Parte quince. Cabeza de fósforo.

Pague una habitación en un hotel de veinticuatro horas para poder dormir un poco, realmente me sentía agotada y adolorida. Un rato después de que me acosté escuche a lo lejos la voz de Helena pero estaba tan cansada que no quería abrir los ojos, al menos no ahora. 
Al despertarme me sentía como nueva, como si hubiera dormido diez días seguidos. Me quede recostada en la cama viendo que no estaba en la habitación que alquile, era un lugar muy chiquito a penas habia una cama, un pequeña mesa con dos sillas y un mini refrigerador. Mientras observaba todo escuche unas voces acercándose así que volví a acomodarme para fingir que dormía. Escuche la puerta abrirse y unos segundos después cerrarse.
-Aun sigue dormida-
Esa era la voz de Helena podía reconocerla fácilmente.
-¿Cuanto tiempo mas vamos a dejar que siga durmiendo?-
-El tiempo que su cuerpo necesite-
-Abuela, por favor-
-Ella no es como nosotras Briana, es mas poderosa porque eso su cuerpo tarda mas en recuperarse-
-Madre, Bri tiene razón no podemos dejarla dormir mas tiempo-
-Aun no-
-Esto es absurdo, te aferras a algo imposible-
-Mama- advirtió la voz mas aguda-
-No hija tiene que escucharlo. Ada no va a volver, y esta es su hija, ella no va a traerla de vuelta. Tienes que superarlo, nos pones en peligro a todas-
-Si existe la mínima posibilidad de traer a mi hija de vuelta a casa, lo voy a hacer. Les guste o no-
-¿Y si eso significa poner en peligro a tus otras hijas?, ¿Aun así lo vas a hacer?-
-Si esa basura te hubiera secuestrado a ti, haría exactamente lo mismo que estoy haciendo por tu hermana, son mis hijas, sangre de mi sangre. No me voy a rendir-
Abrí con firmeza buscando a Helena con la mirada, estaba sentada en una de las sillas y su mirada se veía realmente cansada. Por otro la mujer que supongo que era su otra hija tenia una fuerte presencia, y se parecía mucho a Helena solo que mas alta y delgada. Y supongo que su hija era muy parecida solo que ella tenia el pelo caoba claro y de ojos casi grises.
Me destape ganándome las miradas de las tres mujeres, todas me veían de manera diferente aunque todas compartían un poco de desconfianza en la mirada. Me senté en la cama y dirigí mi mirada a Helena.
-Tu quieres a tu hija de vuelta. Yo quiero a ese bastardo suplicando por su vida. Tu me muestras su cara y yo te traeré a tu hija-
-A tu madre-
-Progenitora. Mi madre es Melissa McCall. Pero no voy a discutir eso. ¿Tenemos un trato?-
-Madre, debemos discutir esto con el conse...-
-Trato- afirmo Helena con autoridad en su voz-
-Bien. Entonces den gracia que me siento de buen humor o si no estarían todas muertas por secuestrarme- me burle mientras me ponía de pie- Podrías haberme dicho lo que iba a pasar en el hotel, cuando casi me matas-
-No intentaba matarte, intentaba liberar tu poder-
-Y lo hiciste pero si Lucifer no hubiera llegado probablemente muchas personas hubieran muerto-
-Es un precio muy razonable para el poder que posees ahora-
-No me interesa cuando poder se obtenga o cuanto poder gane, nadie tiene que morir por mi. Es algo que no se discute y algo que jamás perdono, si alguien hubiera muerto, arrasaría con tu aquelarre en cuestión de horas. No vuelvas a hacer algo como eso jamás porque créeme no me controlo cuando me hacen enojar-
-¿Acabas de amenazar a mi abuela?-
La chica llamada Briana se acerco a mi de manera rápida para hacerme frente.
-Acabo de amenazar a la persona que me secuestro, ¿Algún problema?-
No quería buscar pelea pero no me iba a dejar amedrentar por nadie, sea quien sea.
Su mano comenzó a iluminarse soltando un brillo dorado justo antes de intentar atacarme. Sujete su mano con fuerza haciendo que esta terminara de rodillas y sin poder contenerlo mis alas se abrieron de par a par.
-¿Que mierda?, ¿Que carajo eres?- cuestiono la chica a mis pies-
-Soy un Nefilim pendeja, ¿Que no estas viendo?- le pregunte soltándole la muñeca-
-Pareces una puta paloma- comento burlándose-
-¿Y tu que ibas a hacer una tostada con esa mano?-
-Te iba a hacer pollo asado-
-¿Pollo asado?. No hables de comida que tengo hambre. Esta mocosa es una maleducada, metiéndose en conversaciones ajenas, ¿No te enseñaron a respetar a los mayores mocosa?-
-Tengo veintitrés para tu información pollo gigante-
-Yo tengo veinticuatro, soy mas grande así que me respetas cabeza de fosforo-
-¿Cabeza de fosforo?-
-Es lo que eres-
Escondí mis alas y me cruce de brazos a lo que ella hizo lo mismo.
-No me caes bien-
-¿Y mi que?-
-Es bueno ver que se llevan bien-
Ambas giramos nuestras cabezas para ver a Helena.
-Después de todo son primas. Son familia-
-Lo que me faltaba- me queje- Ser familia de un fosforo-
Revolee los ojos y me fui a sentar en la cama.
-Mama dile algo- se quejo la pelirroja-
La mujer estaba en silencio mirándome fijamente.
"Genial, otra loca", pensé.
-¿Se parece mas a tu hermana de lo que aparenta verdad hija?-
Helena se levanto de su asiento y camino hasta quedar al lado de la mujer para después tomar su mano.
-Se ve igual a Ada de joven- comento la mujer tratando de contener las lagrimas-
-¿Podemos dejar todo esto para después?, necesito ver la cara de ese infeliz-
-¿Como planeas hacerlo?, ¿Si sabias que no pueden tomarse fotografías de los lobos?- pregunto burlándose Briana-
-Lo se, mi hermano es un lobo. Tengo experiencia con esas cosas-
-¿Conoces a los hijos de mi hermana?- pregunto la mujer-
-No, no los conozco pero mi hermano Scott es un lobo por eso se lo de las fotos-
-Alfa real de Beacon Hills es su hermano adoptivo-
-No es cierto, ¿Ella es la hermana del Alfa?-
-Si cabeza de fosforo, soy yo-
-Eres una asesina de niños, no podemos tenerla acá- grito la hija de Helena-
-Nunca he matado a ningún niño. Aunque nunca hice nada por aclarar esos rumores. Todos los niños están a salvo en una reserva, son cuidados, alimentados, van a la escuela y entrenan para defenderse solos en la vida-
-¿Jamás haz matado niños?-
-No, ni una vez. Si he matado a muchos pero debo aclarar que si se lo merecían. Pero jamás niños o adolescentes-
-¿Y como sabemos que es verdad?-
-No lo saben y no voy a mostrarles, no quiero poner en peligro a tantas personas-
-Es un pollo gigante pero dice la verdad- comento Briana- Lo veo en su aura, no esta mintiendo-
-Se los dije-
-Tienes una reputación muy mala-
-Era necesaria para que no lastimaran a mi familia o amigos, al menos así era hasta que ese infeliz se le dio por querer matar a mi hermano-
-¿Porque estabas tan lastimada?- me pregunto Briana-
-Porque el mando a casi treinta hombres a matarme unas horas antes de que ustedes me secuestraran-
-¿Treinta?-
-Mas o menos, no me puse a contarlos a todos-
-Si envió tantos es porque empieza a perder la paciencia-
-Tiene miedo, sabe que su final se acerca- comento Helena con una sonrisa-
-Si es así como dicen, eso no es bueno para Ada ni para sus hijos-
-Tiene razón, no es bueno para ella-
-No va a lastimarla, no puede, es su compañera-
-Mama, eso no impidió que la lastimara todos estos años-
-Por eso necesito ver su cara-
-¿Como planeas verla?-
-Tocando tu mano. O al menos así funciono con Lucifer, así vi lo que paso en Italia. Después de lo del hotel no recordaba nada hasta que lo toque y lo vi todo, así que pensé que quizás funcione contigo-
Ella estiro su mano hacia mi para que la tomara y así lo hice.