La primera dama

feliz cumpleaños 2da parte.

Terminado los fuegos artificiales, Santiago la volvió a acompañar a la mesa donde se encontraba un pastel, por sorprendente que pareciera era de su pastelería favorita, además de eso…lo que mas le sorprendió fueron los muñequitos, dos muñequitos donde la mujer o su representación se encontraba con un hermoso vestido, tan real y al costado suyo Santiago o un muñeco en representación suya, colocándole una corona…una obra de arte para un pastelero.

-Quería hacer algo más extravagante…pero creo que esto es bueno.

-Es hermoso…quiero una corona similar…-dijo en broma Sofia.

-Cariño…creo que no te has dado cuenta mira bien. -Sofia se acercó a ver el diseño de la corona y lo noto…era casi imposible como podría recordarlo. -esta es la corona que mis padres mandaron a diseñar para ti, luego de pasar por muchos diseños, cuando aun tenias 11 años…esta fue la que mas te gusto y fue la corona que utilizaste el día de nuestra boda.

Sofia no podía creerlo…aquella corona que era tan hermosa, no solo los diseños si no también por el acabado…ahora que lo pensaba era lo mismo con el collar, diseños únicos y acabados perfectos…tenia la corona guardada, no solo por que no tenia donde lucirlo si no por su extravagancia, quería que su hija…si tenía una lo utilizase el día de su boda al igual que ella.

-Me alegra que siempre estes pendiente de esos pequeños detalles.

-Contigo todos…ahora prendere la vela, pedirás un deseo…como cuando eras pequeña.

-Por su puesto.

Santiago prendió la velita y luego tomo su teléfono y grabo a Sofia…para él era increíble tenerla y pensar que casi la pierde por una tontería.

***

Sofia ingreso acompañada de Santiago a la empresa, ya que debía firmar unos papeles en los cuales cedía la presidencia nuevamente a su padre durante el tiempo que durase su gobierno.

-Tienes mi tercer regalo en regalo en tu oficina así que ve…terminare la junta lo más pronto posible.

Sofia camino a su oficina y al llegar quedo perpleja…su oficina parecía una florería, flores de todo tipo adornaban su oficina y a un costado de había un montón de regalos, se acerco un poco mas y logro ver que eran de muchos inversionistas, socios y empleados de la empresa…se encontraba viendo los regalos, cuando un ramo de lirios llamo su atención se acerco con tranquilidad y al acercarse logro notar algo…tomo el ramo en sus manos y creyó desvanecerse.

Como había llegado esto acá…rosas violetas en el centro, diez de ellas tan hermosas e imponentes como cada que las veía…escondido logro ver algo por lo que lo saco, una pequeña cajita y una tarjeta…tomo la tarjeta y la leyó.

‘Mi muñeca hermosa…te extraño…quisiera estar contigo en tu cumpleaños, perdóname…prometo que cuando regrese lo haremos…espero te guste mi regalo.’

Abrió la caja y quedo asombrada…un hermoso anillo de esmeralda…un estilo aristocrático con incrustaciones de diamantes a sus lados…sin duda un anillo hermoso y único, nada que envidiarle a ninguna joya.

Cerro la caja y la puso en su cartera. Estaba por llamar a su secretaria cuando la puerta de su oficina fue tocada, dio un pase, con la creencia de que era su secretaria…contrario a sus deseos era el secretario de Santiago, Enzo…se puso nerviosa al tratar de esconder el ramo cuando el hablo.

-Pasa algo señora.

Sofia se dio por vencida y se acercó a Enzo, le entrego el ramo de rosas y lirios.

-Necesito que lo escondas o te lo lleves…has lo que desees, pero desaparécelo y no dejes que tu jefe lo vea o de lo contrario tu cabeza rodara.

Enzo se asustó ante la afirmación de Sofia…además de eso quedo aterrorizado al ver el color de las rosas, era algo que no entendía a la perfección, pero Santiago le había dado órdenes claras de que podía haber todo tipo de flores, de todos los colores a excepción de las rosas violetas y era justo lo que estaba viendo.

-Entiendo. -respondió firme. -el CEO la espera en su oficina.

Sofia dejo sus cosas en su oficina, además de pedir a Enzo que sacara ese ramo, llamo a su secretaria y pidió que tanto las flores como los regalos fuesen enviados a su casa. Al estar en la puerta de la oficina, escuchó la voz de una mujer…las risas de Santiago y esta, sintió que algo enardecía en su interior, aun así, de la manera más paciente y tranquila ingreso a la oficina sin tocar, dado que quería ver que ocurría…al abrir la puerta quedó asombrada por la escena que veía.

Una mujer con un vestido demasiado corto para su gusto, un maquillaje excesivo además de un perfume asfixiante. Miro con una sonrisa sarcástica a Santiago, ya que la mujer se encontraba demasiado cerca suyo, tanto que si la empujaban podría caer en sus brazos, Santiago sentado en su escritorio como si nada le incomodase.

-Cariño…conseguiste nueva concubina, por favor hazme saber que estamos en esta condición, no dejes que mi amante se escape. -dijo Sofia con evidente sarcasmo, pero con los celos hasta la coronilla solo que no deseaba demostrarlo, no así…no se dejaría derrumbar por él…primero le daría batalla…hasta hace unos minutos estaba demostrando u amor infinito y ahora estaba con una mujer muy cerca suyo.

Santiago la miro y sintió que sus venas se saldrían de su frente, no solo en la cena menciono la idea de un amante, estaba loca o en verdad lo estaba poniendo sobre la mesa.

Sofia lo miro y al notar el cambio de humor de Santiago decidió salir, pero algo la detuvo.

-Señor De Rosas…enserio me dará ese papel…que le parece si para celebrar mi futuro acenso en la actuación, pasa por mi departamento esta noche…al parecer a su novia no le molesta. -hasta ahí había sido su límite, como se atrevía a coquetear de manera descarada frete suyo además de eso decir que era su novia cuando medio país si no es todo…saben que es su esposa.

Camino hasta la mujer que se encontraba al lado de Santiago y la miro de pies a cabeza al igual que ella a Sofia y luego de eso Sofia hizo un movimiento.




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