La Prisión del Páramo

Al borde del miedo

La pelea entre Sarray y Gumi está alcanzando su punto máximo, el cabello de Gumi embiste con fuerza a Sarray y la saca volando al otro lado de la jaula; Sarray se levanta malherida, y corre alrededor de la jaula esquivando los ataques de Gumi.
Sarray resiste los ataques de Gumi! Podrá llegar hasta el final?— Un Momento! Mira eso Vein! Sarray se está acercando al Abanico de Montañas! Es la última esperanza para Sarray!— Exclaman los reptilianos emocionados mientras el público grita de la emoción, cada uno apoyando a su favorita, pero todos con deseo de ver morir a la perdedora.

Con un esfuerzo sobrehumano Sarray alcanza su espada y la levanta en posición de ataque. —Hagamos Callar A Esa Bruja, Grandulón!— Susurra aliviada Sarray a su espada mientras con un movimiento rápido corta un mechón de cabello. La arena completa se queda en silencio observando con atención el final de la pelea, solo se escuchan los gritos de las guerreras dentro de la jaula.
Sarray ejecuta movimientos coordinados con su espada, esquiva los mechones y a la vez lo corta pero estos vuelven a crecer; Sarray toma distancia y con el Abanico de Montañas crea una ventisca feroz, las ráfagas de viento azotan a Gumi como un enjambre de navajas y cortan simultáneamente cada mechon de cabello, incluso el cuerpo de Gumi sufre daños y se llena de cortes y heridas lo que la deja vulnerable momentáneamente; Sarray aprovecha este momento de vulnerabilidad, toma impulso y realiza un feroz corte al viento y parte a Gumi por la mitad y las miradas de ambas peleadoras se cruzan por última vez.

El Cuerpo de Gumi cae al suelo agonizando mientras Sarray suspira de alivio, pero su corazón sigue latiendo acelerado. —Qué es esta sensación? Esta emoción jamás la he sentido en mi vida...— Susurra Sarray en su mente, pero una risa débil y entrecortada de Gumi interrumpe su calma. —Ji Ji Ji Ji Ji... No me digas que lo que acabo de ver en tu mirada es miedo...— Gumi sigue riéndose hasta que su voz se apaga, al igual que su vida. —Ya Cállate...— Le dice Sarray a Gumi mientras levanta su espada y abandona la arena.
La cuarta lucha ha terminado!! La ganadora de esta pelea es la espadachín asesina de las montañas: SARRAAAAAAYYY!!!— Anuncia Vein el final de la pelea.

Bloque A / Cuarta Lucha
Gumi vs Sarray
Ganadora: Sarray
Duración: 22:05 minutos

Mientras tanto Kelly regresa a su celda solitaria y ríe de la emoción. —Jajaja! Eso realmente estuvo cerca! Debí ser yo quien matara a esa bruja asquerosa! Estoy que me hierve la sangre del entusiasmo!— Por otro lado, Sir Cremino, quien también estaba observando la pelea desde el patio junto a un grupo de admiradoras expresa su emoción por el torneo. —Eso estuvo Magnífico... Kronos, Damian, y ahora Sarray! Todos fueron excelentes peleadores.— Exclama Cremino y una prisionera del grupo le responde. —Nos encanta verlo hablar tan elocuente! Es un honor para nosotras que usted fuera elegido para participar en el torneo!— Ay sii! Señor Cremino, nos promete que cuando usted gane nos llevará con usted lejos de esta prisión?— Le pregunta otra prisionera admiradora. —Oh querida! El destino es como las estrellas, solo los bajos de intelecto y curiosidad dudan de su poder, y los grandes aprenden a leer su destino. Pequeña estrella, cuando salga de aquí, mi grandeza será más fuerte que el destino, eso las incluirá a ustedes?— Responde Cremino maquillando sus palabras. —SEÑOR CREMINO! ESTAMOS EMOCIONADAS DE VERLO PELEAR!!!— Gritan emocionadas las admiradoras de Cremino.

Por otro lado en el palco de Kimon, este ríe junto con Kairi. —Jo jo jo! Los primeros 8 participantes han sido revelados! No puedo esperar a ver el resto de bastardos que se matarán en el campo de batalla...— Me alegra que esté disfrutando el espectáculo, lord Kimon.— Contesta Kairi, mientras los reptilianos Serj y Vein se levantan de sus asientos. —Ahhh! Qué cansado es esto de ser comentarista!— Me duele la garganta de tanto gritar...— Exhalaron exhaustos. —Hace mucho que no me emocionaba ver una pelea... ME HACE QUERER PARTICIPAR YO MISMO...!!!— Exclama emocionado Kimon, sin embargo una voz femenina, fuerte y profunda lo interrumpe, Kimon se voltea mira fijamente el pasillo oscuro a sus espaldas. —Vaya Vaya Vaya! Siempre tan impulsivo como siempre, pequeño Kimon...— La figura femenina se acerca caminando lentamente y Kimon se queda sin palabras ante la presencia que viene a visitarlo; se trata de más ni menos que de Galia, ex emperatriz del universo, antecesora y maestra de Kimon, y este último pregunta confundido. —Lady Galia! Qué está haciendo aquí?!!— Escuché que organizaste un torneo entre los prisioneros del Páramo. Lo que me pregunto es. Por qué no me invitaste...?— Contesta de forma juguetona Galia y se sienta al lado de su viejo discípulo. —Es un honor contar con su presencia mi Lady Galia... A qué se debe el honor de acompañarnos?— Pregunta Kairi con respeto. —La verdad desde que me retiré como emperatriz he estado un poco aburrida y sin emoción, y escuché rumores de que Kimon organizó este torneo en el Páramo; así que pensé que este espectáculo podría ser entretenido para mí.— Responde Galia, pero vuelve a dirigirse a Kimon. —Kimon, de casualidad él no está participando verdad?— Pregunta Galia con un tono más serio, Kimon responde negativamente lo que calma a Galia y esta vuelve a su postura tranquila y despreocupada.

De vuelta al interior de la prisión, Kronos regresa de la enfermería a su celda y se cruza con la celda vacía del fallecido Rhama y se queda mirandola un rato mientras reflexiona. —Nunca te doblegaste, ni cuando llegaste a este agujero ni cuando fuiste mandado a morir... Fue acaso esa nobleza tuya lo que te costó la vida?— Piensa en voz baja Kronos antes de retirarse, pero en vez de regresar a su celda se decide a ir al gimnasio de la prisión.




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