La primogénita del Diablo

Parte sesenta y cuatro. Son míos.

Helena me presento al hombre de nombre Jared Doherty. El hombre en cuestión era el brujo líder de unos de los aquelarres mas importantes de Alemania y estaba realmente ansioso por conocerme ya que tenia varias propuestas para hacerme. 
Dicho hombre tenia una altura promedio, su pelo era negro azabache con algunas canas en sus patillas, sin un solo rastro de barba en su cara y su piel era demasiado blanca pero no al punto de compararse con los Cullen. 
-¿Que tipo de propuestas señor Doherty?- le pregunte bebiendo un poco de jugo- 
-Por favor princesa dígame Jared- 
-Jared- 
-Quiero que mi nieto que Peter este en su consejo infernal- 
Mas que un pedido sonó como una orden y eso no me gusto para nada. 
-Tendría que calificar su liderazgo y la capacidad que tiene para llegar a la gente- comente acomodando el vestido de mi hija- 
-Por supuesto pero seria realmente favorable que lo tome en cuenta- 
-Suelo matar a quienes se atreven a darme ordenes señor Jared y lo acaba de decir no a gustado para nada, ¿Debería matarlo y ahorrarme un problema?- 
-Lamento mucho que se haya mal interpretado mi sugerencia princesa- 
-Me gustaría tener una charla con su nieto, le diré a Briana que agende una cita para poder conocerlo- 
-Muchísimas gracias- 
Dicho esto el hombre se marcho rodeado por varias personas dejándome a solas con Helena. 
-¿Crees que ese tipo va a ser a un problema?- 
-Jared es poderoso pero le teme demasiado a tu padre. ¿Vas a nombrar a su nieto parte del consejo?- 
-Ni de chiste, ya tengo elegidas las personas que formaran parte del consejo- 
-¿Quienes son?- 
-Serán anunciadas en unos días pero déjame asegurarte que todas y cada una de las personas que elegí merecen estar ahí, se lo han ganado y confió en que pondrán los problemas de la gente por sobre los suyos- 
-¿Hace cuanto que lo tienes planeado?- 
-Desde que mate a  Draven- 
Ella me dio una pequeña sonrisa y se levanto de su asiento para irse dejándome sola con mi hija. 
Unas agotadoras cuatro horas después ya habia conocido a varias brujas y brujos de altos rangos y realmente poderosos pero no fue hasta que me encontré con Baltazar que le pedí si podía borrar las memorias de cada cazador en la lista que me habia dado Caín, ya no necesitaba morir mas gente ahora que Monroe estaba muerta. Ya era hora de ponerle un punto final a los cazadores y poder pensar en un futuro mas libre para todos nosotros. 
Un rato mas tarde me encontré con Aiden y ambos nos sentamos a conversar en lo que habia pasado esta noche y en como habia asimilado que yo ya no sentía nada por el. Me dijo que le habia dolido pero que no podía juzgarme ya que para mi habían pasado siete años y seria injusto de su parte esperar que después de tanto tiempo yo siguiera amándolo como siempre. Eso me destrozo pero de alguna manera me daba cierta tranquilidad de saber que por fin ambos podíamos avanzar sin dañar la amistad que teníamos a pesar de todo. 
Después de que todos los invitados comenzaran a irse por fin puede sentarme a comer tranquila quitándome los zapatos y el vestido para vestirme como una persona normal. 
-¿Mami tenias mucha hambre?- me pregunto Thomas mientras se sentaba a mi lado- 
Se veía cansado así que me senté un poco mas atrás y estire mis brazos para levantarlo de su silla y sentarlo en mis piernas. 
-Si mi amor moría de hambre, ese vestido era muy lindo pero apretaba mucho- murmure mientras el se prendía a mi pecho- Trata de dormir mi amor que ya es muy tarde- susurre acariciando su carita- 
Sus ojos se cerraron y Paul se sentó a mi lado con la bebe completamente dormida en sus brazos. 
-Nunca vi un niño correr tanto, reírse tanto e ir de un lado hacia el otro saludando a todo el mundo- 
-Eso es porque es el ser mas hermoso y amable del mundo- comente acariciando su carita antes de tomar su mano y besarla- 
-Ya quiero ir a casa- 
-También yo- 
Después de que termine de comer tanto Thomas como Amara estaban completamente desmayados así que estábamos listos para volver a casa cuando vi a Isaac algo desesperado buscando algo así que nos acercamos para ver que le pasaba. 
-¿Que se te perdió?- 
-Hicimos un recuento cuando llegamos a la reserva y falta uno de los niños- nos informo angustiado- 
-¿Que edad tiene?- 
-Casi tres años- 
-¿¡Me estas diciendo que se te perdió un niño de dos años Isaac!?- le pregunte histéricamente en voz baja para no despertar a los niños- 
-Su hermanito dice que creyó que estaba con Alec pero el dice que no lo vio en casi toda la noche- 
-Me lleva la mierda Isaac- 
Mi madre se acerco a nosotros al verme algo alterada y le pedí si podía llevar a los niños a casa porque se habia perdido un niño de dos años y tenia que buscarlo si o si. Ella accedió de inmediato sin siquiera decir una palabra, una vez que tomo a los niños en brazos creo un portal y se llevo a los niños. 
-Isaac tu sigue buscando por estos lugares, Paul ve a buscar a los lobos que queden dando vueltas y miren en el bosque, yo iré a buscar cerca de la cantera, no puede haber llegado tan lejos pero tengo un presentimiento. Vallan- les ordene- 
No quedaban muchas personas así que a cada uno de los que me cruzaba les pedía que buscaran a un niño pequeño que estaba perdido. Entre mas me adentraba en el bosque mas grande era la necesidad de encontrarlo, mi corazón estaba realmente acelerado y mis manos temblaban muchísimo. 
<Puedo percibir un leve aroma a perfume de bebe> 
-Lo se yo también, es demasiado débil- 
<A tu derecha> 
Esta vez comencé a correr tan rápido y a lo lejos distinguí una pequeña figura parada en el borde del acantilado. 
<¡Mierda, mierda, mierda!>, pensé una y otra vez mientras mas me acercaba. 
Cuando estaba a punto de llegar vi que el pequeño dio un mal paso y su cuerpo desapareció de mi vista. Sentí como mi corazón se detenía pero aun si no deje de correr. Al llegar me lance sin siquiera detenerme, mientras caía al vacío podía ver la expresión de pánico del niño, eso me destrozo por completo aumentando mi pánico. Cuando por fin lo alcance lo aferre a mi cuerpo y cambie mi posición para que mis pies fueran los que impactaran contra al agua. Al tocar el agua un dolor agudo resonó en mi cuerpo pero no tenia tiempo para que quejarme ya que estábamos debajo del agua así que comencé a dar patadas para poder salir, al sacar la cabeza las olas eran realmente fuertes y no veía ninguna señal de los lobos o de alguien mas. La oscuridad de la noche y del agua era realmente evidente pero lo que si notaba es que las olas nos acercaban cada vez mas hacia la pared y en cualquier momento golpearíamos con ella. El niño estaba completamente aferrado a mi cuello de tal manera que a penas podía respirar bien. Estire un poco mi mano para poder crear un portal, solo me habia salido una vez y con mucho esfuerzo pero ahora no tenia tiempo de concentrarme la pared se veía mas y mas cerca y las olas nos golpeaban con fuerza. 
-Por fa...vor fun...ciona...por...favor- 
Estábamos a nada de golpear la pared y mi desesperación era aun mas grande. 
-¡Ábrete ya pedazo de mierda!- grite estirando mi mano por completo- 
Sentí mi cuerpo arder y un portal se abrió delante mio justo cuando una potente ola nos lanzo a través de este haciendo que mi cuerpo impactara contra el piso de manera dura girándome varios metros mientras mis brazos cubrían el cuerpo del niño para que no se lastimara. 
Al detenerme quede tirada en el piso de espaldas con los ojos cerrados hasta que poco a poco los fui abriendo para encontrarme a Sam mirándome preocupado antes de aullar para llamar al resto. Mi respiración era realmente agita al igual que la del niño. Poco a poco fui soltando el amarre de mis brazos para comenzar a tocarlo y asegurarme de que estuviera bien. 
-Estamos bien. Estamos bien- susurre poniendo una de mis manos en su cara- 
Un instante después la visión de Paul con los niños se hizo presente pero esta ves se enfoco en uno de los niños de detrás suyo, el de menor estatura. Mis lagrimas comenzaron a salir mientras una sonrisa se formaba en mi cara 
-Mírame- le pedí acariciando su carita- Estamos bien, ya paso todo amor mírame- 
Levanto su cabeza con cuidado y sus ojos azules se fijaron en los míos. Pegue mi frente a la suya mientras ponía mis manos en sus mejillas. 
-¿Estas bien mi amor?- 
El simplemente se largo a llorar y volvió a abrazarme. 
-Ya estas bien mi amor, ya estas conmigo. Nada malo va a pasarte- le susurre abrazándolo- 
Paul llego unos segundos después tirándose al piso para abrazarnos a ambos mientras pegaba su frente a la mía. 
-¿Están bien?- me pregunto mirándome a los ojos- 
-Lo encontré. Lo encontré- le dije entre lagrimas- 
-Lo encontraste- susurro besando mi mejilla- 
No creo que haya entendido a lo que me refería pero por ahora solo estaba feliz de que pude salvarlo. 
Un poco después me ayudo a ponerme de pie y Isaac se acerco corriendo hacia nosotros junto con Deucalion y Alec que traía en sus brazos a un niño un poquito mas grande que el que tenia entre brazos. Cuando Isaac trato de quitármelo de los brazos un gruñido salió de mi garganta sin poder controlarme y me tire hacia atrás para impedir que lo hiciera. 
-Debo llevarlo a la reserva- 
-¿Sus padres?- le pregunte secamente- 
El negó con pesar. 
-Cazadores- soltó con una clara tristeza en su voz- El es su hermanito, Alan- señalo al niño que Alec tenia en sus brazos y que parecía estar inquieto en los brazos del castaño- Su nombre es Ian- dijo señalando con sus ojos al pequeño en mis brazos- 
Me dolían demasiado las piernas por la caída pero aun así camine hasta el pequeño Alan y toque su cara, de inmediato vi que era el ultimo niño de mi visión así que no dude en estirar mi brazo para ver si quería venir conmigo. Me miro por unos segundos y se tiro a mis brazos para abrazar a su hermanito. 
-Bren...- me llamo Deucalion-...ellos...- 
-Son míos- afirme sin dudar- 
-Esta bien. Nadie va a quitártelos pero Ian necesita ser revisado- 
-Iré con el doctor Cullen, el nos va a revisar a los dos- 
Cuando Isaac, Deucalion y Alec se fueron en un portal que habia creado Jade una de mis primas le pedí si podía abrir otro hacia la casa de los Cullen. 
Después de que Carlisle nos reviso a los dos, dijo que pequeño estaba en perfecto estado de salud al igual que su hermanito, también me dijo que debía no hacer esfuerzo alguno al menos por algunas semanas ya que toda esta conmoción podría haber afectado a los bebes. 
Una vez que volvimos a casa y le conté a mi madre lo que habia pasado ella fue a buscar algo de ropa para los niños mientras yo los bañaba. 
-¿Así esta bien el agua?- les pregunte dándoles los patitos que usaba Thomas para bañarse- 
Mientras los niños jugaban con los patitos la ropa me empezaba a incomodar demasiado así que me pare para quitármela y cuando Ian me vio alejarme un poco trato de salir de la bañera para venir conmigo. 
-Esta bien amor, esta bien, no voy a irme, solo voy a quitarme la ropa para entrar con ustedes- le dije acariciando su cara- 
Su mirada se relajo un poco y volvió a sentarse en la bañera pero sin dejar de verme. Me quite la ropa quedándome solamente en ropa interior, deje la ropa en el canasto de ropa sucia, la cual debía poner a lavar mañana sin falta. Me metí en la bañera y comencé a bañar a los niños, primero a Alan y después a Ian quien no dejaba de bostezar. Para cuando termine con los dos mi mama se encargo de secarlos dentro del baño mientras yo les hablaba detrás de la cortina mientras me bañaba. 
Al terminar de cambiarme tome a ambos niños en brazos y camine hacia la cocina para prepararles una leche caliente antes de dormir. 
Una ves en la cama Alan se acostó al lado de Thomas quien estaba completamente desmayado y Ian se acostó al lado de su hermano pero sin soltarme en ningún momento. 
La cama parecía cada vez mas chiquita y Paul a penas entraba en ella. Una vez que se acostó detrás de mi me abrazo por la espalda poniendo su mano en mi vientre para acariciarme suavemente. 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.