"Está oscuro, hace frío, estoy mojada y perdida, he corrido por horas y no me puedo
detener, no puedo por que temo a esos hermosos ojos color miel que lastiman como el filo
de mi daga, a esa piel que quema como el hielo en su temperatura más baja, y esa voz que
me carcome por dentro hasta el punto de hacerme actuar a su merced. De repente está la
voz de mi ángel, mi hermano, mi Dany; me pide que deje de correr, que descanse, que sea
valiente y no me deje vencer por ese bastardo como él lo llamaba, me detengo y me dejo
caer. Pero al voltear veo a mi mayor demonio, mi martirio, mi tormento"....
Despierto agitada, asustada y desorientada, poco a poco recupero la calma y maldigo a mi
subconciente por despertarme a las 2 de la mañana, acaso no puedo dormir y soñar con mi
amado Will Herondale?. Trato de conciliar el sueño nuevamente pero se me hace
imposible, así que decido releer Maravilloso desastre aunque ya me sé la historia y
diálogos de memoria; me pierdo tanto en la lectura que mi alarma me sobresalta no me doy
cuenta que son las 6 de la mañana hora de arreglarme para ir a "estudiar"; realizo mi rutina
de todas las mañanas y bajo a desayunar, mi mamá ya debió haber salido y yo voy tarde
así que tomo una fruta un poco de jugo y mi dinero; el instituto no esta lejos asi que voy
caminando con mis audifonos puestos y con Youngblood de 5SOS a todo volumen
mientras pensaba , algún día volveré a tener sueños normales?; de la nada un fuerte golpe
me tira al piso al levantar la vista veo a un mundano, castaño, de ojos verdes y de sonrisa
arrogante
-Que te sucede maldito mundano que no ves por donde vas?-la falta de cafeína estaba
haciendo crecer mi mal humor;
-En primer lugar buenos días señorita- su sonrisa es burlona y puedo notar el sarcasmo en
su voz -En segundo lugar dije cuidado, pero al parecer usted no me escucho- mi
paciencia se está agotando- y en tercer lugar...-lo interrumpo
- Mira no me interesan tus explicaciones y tengo cosas mucho más importantes que hacer
que quedarme a escuchar tus estupideces- retomo el camino hacia mis clases.
Al llegar me encuentro con Alec y Tatiana, mis dos mejores amigos que tan solo ver mi
rostro ya saben qué esperar de mi humor, el cual había empeorado después del incidente
con el castaño .
- ¿tomaste tu taza de café hoy ?- pregunta Tatiana, la cual sabe que mi humor depende de
la cafeína .
- Pues no, se me hiso tarde y aparte de eso choque con un idiota en patineta mientras venia
hacia aca- respondi con total fastidio.
-Lia- dice Alec con un poco de cautela en su voz- si sabes que la cafeína es perjudicial para
tu salud?- ignorando por completo el hecho de que pude haber muerto en esa caída (es
exagerado lo se).
-lo sé- respondo y suelto un largo suspiro- pero es lo único que me mantiene despierta- digo
con cansancio.
-otra vez tus pesadillas?- pregunta Taty
-si; sabes aveces odio mis sueños por no dejarme dormir- bromee para aligerar un poco la
tensión.
llegó la hora de la primera clase y así transcurrió el día entre clases hasta la hora de receso,
mi humor había mejorado considerablemente ya que amaba la clase de arte y me relajaba
mucho pintar lo que siento.
Ya en la cafetería me siento de mejor humor y un poco hambrienta pero me siento inquieta,
vigilada puede sonar paranoico pero se que hay una mirada penetrante sobre mi, no me
atrevo a voltear por miedo a que sea el, que regresará a derrumbarse por completo si es
que eso se podía; Alec noto la tensión en mi pero no pregunto ya gradeci eso.