La promesa

Cápitulo 9

-Si puedes seguir- le digo a Jackson mientras le aparece una sonrisa de oreja a oreja.
Entonces me empieza a dar besos por todo el cuello hasta que llega a mis pechos, se para, me levanta un poco y pasa su suave mano por detrás de mi espalda hasta que da con el broche de mi sujetador, lo abre, me lo quita lentamente y cuando esta ya quitado lo tira al suelo de mi cuarto y empieza a jugar con mis pechos. Esta un rato así hasta que introduce su mano debajo de mis braguitas y empieza a moverla y yo empiezo a gemir de placer.
No sé si decirle que pare o no pero en ese instante se para saca su mano y la pone en mi cadera de ahí coge y me empieza a quitar suavemente las braguitas y las tira también al suelo. Luego se levanta y se quita los calzoncillos y los tira al suelo, en ese momento me doy cuenta del buen cuerpazo que tiene y me quedo embobada mirándole fijamente, Jackson se da cuenta y me acerca más a él hasta que su boca roza mi oído.
-Ya veo que te gusta mirarme, que sepas que si sigues así voy a tener que empezar a jugar yo -me susurra con una sonrisa en la cara. Está en plan juguetón, yo me sonrojo al oír la frase y el empieza a jugar con mi pelo mientras introduce su miembro dentro de mí muy lentamente, poco a poco va empezando a acelerar, a la vez me mira, se muerde el labio y me besa mientras acaricia mis pechos delicadamente, como si me fuera a romper. No puedo creer lo que está pasando, estoy en la cama con Jackson el chico que me salvo la vida cuando me intentaron violar, y siempre me ha protegido, aunque es más mayor que yo es muy buena persona. 
Llevamos casi una hora jugando entonces noto que está a punto de correrse, Jackson saca su miembro y se corre en mi abdomen mientras que yo también me corro en mi cama.
Se apoya sobre la cama y se queda mirándome fijamente con una agradable sonrisa en la cara.
-Kate, parece que te conociera de toda la vida - me dice muy suave ya que está cansado por haberlo hecho, la verdad es que yo también estoy cansada.
Estamos medio dormidos cuando oímos un teléfono, miro la pantalla a ver si es el mío pero no, es el de Jackson.
-¿Quién será ahora?-balbucea mientras lo coge y mira la pantalla, no se ve muy bien pero Jackson contesta y rápidamente se levanta de la cama como si le hubieran dicho algo muy preocupante , le miro la cara y la tiene pálida. Me asusto un poco porque deja caer el teléfono al suelo, de repente se vuelve a mirarme y se le empiezan a llenar los ojos de lágrimas intento consolarle pero no sé cómo.
-Mi hermanita pequeña ha tenido un accidente, está ingresada y quiero ir a verla-me dice muy lentamente.
Jackson se viste y yo también, en ese momento no sé qué hacer pero como al día siguiente tengo clase pero aun así hay una fiesta, le digo- ¿Quieres que te acompañe?-. Se queda un rato callado y al final asiente con un movimiento de cabeza.
Lo bueno es que mi madre no está en casa y no llega hasta muy tarde , de todas formas cojo un papel y un boli que encuentro por ahí y le dejo una nota diciendo que había quedado.
Jackson abre la puerta del copiloto para que entre en el coche, es la primera vez que me fijo en que tiene un tapizado negro con detalles dorados, nunca había visto un coche tan bonito por dentro, aunque ya me había montado más veces en el coche no estaba muy bien para fijarme en los detalles, él se sube en el asiento del conductor y se pone el cinturón me hace una seña para que me lo ponga yo también y pisa el acelerador a tope ,lo que hace que el coche salga disparado.
Llevamos casi todo el viaje sin hablar salvo algunas palabras pero Jackson parece más centrado en llegar que en otra cosa. Divisamos el hospital a lo lejos y nada más que encontró un sitio para aparcar me coge de la mano y nos ponemos a correr entre la gente hasta llegar a donde esta información. No hay mucha cola asique nos atienden rápido y nos mandan al ala de radiografía, en la sala de espera esta una señora llorando y un hombre abrazándola, el hombre se separa un poco y mira a Jackson el cual le mira con cara de preocupación y después el hombre me mira a mí muy detenidamente y se sorprende al verme es como si estuviera viendo doble porque no se cree que yo exista. Me doy cuenta de que la mujer se queda mirándome también sin saber que decir parece sorprendida entonces me doy cuenta de que aún tengo la foto que me dio mi madre, la busco y me quedo mirándola no me lo puedo creer y creo que Jackson tampoco. Jackson se pone detrás de mi para mirar la fotografía que tengo entre las manos y ve al hombre de la foto y dice que es su padre entonces me quedo con cara de póker.
-Una chica llamada Alice de 16 años ya ha salido de rayos, por lo que hemos visto no tiene ningún hueso roto y está bien lo único que tiene son algunos moratones y algunos rasguños, lo único que necesita es reposo podéis pasar a verla pero necesita descansar-nos dice una de las enfermeras de hospital.
Rápidamente todos se alegran y vamos a la habitación donde descansa Alice, durante el transcurso del trayecto a la habitación el hombre cogió y me quito la foto que tenía en las manos y de repente le aparece una sonrisa en la boca como si estuviera recordando viejos tiempos.
-No esperaba que una amiga de mi hijastro fuera la hermana gemela de mi hija- dice para sí mismo en voz alta para que yo le oiga.
Estamos a punto de llegar a la habitación cuando mi padre, si se le puede llamar así, me coge del brazo y hace que me pare al igual que él, en medio del pasillo. No parece muy contento. Se me queda mirando un buen rato.

 



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En el texto hay: misterio, sexo, romance adolecente

Editado: 03.10.2019

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