirección.
Algo no estaba bien.
Luke llamó a Nil de manera inesperada.
Los dos giramos, su acompañante desapareció.
La sonrisa de esta persona me hizo sentirme incómoda.
“Te veré en la jardinera, volveré enseguida”
Me lo dijo antes de que su primo dijera cualquier cosa.
Su sonrisa no aceptaba un NO como respuesta.
Me sentí incómoda siendo excluida.
Alrededor mío, nadie rondaba así que solo caminé en círculos frente la jardinera.
La curiosidad mataba y la idea de escuchar parecía buena idea.
Camine de regreso, silenciosamente bajo mis tacones.
Fueron 4 pasos, Nil venia en mi dirección.
Aún no notaba que estaba allí.
Una mirada sombría y enojada.
Puños cerrados, ya con los nudillos blancos.
Jamás lo vi tan fuera de lugar.
Llame su nombre, acercándome cuidadosamente.
Pareció sacarlo de trance, me reconoció.
Yo solo tomé su mano, tratando de captar su mirada.
Me abrazó, eso me aterrorizó.
Pregunte por su bienestar, pero solo recibí un beso en la frente y un:
“Estoy bien, ya sabes que no me llevo bien con él”
Las cosas siguieron tensas después de la plática con Luke.
Nos reunimos en la mesa junto a mis padres, lo más alejado de ellos.
Ante mi duda de lo qué pasó, dijo que no tenía nada de importancia, se mostraba calmado y llevaba una conversación simpática.
Pero sus ojos se veían feroces e intranquilos.
No podía preguntarle ya que estaban mis padres.
Tiempo después me fui.
Ya era tarde y la fiesta acabó.
No tengo idea de lo qué a pasado.