Un joven de unos veinte años se fue de excursión al famoso desierto de nevada se fue con un amigo el cual era muy allegado a el, los teléfonos no existían asique sus familias iban a tener noticias de ellos cuando llegaran devuelta del viaje, pero para su mala suerte estos dos chicos no iban a regresar como se fueron.
Los muchachos llegaron a la ciudad de las vegas y rápidamente se fueron directo hacia el desierto, la noche se iba acercando y el frio también asique armaron la tiendas de campaña ya que no querían dormir en la misma tienda asique ya a las once de la noche se fueron a dormir, al correr de la noche todo iba tranquilo hasta que llegaron las tres de la mañana y empezaron a sentir ruidos extraños ruidos los cuales no eran normales en un desierto eran difíciles de explicar.
Los ruidos parecían también acercarse cada vez más al campamento de estos dos muchachos los cuales empezaron a asustarse de tal manera que casi salen de las tiendas para quedar juntos. Al otro día al levantarse los dos conversaron de los ruidos de la noche anterior y que parecían acercarse más a ellos, asique después de mucho discutir y sin importar los perjuicios que tuviera la gente si los veían durmiendo juntos decidieron que esa noche iban a dormir en la misma tienda. Cuando la noche llego estaba todo tranquilo pero esta vez a las dos de la mañana espesaron los ruidos con el mismo modo empezaban lejos y cada vez se iban acercando mas pero esta vez hubo un punto que los ruidos provenían desde el lado de afuera, lo que fuera que estuviera haciendo esos ruidos estaba afuera de la tienda de campaña, y dentro de la tienda empezó una discusión de quien iba a salir a ver que eran esos ruidos, ninguno quería salir ya que era de noche no se podía ver nada en medio de un desierto y había algo haciendo ruidos justo del lado de afuera de su tienda. Los dos muchachos tomaron dos linternas y salieron a ver que sucedía, que provocaba esos ruidos extraños que venían sintiendo por dos noches seguidas, cuando por fin tomaron valor de salir a ver que eran los ruidos su sorpresa fue tal que sus lámparas se cayeron de sus manos, la tienda que estaba vacía estaba incendiándose pero no era un fuego común ya que el fuego era total mente negro y para más miedo de los muchachos la noche se transformo en día había algo que alumbraba de tal forma que casi no podían ver para enfrente de ellos.
Estos dos jóvenes no entendían nada, su peor miedo fue cuando sintieron como algo los iba abrasando de apoco con unas manos frías como hielo en ese momento los dos jóvenes se desmayaron del miedo y cuando despertaron ya no había ninguna luz y ellos estaban bien pero habían dos cosas las cuales hasta hoy no van a olvidar, uno la tienda de campaña estaba en cenizas y la otra era un papel que uno de los dos jóvenes tenía en la mano que en él había escrito lo siguiente.
-NO VUELVAN AL DESIERTO O LA PROXIMA VEZ LA TIENDA QUE SE INCENDIE VA A SER LA DE USTEDES-