CAPÍTULO 9

Aria

Cuando llegue a casa, me dijeron unos empleados que mis hermanos estaban con mi padre Jhon. Seguro que se llevaron una buena bronca. Pero como sé cómo son, ellos irán a su cuatro de juegos después. Así  que voy hacia allá para esperarlos y poder hablar con ellos con tranquilidad.

Cuando me fui con Zeus y Dale, nos pusimos a hablar y ya es oficial .Somos pareja, sé  que encuentro se entera cierta plástica rubia, se va a enfadar mucho. No le tengo miedo ha esa, mi mundo es muy cruel y no hay nada que esa pueda hacer.

En la habitación de los juegos de mis hermanos, veo como lo tienen ahora. A la simple vista no hay nada raro, hay consolas, ordenadores, una canasta, una mesa de ping pong…. Miro en el armario y hay más juegos, pero como los conozco, muevo la pared del armario y BINGO. Hay botellas de alcohol. Hay de todo tipos incluso varias botellas de vino, creo que son de la bodega personal de mi madre.

Mientras que espero a que ellos entren, cojo una de las botellas  de vino y una copa.

Cuando me la estoy terminando, entraron y me explicaron lo que había pasado, juntos ideamos un plan para poder leer los diarios de mi madre. Estamos seguro que en  alguno de ellos, estará las respuestas. `Pero también puede ser que no, no sabemos cuándo los empezó a escribí ni que puso en ellos.

Después de hablar con ellos, fui hasta mi habitación. Ha sido un día muy largo y quiero descansar ante de cenar.

AL DIA SIGUIENTE….

Esta noche, vamos a comenzar con el plan. La primera parte es disimular un envió de armas y esperar, no sabemos quiénes van a aparecer o cuantos son. LO que sí sabemos es que llevaran armas y estaremos listos para lo que pueda pasar.

Cada uno está en su puesto, todos saben lo que tienen que hacer. Por primera vez, lidero la trampa.

Ya llevamos varias horas escondidos, pero no ha aparecido nadie. Según Atenea, alguien se ha ido de la lengua. No es normal esto, si no ha aparecido es porque ha sido avisado.

No puedo tener a un topo dentro del equipo, la mayoría son gente que su familia ha trabajado para la mía y el resto son nuevos reclutas. No puedo sospechar de mis amigos ni de mis hermanos.

Si no puedo confiar en mi gente, ya no me queda nada. Quiero pensar, que no ha sido nuestro momento para acabar con esa gente y que tendremos más oportunidades.

Después de esperar un poco más, decidí dejarlo y volver a casa.

Zeus –Hemos tenido mala suerte, pero la próxima será nuestro.

Aria –La próxima, será con la mercancía de mis hermanos. Ellos no lo saben, pero los pienso usar para acaba con esto