Décima sexta parte.

Badir- Aysel.. ¿Estás bien?

Asintiendo con su cabeza, Aysel detiene el auto frente al colegio de Badir, ya que por suerte estaban cerca. 

Aysel- Que tengas un buen día.

Badir- Gracias..

Confundido y preocupado, Badir cambia su mirada de la entrada del colegio a Aysel reiteradas veces mientras abre la puerta del acompañante, tomando la osada decisión de abalanzarse a Aysel, tomándolo del cuello de su camisa, le roba un beso.

Aysel abre sus ojos con sorpresa, sonriendo por demás encantado ante tal gesto, mientras Badir baja del auto.

Badir- Cuidate.

Con esto, Badir sale corriendo a clase.

Aysel, ve como Badir se pierde de vista, por lo cual va a una de las montañas alejadas, a observarle como siempre. Leyendo de nuevo el mensaje de texto diario de Michael, invitándole a ir con ellos a la biblioteca de la ciudad mientras sube a la copa de un árbol. Aysel no ha salido con los jóvenes desde que Badir volvió a clases, eso sólo mantiene bajo cierto control el aroma de Aysel en Badir, pero como mínimo ayuda un poco. Negándose de manera educada en un mensaje, se acomoda cómodamente, esperando para volver a ver al joven. Esto le recordaba mucho a cuando cuidaba de Altramuz, pero sabe que es sumamente mejor, lo que le satisface.

En clase, Michael arruga el entrecejo ante la negativa de Aysel, aún cuando no les niega la entrada a su casa, ya no pasa tanto tiempo con ellos, de alguna manera se siente un poco usado, sin embargo, cuando pasan tiempo juntos es tan amable como siempre, por lo que asume que simplemente se debe de sentir demasiado ocupado. Al pensar en Aysel lo hace también en Badir, quien se encuentra en silencio escuchando la clase.

El resto del día prometía ser tranquilo, pero entonces un chico mayor que había salido con Mira, comienza a coquetearle de manera descortés a AnnMary. La joven le pide auxilio de manera silenciosa a Badir, quien sólo suspira mientras se acerca a ellos al otro lado de uno de los pasillos, interponiéndose entre ambos. Con Badir en movimiento, sus amigos se ponen en guardia.

-Disculpa, niño, pero estás en medio de mi camino.

Badir- Lo sé, y tú en el de ella.

-Eso no es tu problema.

Badir- Mi amiga, mi problema.

-¿Acaso buscas problemas? Viniendo aquí como un héroe cuando nadie te llamó.

Badir- Mi amiga, mi problema.

A- Lo lamento Badir, no es necesario que me ayudes, lo lamento.

-¿La oíste?

Arrugando el entrecejo con molestia, Badir mira de reojo al joven mayor que él, quién es quizás sólo un par de centímetros más bajo que Aysel, lo cual supone una gran diferencia de alturas. Esto no le presenta problema, realmente ha notado que el volumen físico no afecta las habilidades.

-¿A quién crees que le estás haciendo esa cara? 'Badir'.

Badir- A un iluso insistente que ya ha sido rechazado más de una vez.

Arrinconando a Badir, el joven comienza a dar suaves cachetadas en el rostro de Badir, molestándolo.

-Y me lo dices tú. ¿Se supone que disfrute la ironía?

Los amigos de Badir se iban a abalanzar al joven, pero Badir los detiene con un ademán de su mano. 

AnnMary, "forcejea" inútilmente contra el más alto, intentando suelte a Badir, quien se enfada cada vez más. Pero en un movimiento brusco, el mayor de los jóvenes la golpea fuertemente de un manotazo, azotándola contra el suelo. 

-Esto es cosa de hombres, no te metas.

Beatriz, la única que no le tenía ningún rencor a la encimosa chica, corre a ayudarla, revisando que esté bien. Los demás se mantienen atentos a Badir, quien parece a punto de golpear al mayor. La razón para que ya no les agrade AnnMary, es que, aunque comprenden que en el corazón no se manda, la relación de Aysel y Badir es oficial, por lo que no ven con buenos ojos que la chica siga insistiendo en ser coqueta con Badir. Los alumnos nuevos en grados altos son inusuales, al ser tan pegostre con Badir, los chicos interesados en ella corrieron un rumor de que salía con Badir. Les costó mucho silenciar tal chisme.

Badir no cabe en su asombro, el mayor le parece sumamente irritante, antes de que pueda decir palabra, ante tan bruscas acciones del otro, sale Mira.

S2- Por eso nunca vas a ser algo en la vida, bruto.

Molesto, en un momento de adrenalina, le da una cachetada a Mira.

Todos los jóvenes en el pasillo guardan silencio ante el asombro, menos Badir, quien jala del brazo a Mira, sacándole del camino, para luego darle un puñetazo en el pómulo izquierdo al mayor.

Indignado, el joven le devuelve el golpe, iniciando así una sesión de golpes entre Badir y él.

Los amigos de Badir ven todo en cámara lenta, cuando reaccionan, sólo Tim logra darle un golpe al mayor cuando los profesores los detienen.

Se llevan a los 3 jóvenes a la oficina del director, donde llaman a sus encargados. Tim estaba horrorizado ante la idea de que llamen a alguno de los padres de Badir, por lo que intenta tomar toda la responsabilidad, sin embargo, los profesores no le creen, ya que el rostro de Badir está con algunos raspones. En cuanto les avisa a los demás, estos, sumamente preocupados se dirigen a espiar lo que sucede en el edificio de administración. 

Poco más de una hora después, llegan un par de adultos, quienes se acercan molestos, sentándose junto a los jóvenes. El mismísimo secretario de la ciudad es quien atiende el llamado por el chico mayor, la madre de Tim es quien llega en representación de este, pero Badir no tiene idea de quién podría acudir por él.

Cerca de 5 minutos después, justo cuando los adultos comienzan a impacientarse y a hablar de la irresponsabilidad del adulto a cargo de Badir, se abren las puertas de la oficina.

Con trenzas amarradas en una coleta alta en su largo cabello, adornado con alhajas de oro, sus cabellos se balancean mientras entra de manera apresurada sin perder su porte altivo. Con una camisa de vestir formal de botones color rojo berry, un pantalón negro crow, botines negros onix y un par de bolsas de compras, una plastica y una de papel. Camina hasta Badir, mirándole con atención, a pesar de que quién atrae más la atención es él. Aysel, arrugando su entrecejo, mira hacia los lados, reprochando silenciosamente tanto a Tim, como al joven que desconoce, ni hablar de los otros 2 adultos.