La promesa de las Rosas

Capítulo 16

Entrada de diario – 7 de agosto de 1883

La confesión de William

Hoy tuve una conversación que no esperaba.

Y que, curiosamente, me dio más esperanza de la que creí posible.

William vino a verme por pedido de mi madre.

Ella cree que su presencia podría “levantarme el ánimo” tras el episodio del té.

Yo temía el encuentro.

Temía tener que fingir otra vez.

Pero cuando entró, algo en él se veía distinto. Menos rígido. Más… humano.

Se sentó al borde de la silla, con las manos entrelazadas.

Y después de un silencio, dijo:

—No quiero hacer esto.

Lo miré sin entender.

—¿Perdón?

—Este compromiso —continuó—. No lo deseo.

Mi madre cree que unir nuestras familias traerá beneficios. Tu madre, lo mismo.

Pero yo… estoy enamorado de otra persona.

Mi corazón se detuvo un instante.

—¿Quién? —pregunté, sin malicia.

—Mi profesor de pintura —respondió, con los ojos brillantes, pero sin una pizca de vergüenza—.

Lo conocí en París. Nadie en mi familia lo sabe. O al menos fingen no saberlo.

Me quedé en silencio. Y luego, por primera vez, le sonreí con ternura.

—Tampoco quiero casarme contigo, William.

Sus ojos se humedecieron.

—¿Tú también…?

—Estoy enamorada de alguien que no me pertenece.

—Entonces estamos atrapados en el mismo cuadro —dijo, con una sonrisa triste.

Nos quedamos así, en complicidad muda.

Y en ese instante, sentí que William y yo podríamos ser amigos en otro mundo.

Uno donde no tuviéramos que salvarnos fingiendo desmayos o escondiendo cartas.

—¿Y si fingimos que seguimos este juego? —propuso—. Pero por dentro, trabajamos juntos para liberarnos.

—¿Aliados?

—Camaradas —corrigió él, con una reverencia juguetona.

Quizás no estoy tan sola como creía.

Quizás incluso William, el prometido impuesto, puede ser parte de esta fuga que estamos trazando entre susurros.

E.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.