T R E I N T A Y C I N C O

ACERCAMIENTO

Malena:

—Eso estuvo divertido, chicos —Me siento sobre un tronco y mis demonios me rodean como lacayos a su reina—. Debemos hacer esto más seguido.

Aún puedo ver la cara desencajada de ese Elegido peleando con Lucas, fue una estupenda idea, como decía mi querido Julio César divide et impera, si conseguimos hacerlos pelear de nueva cuenta Luna se quedará más desprotegida y será mía.

—¿Qué hacemos con la humana? —gruñe uno de mis demonios, parece que desea consumir la poca alma que tiene.

Estoy dividida y no sé qué hacer, una parte de mí desea que los demonios la despedacen para concluir con mi maldad, pero es el juguete de uno de mis demonios y le prometí que lo cuidaría.

En vista de que soy malvada haré lo que crea que es más conveniente.

—Déjenla vivir, solo por ahora —Me pongo de pie—. Ahora vayan a divertirse al bosque, pueden matar a cualquiera que se cruce en su camino, ya conocen las excepciones.

Mis demonios desaparecen como si nunca hubieran estado en este sitio. Me acerco un poco a la pequeña, le muevo la cabeza con la empuñadura de la daga.

—¿Qué es lo que haré contigo? —Le hago un pequeño corte en el mentón— ¿Te cedo a otro demonio o esperamos al tuyo?

Dejo a la pequeña, aunque deseo matarla la necesito para que mis demonios puedan salir y entrar al bosque, pero si se la cedo a otro demonio puede que no soporte su presencia y de cualquier forma dejará de ser útil.

Cargo a la pequeña hasta el lago, la ato a un tronco y hago una ilusión para que nadie consiga verla, una muy fuerte para que Jamie sea el único capaz de ver a través de ella.

Hablando de Jamie... ¿se habrá enterado que fui yo quien trajo a los demonios a esta ciudad?

Agito la cabeza para alejar ese pensamiento de mi cabeza, no debo pensar tanto las cosas, para mañana tendré mi arma demoniaca y mataré a Luna a cualquier costo.

Para cuando consigo abrir los ojos descubro que estoy en mi habitación y que mis sábanas cubren mi cuerpo. Una horrible punzada en mi cabeza me obliga a cerrar mis ojos, creo que bebí en exceso o me golpeé la cabeza con algo, este dolor es horrible e insoportable.

—Eres una idiota con muchísima suerte, Malena.

Me giro sobre mi costado y escondo mi cara con las sábanas, es demasiado temprano para discutir con Leonel.

—Largo —Consigo gruñir.

Aún puedo sentir su presencia aquí, de pronto escucho sus pasos acercarse a mí, mi cuerpo se queda sin su refugio y yo comienzo a sentir frío, genial... el niño me quitó mis sábanas.

Me giro de nueva cuenta y entierro la cara en la almohada, me pregunto qué demonios quiere Leonel de mí, ¿acaso no está viendo que no me siento bien?

—Deja de comportarte como una niña malcriada, Malena Godwin —Saco la cara de la almohada para intentar tocar su corazón—. Ahora que estás despierta me gustaría que me explicaras en dónde demonios te habías metido, tuve que mentirles a nuestros padres durante un mes, ¿tienes idea de lo difícil que es cubrir a alguien por tanto tiempo?

Y eso me golpea con fuerza, termino sentada en la cama, ¿escuché mal o Leonel dijo que engañó a sus padres durante un mes?

Trato de mantener la calma, abrazo la almohada y después la muerdo por la frustración. Tienes que recordar lo que estuviste haciendo este último mes, Malena...

—Bien... —continúa— me explicarás todo más tarde, pero no después de hoy o le contaré todo lo que sé a mis papás —Se aleja, pero se detiene en la puerta—. Por cierto, Luna está muy preocupada por ti.

Al fin me deja sola y mi desesperación no disminuye para nada, termino en el suelo sin saber exactamente qué pasó, ¿qué fue lo que hice?

Revuelvo mi cabello esperando que el más mínimo recuerdo aparezca en mi cabeza, me siento muy impotente por no poder recordar nada de lo que estuve haciendo.

Me detengo en cuanto un fragmento de lo que pasó llega a mi mente. Estaba saliendo del bosque cuando me crucé con Ananel, me agradó mucho volver a verlo, me contó que Ertael había dado conmigo y que planeaba separarme de mi familia porque quería jugar conmigo, pero parece ser que un par de Elegidos envió de regreso al infierno a mi querido amigo deshaciendo mi vínculo con él y creo saber quiénes fueron esos Elegidos.