Capítulo 14

Rosa: si esperaste por mí una eternidad un poco más no te hará daño. Además, la única persona que sabe que eres el hombre de mis sueños es mi hermana.

Humberto: pensé que este sería un secreto entre nosotros. Nada más que mi cuñada está de acuerdo con nuestra relación y no debo de estar en su contra si quiero tener una buena relación contigo.

Rosa: ella es muy importante para mí. Porque sin la existencia de Camila me hubiera sentido demasiado sola y sobre todo ella es mi mejor amiga.

Humberto: se ve que te quiere mucho y necesitare agradecérselo. Pero me gustaría que ella también fuera feliz y estoy seguro de que eso también pasara.

Rosa: también espero lo mismo para ella. Porque quiero ver feliz al lado de su verdadero amor y sé que se enamorara por primera vez de una persona que logre conquistarla.

Humberto: entonces, mi vida. Necesitaremos subirnos a mi auto para poder irnos y no te imaginas la sorpresa que tengo preparada para ti.

Rosa: pienso que las palabras sobran en este momento y lo único que quiero es que me ames. Debemos de olvidar lo que alguna vez fuimos en el pasado y que me ames únicamente a mí.

Humberto: por supuesto que te amo a ti. Eres la persona que realmente amo y no debes de sentir celos de nuestras almas, porque sin ellas nunca te hubiera encontrado.

Rosa: tienes razón, Humberto. No puedo evitar recordar los recuerdos que tenía sobre el pasado y a ella la mirabas de una manera especial y cuando me encontraste nunca lo hiciste. Esperaba tan siquiera tener esa mirada que hizo que el alma de Rosa se enamorada de ti.

Humberto: te recuerdo que a la única mujer que amo en esta vida eres tú. Solamente que yo también siento celos de mi antigua alma.

Rosa: debemos de dejar de sentirnos así. Ahora estamos vivos por primera vez y no me interesa saber lo que sentías por ella, porque los sentimientos no cambian.

Humberto: recuerda que reencarnamos y conservamos una parte de ellas, pero lo que me duele recordar es que lo amabas más a él, nada más que nuestra historia de amor apenas va a comenzar.

Rosa: debemos de procurar no hablar del pasado cuando estemos juntos. Además, tendremos que vivir nuestro presente donde solo existimos nosotros.

Ellos se detienen cuando llegan a su auto, Humberto la ayuda a subirse para hacerlo también. El enciende su auto para dirigirse rumbo a su destino y él tenía pensado llevarla a un restaurante, porque sabía que eso era lo más correcto en estos casos.

Humberto: no sabía exactamente donde llevarte. Necesito decirte que el único lugar que me pareció más apropiado fue un restaurante y después de terminar iremos a otro lugar.

Rosa: no creo que tengamos tiempo suficiente para visitar dos lugares diferentes. Aunque mis padres lo que menos le interesa es saber si llego tarde a mi casa.