Veintinueve

Franchesco
 

Decretaba que esta será una de las noches más larga de mi vida, el sofá se me antojaba lo más incómodo en que he dormido, sabiendo que ya había dormido aquí, pero no solo, esa vez estaba bien acompañado por alguien que está en estos momentos en la habitación.

Empecé a divagar en mis pensamientos y recuerdo las luces altas hacia nosotros, el carro de rechinando muy cerca, me preocupo y decido llamar a Fabricio a esa hora

- ¿Qué paso, Franchesco? – siento que esta caminado –

- Pues ... estoy en Londres – me interrumpe –

- ¿Qué haces allá? – gruño –

- Escúchame, Fabricio ... la embarré con mi hija y con Ivana, me ofusque y las trate mal, estoy acá tratando de enmendar el error, pero ...

- ¿Algo malo paso? – miro la hora y es la 1 de la mañana –

- Algo así, pero ¿Qué haces despierto a esta hora?

- Una reunión importante, entonces ¿Qué paso? – tristemente trato de acomodarme en el sofá –

- Conversaba con Ivana a las afueras de su edificio y un auto con las luces altas, nos embistió, yo me di cuenta y pues la jale a ella hacia a mí, caímos sobre el andén y como en unas flores, el carro siguió su camino

- Lo voy a preguntar una sola vez ¿están bien? – suspiro –

- Si y no, en el momento en que la jale se torció el tobillo, pero me quede pensando en el auto – lo escucho bufar y golpear como una mesa, pero aun así se escucha tranquilo –

- Es extraño y peligroso... ¿no será tu ex asistente loca?

- ¿Rachel Jones?

- Esa misma, de paso te digo, tiene orden de aprehensión por el robo en la perfumería, así que si es ella, necesito que lo confirmes – bufo –

- No se Fabricio ...

- ¿Dónde estás? - me tapo la cara –

- En el apartamento con Ivana, pero ella está en su habitación y yo en el sofá – la escucho reír –

- Necesitas los videos de la cámara de seguridad para ver la placa del auto y el que lo iba manejando, con eso te ayuda Octavio, comunícate con él a primera hora

- No Fabricio ... no puedo decirle, le daría otro infarto, por ahí no es – bufa y escucho que acomoda cosas –

- Tienes razón ... entonces habla con Rafael, aprovecha que estás ahí

- No está aquí - gruñe –

- Y ese muchachito donde esta... ¡tú estás solo con Ivana! Franchesco nada de locuras – me sonrió –

- Rafael está trabajando en una cafetería y le tocó el turno de noche, no voy hacer locuras por algo te estoy llamando – lo escucho suspirar-

- Pensé que había vuelto a la empresa de Octavio, en fin háblalo con él, cuando tengas algo me llamas, me voy a acostar

- Claro que sí, descansa

Después de conversar con Fabricio trato de acomodarme en el sofá, no sé a qué hora logre dormirme, pero al abrir los ojos tenía ante mí a Rafael con una taza de café, trato de explicarle lo que paso, estamos claros que el señor Octavio no debe enterarse, así que entre los dos haremos la investigación.

Salgo corriendo para el aeropuerto en busca de Valentina, ya está ahí esperándome en compañía de la niñera, está ansiosa y expectante lo primero que hace es decirme si hable con Ivana, le doy el día libre a la niñera y me regreso con mi hija para la casa de Ivana. Tomamos un taxi y en el trayecto observo todas las calles, me causa cierto resquemor que hay alguien que me quiera hacerme daño o hacerle daño a las personas que me rodean, me viene a la mente Rachel Jones, ella no tiene motivaciones para hacer algo así, pero me había robado y había puesto en peligro la vida de mi hija y eso es suficiente para tenerla entre ojos.

Al llegar Rafael conversa con un chico joven, se despide y me hace entrar, saluda a Valentina y le indica la habitación de Ivana, mientras la observo correr hacia allá, me centro en Rafael

- Rafael tengo que ir a la perfumería que tengo acá, almorcemos juntos – miro hacia la habitación y Ivana está viéndonos, le hago señas a Rafael –

- Llegas a la cafetería donde trabajo – me habla bajito –

Nos damos las manos y camino hasta la habitación de Ivana, la puerta está abierta y Valentina está revisando a Ivana, al notarme se baja de la cama y viene hacia mi

- Papito gracias por traerme.... – tanto Ivana como yo estamos sonriendo, le dice algo al oído que sale corriendo hacia donde esta Rafael, aprovecho para conversar con Ivana –

- Te sientes mejor – se observa el pie y asiente-

- Si... un compañero del hospital me reviso y no es nada grave – se queda pensando - ¿Qué conversabas con Rafael?

- No nada en concreto ... le comentaba que Valentina va a pasar el día contigo – entrecierra los ojos –

- Bueno... ¿Tú te quedaras también? - me sonrió –

- No, tengo trabajo pendiente en la perfumería que tengo aquí en Londres, regresare quizás en la tarde o en la noche – mira para todos lados y asiente –

- Que te vaya bien ... entonces – entra mi hija con muchas hojas para dibujar –

- Papito, ¿ya te vas? – Ivana nos observa con suma atención –

- Si, regreso en tarde o en la noche – mi hija se queda pensado y se cruza de brazos –

- Ivana no puede salir, así que yo pienso que deberías traer pizza – se voltea hacia Ivana y le pregunta – ¿te gusta la pizza?

- Obviamente Vale – voltea hacia a mí y me señala –

- Papito cenaremos pizza... - asiento -

- Cenaremos pizza ... me tengo que ir – me acerco y le doy beso en la mejilla a Valentina - se cuidan

Salgo del apartamento rumbo a la perfumería, mientras espero el taxi en las afueras del complejo de apartamentos observo como las cámaras de seguridad dan a la calle, hay dos en ese sector, todavía están las marcas de como el auto derrapo en la calle, levanto la mirada y viene el taxi, así que dejo de pensar en esta situación hasta el mediodía.

La perfumería esta funcionado perfectamente, solamente tuvimos retrasos por el robo, pero del resto todo está bien, me pasee por toda la estancia pensado en todo, me detuve a ver a ciertos clientes, buscando quien puede tener algo en contra de mí y nada, soy nuevo en el mundo empresarial y de los perfumes.