Ivana
Las dos semanas habían pasado sin mayores contratiempos, Fran se quedó conmigo una semana, por temas de la perfumería y reuniones en el conglomerado le tocó volver a Milán.
Hoy volvía a mi trabajo en el hospital y por ende al laboratorio, me sentía con ganas de iniciar el segundo ciclo de la investigación, Sallow sería administrada a una comunidad mas grande, incluidos mis hermanos,
y ellos estaban algo ansiosos.
Al bajar al comedor me encuentro con mi familia, sonrientes, desayunando, conversamos de lo que iba a pasar hoy en las horas de la tarde.
Llegué al laboratorio y con suspiro entre en el, una sensación de paz me sobrecogió y entendí el objetivo de mi trabajo con relación a mi familia; Sallow es la oportunidad de que mis padres puedan ver a sus nietos sin ningún tipo de preocupación.
Me enfoco en que todo esté a punto para la segunda fase de la investigación, converse con los genetistas y enfermeras que estarán de apoyo en el proceso. Fátima no estará de apoyo ya que está haciendo la rotación correspondiente por gineco, me hará falta su profesionalismo.
Empiezo a caminar por el laboratorio cuando empiezan a llegar los aspirantes, a lo lejos veo a mi familia, visualmente noto a mi madre nerviosa, pero dándole ánimos a los chicos, camino hacia ellos y al verme su cara de alivio es visible.
- Familia... - me rodean y me abrazan - ¿Nerviosos?
- Uff mana... - me contesta Javier -
- Rafa, Javie... gracias por confiar en mí - me sonríen -
- Es por nuestro bien y no está de mas decir que eres la mejor en tu trabajo...
Me quedo en silencio sopesando sus palabras, suspiro, los observó con todo el amor del mundo, me les tiro encima y nos damos un abrazo de tres, de reojo veo a mi padre tomándonos una foto.
Después del momento familiar, los llevo a sus respectivas camillas, una al lado de la otra, los dejo con una enfermera que esté pendiente.
Al cabo de unos 30 minutos estamos listos, desde mi posición logro divisar a mis hermanos, sonríen entre ellos, me tranquilizó al verlos. Camino por todo el laboratorio mientras es suministrado Sallow, en la gran mayoría no hay muchos contratiempos, hubo pocos casos donde tuvieron un poco de fiebre, entre esos Javier.
Ese episodio de fiebre fue el 10% de todos a los que se les suministro Sallow, me quedé con los genetistas hasta que lo superamos.
Me acerco hacia Javier que ya superó la fiebre y me enfoco en hacerle un seguimiento más de acerca, tomo algunas muestras, para saber qué pasó. Rafa es fuerte, un roble y eso me tranquiliza, también le hago pruebas para ver qué tal le fue con Sallow.
Las semanas siguientes llegaron mis resultados, había salido todo según lo previsto, el porcentaje de Sallow en mi cuerpo había llegado a un 98.9 % de efectividad, eso era un triunfo, en el laboratorio se escucho un atronador aplauso y más cuando se dieron los datos de la comunidad más grande, todos los resultados estuvieron sobre 95%, el porcentaje más alto de efectividad lo tenía mi hermano Javier, con 99.2% .
Me sentía plena y feliz, mi investigación había servido, era una realidad, más cuando firme el acta de comercialización y distribución. Era un triunfo para mi carrera, Para mi futuro y sobre todo mi familia.
Quería abrazar a Fran, quería verlo, pero estábamos a miles de kilómetros de distancia, separados, me plantee la opción de hacerle una vídeollamadas, pero en el laboratorio estaban eufóricos, así que mejor con más tranquilidad me comunicaré con él o en el mejor de los casos lo sorprendo llegando a Milán de improviso.
Opte por llamarlo, me aleje de todos, de lejos logro ver a Fátima, me abraza
- ¡Felicitaciones!... - nos abrazamos otra vez -
- Ay gracias, todos están celebrando allá, ves que también contribuiste a este momento... Voy a llamar a tu hermano - se sonríe y asiente -
- Si hay comida entro a ese desorden - se me acerca - me saludas a Fran
- No se de donde apareció comida, pero si hay... con gusto le doy tus saludos
Entra corriendo al laboratorio e intento llamar a Fran y no toma la llamada, le dejo un mensaje de voz
"Hola amor, todo fue un éxito... Mañana tenemos una rueda de prensa... quería compartir contigo esta alegría... Te amo"
Pasaban las horas y Fran no contestaba, por momentos llegue a pensar que algo había pasado, pero es un hombre ocupado con muchas ocupaciones igual que yo. Así que me dejó llevar por los chicos a celebrar a un restaurante, después de la cena, de camino a casa converso con Fátima
- ¿Has hablado con tu hermano hoy? - frunce el ceño -
- Hoy, no ¿Algo pasa? - niego -
- No pasa nada, le dejé una nota de voz en la mañana de hoy, pero no me contestó, no lo ha visto - me sonríe y me abraza -
- Debe estar sumido en su laboratorio - asiento -
- Eso debe ser.... - me quedo pensando - Fátima ¿Crees que soy tóxica?
- No me parece - nos miramos y nos reímos - simplemente quieres compartir algo sumamente importante para ti y el señor "quien sabe dónde anda"
- No le digas que te pregunte esas cosas - se carcajea -
- Cuenta con mi silencio - nos reímos -
- Subamos... ¿Te apetece una copa de vino, para rematar la celebración - asiente -
- Claro que sí cuñada
El remate de la celebración se extendió hasta la madrugada, conversamos, reímos hasta más no poder. Desperté aún con la ropa puesta de ayer, al mirar el reloj me doy cuenta que es tarde, debo estar en el salón de eventos del hospital en menos de una hora.
Salgo de mi habitación directo hacia la cocina del apartamento, tocó la puerta de la habitación de Fátima cuando paso por su lado, coloco la cafetera en tiempo récord, me regreso y entro directo hacia el baño, hago en tiempo récord, al salir me enfrento a que ropa debo colocarme, con el uniforme del hospital no debo ir, escucho que tocan la puerta de mi habitación