La Posibilidad de Amar (enlazados4)

Trece

Franchesco
 


Me sentía extraño por el hecho de viajar en "familia" normalmente le huía a ese tipo de encuentros, por más que el tema de ser el hijo extramatrimonial estuviera superado, yo me sentía fuera de lugar, pero amaba mucho a una señora de cabellos plateados y por ella hacia lo que fuera.

Es viernes en la mañana la efervescencia del viaje es evidente, mi hija es la más entusiasmada y a eso le incluimos los hijos de Ian, todo será un caos. Nos citamos en las afueras de la escuela, para así tomar rumbo al aeropuerto de Florencia, como cosa rara los únicos que llegaron tarde fueron Adrián y Brina.

El viaje fue tranquilo por más que los que llegaron tarde no dejaban de hablar y a ellos se les sumió Fátima, las risas de ellos se escuchaban por todo el avión y hasta que los auxiliares los mandaron a callar.

Milán nos recibe con una sensación de tranquilidad, ya en el aeropuerto nos esperaba nuestro transporte, al verlo entendí que mi señora madre tenía todo planeado. Desde ahí salimos para las afueras de Milán, nuestro transporte surco varias calles hasta que tomamos rumbo hacia Segrate.

20 minutos después nuestro transporte llega a una villa campestre llamada Koblet; con 7 casas campestres correctamente repartidas en una extensión de terreno bastante considerable, cada una tiene una estructura similar, pero en si diferentes diseños.

Mientras más nos adentrábamos en la villa nos dimos cuenta de que había una casa sin terminar y recordé la conversación con mi madre, esa es la casa de mi hermano Franco, eso me daba entender que él sería el único ausente en esta reunión. Ian con su familia se fueron hacia el área izquierda de la villa, pasamos por una piscina grande y por una gran área de BBQ

Desde mi posición logro ver a mi madre conversando con unos trabajadores de la villa, camino hacia su encuentro en compañía de mi hermana e hija, tan pronto nos ve viene a nosotros con una gran sonrisa

- Bienvenidos ... - nos abraza a todos y nos señala la casa más grande -

- Gracias, madre - se sonríe y la tomo por la mano -

- Vi a Ian y no te vi a ti y me alcancé a preocupar ... pensé que no vendrías

- Te lo prometí y aquí estamos - al entrar a la casa nos encontramos con un aura que me remonta a Cagliari -

- Me hace muy feliz que estés aquí con nosotros

- ¿Papá Donato está aquí? - asiente -

- ¿Cómo lo sabes?

- Su olor esta por la casa - nos sonreímos -

Camino en busca de las habitaciones y lo encuentro en la habitación principal leyendo un libro, lo observo desde la puerta, conteniéndome, porque desde hace varios años él no sale de Cagliari por sus múltiples ocupaciones, siento un golpe en mi espalda y es Fátima que viene corriendo hacia él.

Él fue el mejor padre que pudimos tener, inculcó en Fátima al amor por la medicina, en mi el respeto hacia las chicas, fue un bálsamo después de Paolo Damiani. Conversamos un rato y le cuento todo lo que tengo planeado hacer, la ayuda de parte de mis hermanos y como voy con el tema de la perfumería, me quedo un rato con él hasta que escuchamos unos autos llegar.

Llega un transporte como el que nos trajo, de ahí bajan los Almoraz y los Brown, detrás llega un auto y de ahí se baja mi hermano Fabricio y su familia; de un momento a otro mis ojos se centran en la chica de cabello largo castaño, ella está totalmente ajena a mi escrutinio y se mueve con gracia que me cautiva.

Siento que carraspean a mi lado y trato de dejar de mirarla, pero mis ojos tienen vida propia y por mas que intento quitar la mirada, vuelve hacia ella

- ¿Linda la hija de Almoraz? - trago en seco y me quito de la ventana -

- Sí ... es simpática, aunque hemos tratado poco - asiente -

- Yo se que estas bastante grandecito, pero uno no mira de esa forma a alguien que le parece simpático ... cuidado Franchesco - me sonrió como para restarle importancia -

- Es que no pensé ... que vendrían también - me toma del rostro con delicadeza -

- Somos una gran familia, ellos hacen parte de nosotros, por más que tenga su historia aparte, siempre vamos a estar unidos - asiento -

- Yo se papá ...

- Por eso tu madre le coloco ese nombre a la villa ... Koblet - lo volteo a mirar -

- ¿Qué significa?

- Tu madre tiene ascendencia noruega, el nombre esta escrito en ese idioma y significa "enlazados" o conectados

- Interesante

Nos quedamos conversando un largo rato, hasta que mi madre llega hasta la habitación con unos bocadillos, que sé quien los hizo, unos panecillos con una taza de chocolate, se notaba la mano de Ian en la elaboración de esos bocadillos.

Hay una gran zona donde se pueden hacer reuniones, todos almorzamos como una gran familia, sonaba raro decirlo en voz alta y más por lo que manteníamos Ivana y yo. Todo el almuerzo intercambiamos miradas furtivas.

La tarde se vino con la llegada de Adriano y esposa, ellos fueron los últimos en llegar, ya que sabíamos que Franco no llegaría. Nos reunimos alrededor de la piscina, esa noche celebraríamos el aniversario de Fabricio y Julia, mi madre planeo todo o bueno casi todo.

Teníamos una gran cena, música, hasta salió a última hora una fogata para la media noche, para cuando los más chicos estén durmiendo. No participe mucho en la conversación y todo estaba prácticamente listo, así que me limite a escucharlos y a veces miraba a Ivana que jugaba con los niños de la familia.

Al rato la veo conversando animadamente con mi madre, como que es entretenido lo que conversan porque se ríen, así que contra todo pronostico mis pies cobran vida y me llevan hasta donde están ellas, se quedan calladas al verme llegar y mi madre me pasa el brazo por los hombros

- Creo que te atrajimos con el pensamiento - frunzo el ceño y miro ha Ivana como buscando información -

- ¿Cómo así? - me enfoco en mi madre y le pregunto -




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