CHRISTOPHER TENDER
Me desperté con el grito de Carolina. Sabia que era de ella, pues era demasiado fuerte y agudo como para ser de Christian. Me preparé para levantarme e ir a mirar si estaba bien. Encendí las luces, cogí mi pantalón de pijama y fui a su habitación.
Toque dos veces. -Carolina, soy Christopher. ¿Estás bien? -pregunté sin abrir la puerta.
No quería invadir parte de su privacidad.
De pequeño siempre me pasaba que la gente entraba en mi habitación sin preguntar y siempre me encontraban en una postura incómoda de ver.
-Estoy bien, puedes entrar si quieres. -oigo decir a través de la puerta.
Bajo la manilla de la puerta y la abro. La veo sentada en la cama con un bowl de patatas de bolsa y con la televisión encendida viendo una serie que parecía F.R.I.E.N.D.S. Cuando ve que entro, pone la serie en pausa y pone el bowl a un lado.
-¿Estás bien? -pregunto una vez más un poco extrañado de que estuviera despierta a estas horas. -¿Qué haces despierta?
-Estoy bien Christopher. -dice levantandose de la cama-¿Ves? Estoy entera, enterita.
Paso una mirada por todo su cuerpo, buscando alguna herida o malestar. Al ver que estaba bien pregunto por la situación por la que había gritado.
-Pues he tenido una pesadilla y ya está. No me ha pasado nada, ¿vale? -dice con un tono medio cansado.
Entendía que no quisiera decirme mucho, ya que tampoco nos conocemos tanto. Lo que me sorprende es que su hermano no venga a preguntar si está bien, o a ver cómo estaba. Me dispuse a irme cuando Carolina me paró.
-Christopher, espera, porfavor. No te vayas todavía. -susurró, en un inteto en falso de cogerme la rmano.
Me detengo y me giro para verla. Está de pie mirándome con algo de miedo en sus ojos, parece que me quiere decir algo pero no se atreve. Abre y cierra la boca varias veces, pero no dice nada.
CHRISTIAN WILSON
Escuchó un grito de Carolina, pero no le presto tanta atención.
De pequeña siempre tenía pesadillas por cualquier cosa que le pasara durante los dias, pasaban demasiado a menudo, por lo cual ya me acostumbré a que se despertará gritara por las noches durante la madrugada.
Me levanté para ir a la cocina a por un vaso de agua antes de volver a dormir. Cuando llegué al salón vi la puerta de la habitación de Christopher abierta. Pensaba que habría ido al baño pero escuchaba murmullos desde la habitación de Carolina. Me acerqué a la puerta de la habitación y la abrí. Christopher estaba delante mío, Carolina de pie junto a la cama y justo al lado de la cama un bowl con patatas de bolsa.
-¿Qué estaba pasando aquí? -pregunto algo curioso de que Christopher estuviera en la habitación de Carolina y que la puerta estuviera cerrada.
-Me despertó el grito de Carolina y quería ver si ella estaba bien. -respondió Christopher-. De todas maneras yo ya me iba a ir.
Christopher se fue de vuelta a su habitación y me quedé a solas con Carolina. No sabía que había pasado, pero creía en la palabra de Christopher, él era un buen esposo y padre, no iba a sospechar de nada, ya que él tenía una familia bastante bonita. Le pregunté que había pasado a Carolina y algunas preguntas rápidas.
Ella volvió a sentarse en la cama y a seguir viendo la serie que tenía en la tele. Yo me fui, cerrando la puerta conmigo.
Vuelvo a la cocina, me sirvo el vaso de agua y me voy a la habitación.
Me siento en el escritorio y tomo el agua mientras miro el movil para responder dos mensajes que me mandaron a la una de la madrugada cuando ya estaba dormido.
Cuando termino, voy a la cama a dormir.
A la mañana, me despierto como de costumbre y voy al baño para ducharme y despertarme un poco más. Salgo a correr un rato y voy al gimnasio para entrenar un poco. Me vuelvo a duchar y voy al hospital, entraban demasiados casos diferentes cada dia era como un nuevo día de aventuras, pero en vez de en medio de la natraleza, en un hospital.