Un sueño del pasado

Estoy de rodillas, rezando y escondida en el clóset, me encuentro muy asustada más bien aterrada pidiendo que no dañen a mi madre, está muy obscuro aquí dentro y no logro ver nada, solo escucho esos gritos esos desgarradores gritos, solo distingo la voz de mi madre creo que también está asustada pero... ¿por qué dice eso? 

Escucho que ella grita que está equivocado que no es ella, ¿es una voz de un hombre? ¡Si! también escucho la voz de un hombre, le grita y creo que la lastima.

Yo estoy muy asustada pero no puedo salir, mami me dijo que no lo hiciera porque de lo contrario ella no me querría más, después solo se escucha silencio, solo un largo silencio, luego un grito, es del hombre.

-¡Mierdaaaaaaaa! está perra decía la verdad.

Escucho un ruido extraño y luego nada, salgo de mi escondite y ahí está, es mi madre, está tirada en el piso, su piel es morada, no se mueve, salen pequeños destellos de ella dirigiéndose al cielo y a su lado está ese libro que tanto le gustaba leerme el libro que lleva de nombre “La profecía”.

-¿Mami estás molesta conmigo? mami porque no respondes, mami, mamita.

Riiiiiiiiiiiiiiiiiiiin, Riiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiin.

Ese maldito despertado me saca de una patada de aquel sueño, no sé porque casi todas las noches tengo que soñar con la muerte de mi madre, nunca supe quien la asesinó ni porque lo hizo, solo espero que algún día pague lo que hizo y se valla al infierno.

Hoy es un día aburrido como los demás, hace ya dos años que abandone a mis padres adoptivos gracias a qué soy un genio y logré graduarme antes en mi carrera de Administración de Empresas, en una semana cumplo 21 años y sigo sin saber que aré de mi vida, no he buscado trabajo, tal vez sea porque no he encontrado el indicado para mí, o eso creo, por el momento estoy bien de niñera,  me encantan los niños, y así tengo el pretexto indicado para seguir leyendo cuentos infantiles de noche. Aún guardo los libros que me leía mamá, están viejos pero en buenas condiciones, Lili la niña que cuido de los vecinos me pidió que llevará un cuento nuevo y creo que el favorito de mamá es el indicado, "La profecía", la verdad a mí no me gustaba mucho pero ella me lo leía todas las noches como si quisiera que no lo olvidará nunca.

Me dirijo a sacar de bajo de mi cama una caja roja, es ahí donde guardo aquel libro, creo que me da un poco de miedo pues él fue el único testigo de quien asesinó a mamá, creo que por eso lo guardo como si algún día el libro fuera a confesarme quien lo hizo y porque.

Ring, ring, ring, ring.

Oh por dios, es mi teléfono, debe ser la señora López, quedé de ir a cuidar a Lili a las 8:00 y son 8:15, no es muy tarde pero ella es realmente puntual, así que de inmediato contesto.

-Hola señora López sé que es tarde voy para allá.

Cuelgo el teléfono, cojo el libro y salgo disparada a su casa, suerte que sean mis vecinos.

Luego de jugar todo el día con Lili, llega la noche, los señores López llegarán un poco tarde y es la hora de contarle un cuento a Lili.