La Nerd del Mafioso

CAPITULO 12

      James

Las cosas no están saliendo bien, las cosas se están saliendo de mis manos y siento que voy a enloquecer si no escucho noticias de mi hija... una hija que se me privo por más de 20 años, y a pesar de que ella no sepa que yo soy su padre, la quiero, la quiero mas que a mi vida, yo lo daría todo por mis hijos, lo hice una vez y lo volvería a hacer mil veces de ser necesario.

Jordan y yo nos habíamos quedado al pendiente del teléfono y de los celulares por si los secuestradores volvieran a llamar o por si Rosalie llamaba, ella dijo que estaría de regreso pronto, mientras tanto tendría que poner unos cuantos pretextos para estas personas. Incluso Nicolai había venido a la casa de mi hija... y solo porque se enteró que una de mis hijas había sido secuestradas, creo que pensó que era Rosalie, ese chico ha sido de mucha ayuda en esta última semana.

-¿Han llamado de nuevo?- preguntó el susodicho entrando a la casa.

-No, aun no han llamado, pero Rosalie ya nos dijo que está de camino para acá- contestó Jordan, ese chico sí que está preocupado por su hermana- Estas personas quieren dinero y nosotros no tenemos ni un centavo.

-Tu no te preocupes, Rosalie va a resolver todo el caso, ella nos ha ayudado mucho a mi familia y a mi, que la verdad, yo....

-Yo no quiero problemas con la mafia, ¿de acuerdo?- wow, la madre de este chico si que me odia- Ya suficiente tenemos como para tener que deberle algo a la mafia.

Un portazo se escuchó desde la entrada de la cocina, yo sabía que Rosalie ya había llegado, porque nadie en su sano juicio patea una puerta para hacer una entrada tan dramática... me pregunto ¿cuando entrara a un lugar como una persona normal?

-¿Quien tiene problemas con la mafia? Porque juro que voy a matar al desgraciado de...

-Rosalia, benvenuto- salto instantáneamente Nicolai, el se levanto de su asiento y caminó hasta ella para darle un abrazo- Un gusto verte de nuevo.

-Gracias- dijo ella luego que el la soltó- no te había visto desde la boda de mi hermana Lia.

-He estado ocupado, me entere que Claire se casó con Alex- ay, Dios.

-Si, bueno, es una larga historia- dijo mirando a otro lado, seguro recordando lo que ocurrió en Rusia- Pero bueno, ¿quien tiene problemas con la mafia?

-Nadie, es lo que estaba diciendo, no quiero problemas con la mafia, por lo que te agradezco todo lo que estás haciendo por nosotros, pero ya es demasiado- este chico no sabe con quién se está metiendo.

-¿Acaso el jefe de alguna de las organizaciones de mafiosos se contacto con ustedes?- Jordan negó- Entonces, ¿por qué no querrías tener problemas con la mafia?- hubo silencio de su parte y miró hacia otro lado.

-Porque nosotros sabemos que es a eso a lo que te dedicas- contesto Stephanie saliendo de su cuarto.

-Ok, Stephanie, ¿tu crees que todo lo que tengo es gracias a la mafia?- ella asintió sin dudarlo, esta mujer no aprecia su vida- Estas equivocada, muy equivocada, al igual que tu, Jordán. Tu madre solo quiere que tu y tu hermana me odien, que odien a mi familia porque ella cometió un error y no lo quiere afrontar, ella quiere que todos paguen por ello, y ¿sabes que, Stephanie?, tú pudiste tenerlo todo, pudiste ganar una enorme familia y tener lo que se te antojara a la palma de tu mano, pero la cagaste y ahora quieres que tus hijos nos odien por ello, quieres que nos odien a nosotros para que no te odien ni te juzguen a ti, pero te aseguro que te va a salir todo mal.

-No seas irrespetuosa, estas en mi casa- mi hija se rió de aquello- ¿Que es lo gracioso?

-Bueno, resulta que tu casa pasó a ser algo que no tiene importancia, porque alguien pago TODAS tus deudas, y ¿que crees?, fue la persona a la que más desprecias en el mundo- ya arruino la sorpresa.

-Yo no quiero...

-No lo hice, por ti, Stephanie, lo hice por Phoebe- dije metiéndome en la conversación por primera vez.

-¿Acaso mi hija te lo pidió?- pregunto indignada.

-¿Acaso ella me lo tiene que pedir?, no, Phoebe no me pidio nada, y no tiene que hacerlo tampoco, yo con todo el gusto del mundo le daría todo lo que ella no ha tenido y todo lo que se merece- dije parandome del sofa y acercándome a ella- Estás enojada conmigo, bien- le susurre una vez estando cerca de ella- pero no hagas que mi hija me odie también, no desquites todo tu maldito enojo haciendo que tu hijo y nuestra hija odien a mis demás hijos, no es justo para ellos, aunque, después de todo, yo soy el que tiene que estar enojado contigo, yo soy quien debe odiarte por lo que hiciste.

-Yo no te hice nada- hablo en un susurro también.

-Eras casada, y no te importo, tenías una familia y no te importo- dije aun mas cerca de ella- Tuviste una hija que lleva mi sangre y me la ocultaste y tampoco te importo, no me digas que no me hiciste nada porque sabes muy bien que si.

-James, enfoquemonos aquí, hay que esperar la llamada- dijo Rosa saliendo de la sala, yo me aleje de Stephanie para volver a sentarme, se que esta enferma, pero ese supuesto rencor que me guarda la está enfermando aún más- Comencemos con esto- dijo mi hija una vez volvió a entrar, esta vez tenía una maleta con, lo que yo supongo, son sus computadoras.

Esto va para largo, lo digo por experiencia, Rosalie siempre se toma muy en serio sus misiones, es algo que admiro de mi hija, la niña que siempre había visto como a la menor de mis hijos ahora es toda una adulta, una con un peligroso temperamento y que se que explotara en cualquier momento si no tiene lo que quiere.

-Solo para aclarar, no vuelvan a decir que yo soy una mafiosa, porque voy a dejar de aguantarme las ganas y los enviaré directamente a un maldito hospital... a los dos- dijo con una sonrisa que parecía suave pero que decía que hablaba en serio- Y no, Stephanie, no me importa que tu ya estes enferma.

Nadie volvió a decir una palabra más, todos permanecimos en silencio esperando la llamada de los secuestradores.



#350 en Detective
#4670 en Novela romántica

En el texto hay: asesinatos, amor, secuestros

Editado: 24.07.2021

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.