El domingo había quedado de verme con Alexei y con los chicos para que me enseñaran un poco el pueblo.
Recuerdo haber estado muy emocionado por la salida.
No tanto por conocer el pueblo, sino porque tenía la necesidad de pregúntarle a alguien sobre ese tal Vladimir, Saber más sobre él y sobre su familia.
Decidí preguntarle únicamente a Alexei. Sospecho que es el único en el que puedo confiar en este pueblo olvidado por dios.
Por la tarde, Alexei paso por mí en su carruaje familiar... es una suerte que él sea mi vecino más cercano.
Al subir el me saludo dándome un pequeño golpe en el brazo.
-¡Eh, campeón!- Saludo Alexei con una gran sonrisa.
-¡Hey!- Respondí en el mismo tono.
-¿Listo para conocer el pueblo?- Me pregunto recargándose bruscamente en el respaldo de su asiento.
-Eso creo... ¿Pasaremos por el resto de los chicos también?
-No, ellos son personas normales y viven en el pueblo.- Respondió riendo.
-Solo a nuestros padres se les ocurre vivir a una hora del pueblo.- Comente riendo.
-Sí, esa casa y este carruaje fue lo único que me dejaron mis viejos.
Mire a Alexei alzando una ceja.
¿Le dejaron? Aún no está casado, no puede vivir el solo ni mucho menos haber heredado algo.
-¿Te dejaron? ¿Ellos no viven contigo?- Pregunte.
-Mi madre falleció cuando yo tenía 4 años, y mi padre murió solo un par de años después.
-¿Vives solo desde los 6?- Pregunte boquiabierto.
-Jajá, no seas idiota. Comencé a vivir solo hace apenas algunos meses, antes de eso vivía con mi abuela.
-Lamento tu perdida...- Dije mirándolo con tristeza.
-No te preocupes, ni siquiera puedo recordarlos.- Respondió con un tono relajado, como si no le importara o le doliera en lo más mínimo.
Durante el resto del camino continuamos hablando de distintos temas.
Ambos estábamos riendo... Hasta que recordé a Vladimir.
-Alexei...- Dije en un tono un poco más serio.
-¿Si?- Dijo mientras reía.
-¿Tú conoces a un tal Vladimir De Villiers?
La expresión de Alexei cambió radicalmente.
Frunció el ceño y en un tono serio me pregunto...
-¿Qué tienes tu que ver con ese hombre?
-Ayer estuvo en mi casa. Parece que hizo amistad con mi padre.-Respondí.- ¿Qué pasa con él? ¿Hizo algo malo?
-No, para nada...
-¿Entonces?- Dije con curiosidad.
-Encontraron una pintura muy antigua... de hace unos 200 años...- Comento mirando a la ventana.- El hombre de la pintura es igual a él, incluso tienen los mismos lunares.
-¿De verdad?
-Si... Se dice mucho sobre él.
-¿Sabes algo de su familia?
-Solo sé que se cuentan cosas horribles sobre el... asesinatos, brujería, etc.- Alexei me miro frunciendo el ceño.- ¿Tiene familia?
-Nos contó algo sobre sus hijos. Creo que los conoceremos en la fiesta a la que nos invitaron.
Alexei abrió los ojos como platos.
-¿¡VAS A SU CASA!?- Pregunto Alexei casi gritando.
-No tengo opción.
-Increíble... es tu oportunidad para encontrar más respuestas.
-No lo había visto de esa forma.
Ya quiero que sea el día de la fiesta...
*PV/ Vladimir*
Después de haber tenido una exquisita comida con la familia Bonnet decidí que volver a casa con mis hijos sería la mejor opción.
Baje del carruaje y abrí la puerta de mi casa.
-¡Hola, niños!- Grite mientras entraba a mi casa.
Vi que los tres estaban en posición de ataque mientras me miraban.
-Agh, Padre... si vuelves a entrar así vamos a matarte.- Dijo el más grande de mis hijos.
-Por lo que veo estaban entrenando.- Dije sonriente.
Mi hija, la mayor de más mujeres solo se limitó a asentir con la cabeza.
-¡Papi!-Grito la más pequeña de mis hijos mientras corría hacia mi.- ¡Ya quiero que sea la fiesta!
-Yo también querida.- Respondí sonriente.- Adivinen que.- Dije mirando a los dos mayores.
-¿Qué pasa, padre?- Respondió el muchacho.
-Invite a la familia Bonnet, a los nuevos del pueblo.- Dije con emoción.
Mi hija mayor rodo los ojos y le dijo a su hermano...
-Te lo advertí.- Sin más dio media vuelta y se fue.
Mi hijo mayor negó con la cabeza y se acercó a mí.
-Padre... ¿Por qué haces esto?-Pregunto mirándome con tristeza.
-Debemos empezar a vivir de nuevo, hijo...-Respondí melancólico.- Todos nos temen, necesitamos amigo de verdad.