La guerra duró otros 5 años después de que Clarice encontró el anillo (y nunca se lo volvió a quitar); en todo ese tiempo, ella estuvo practicando su magia en secreto, al principio le costó trabajo, pero al final recuperó todas sus habilidades, las cuales usó discretamente para terminar con la guerra, para cuando volvió con sus hermanos, ellos ya tenían 10 años.
Clarice se hizo cargo de todos negocios de su padre y de sus hermanos, además de ayudar a reparar todos los daños que dejó la guerra. Cada noche Clarice les contaba a sus hermanos sobre su vida en Arendelle y les prometía que cuando regresara los llevaría con ella, esa idea les emocionaba, también realizaba pequeños trucos de magia para ellos y entretenerlos. Pasaron 9 años hasta que Clarice terminó de arreglar las cosas en su país y en los otros, incluyendo haber lanzado un hechizo al mundo que haría que las personas de mal corazón murieran durante los siguientes 1000 años; entonces fue hora de buscar los ingredientes para regresar a casa.
Aunque Timothy y Tabita ya tenían 19 años y empezaban a dudar sobre la veracidad de las historias que les contaba Clarice, decidieron seguirla en sus viajes. Literalmente los tres estuvieron viajando por todo el mundo durante años (6 años), cada ingrediente era más difícil de conseguir que el otro, sin mencionar costoso, pues algunos habían sido encontrados por personas que comenzaron a venderlas, sin embargo Clarice nunca se rindió.
Para poder conseguir el ultimo ingrediente, Clarice y sus hermanos tuvieron que permanecer en un lugar por mucho tiempo, el suficiente para que sus hermanos pudieran entablar amistad con lugareños e incluso ambos consiguieron parejas, para ese momento ya no creían nada de lo que Clarice les había dicho en su infancia y habían planeado hablar con ella para hacerla entrar en razón y poder tener otra vez una vida normal, sin embargo Clarice los escuchó, entendió que ellos habían decidido quedarse en ese mundo, ese era su hogar y ella debía volver al suyo.
Clarice escribió una carta de despedida para sus hermanos, tomó todos los ingredientes que necesitaba y se fue, justo en ese momento llegaron sus hermanos, pero no la encontraron, lo único que seguía ahí era la carta que les dejó, la cual decía:
Para Timothy y Tabita de Clarice.
Hola hermanos, si están leyendo esto significa que ya me fui; miren, los escuché hablando sobre lo felices que eran aquí y de todos los buenos amigos que habían hecho, además de que ya no creen en lo que les dije sobre mi vida en Arendelle, no se preocupen, yo tampoco me creería; en fin, no voy a obligarlos a seguirme, ustedes son felices aquí, este es su hogar y me alegra, pero yo tengo volver al mío, llevo esperándolo demasiados años; ya hice todo lo que tenía que hacer en este mundo, ustedes ya son mayores, no queda nada más para que me quede, arreglé los papeles para ustedes se queden con la herencia de nuestro padre, no la despilfarren. Los quiero hermanos, los extrañaré, tengan una buena vida, adiós.
Al principio, Timothy y Tabita no sabían cómo reaccionar tras leer eso, pero después de mirarse uno par de minutos, decidieron salir a buscar a Clarice, seguramente para tratar de detenerla, ellos sabían en dónde realizaría el hechizo, pues ella se los había dicho (en la cima de un barranco), ellos se dirigieron hacía ahí lo más rápido que pudieron.
– Tenemos que llegar a tiempo, debemos detenerla. –Dijo Tabita.
– Clarice, por favor no lo hagas. –Dijo Timothy.
– También lo notaste verdad. –Dijo Tabita.
– Sí. –Dijo Timothy.
– Ella saltará del barranco. –Dijo Tabita.
Mientras tanto, Clarice ya había mezclado todos los ingredientes, lo único que le faltaba era agregar el anillo y el portal se abriría; para ese momento Timothy y Tabita ya habían llegado a la base de la montaña con la ayuda de un par de caballos. Entonces Clarice agregó el anillo a la poción. Tabita y Timothy cabalgaron hasta la cima del barranco. Tras agregar el anillo, el portal se abrió a la orilla del barranco (Tabita y Timothy continuaron esforzándose para llegar a tiempo), Clarice sonrió, hecho un vistazo por última vez a su mundo y atravesó el portal, justo en ese momento llegaron sus hermanos, pero ya no la encontraron, solo alcanzaron a ver un pequeño resplandor cuando se acercaron.
– ¡Clarice! –Dijo Timothy.
– Es tarde. –Dijo Tabita.
Cuando Clarice atravesó el portal, abrió los ojos y finalmente volvió a ver el mundo y las personas que tanto amaba, todos ellos estaban felices de verla (para ellos no habían pasado más de 5 segundos desde que Clarice se fue).
– Bienvenida Clarice. –Dijo Elsa sonriendo y acercándose a Clarice.
– Estoy en casa. –Dijo Clarice sonriendo y ambas se besaron.
Después de eso Clarice y Elsa renovaron sus votos matrimoniales, Clarice jamás volvió a irse (ni a ser infiel) y todos......
Vivieron felices para siempre.
Fin