La reina cuervo (libro 1)

Encuentro

 

Habían pasado varios días desde la pelea con Ash, Elizabeth cada día se resignaba más a su extraña condición, cada noche pensaba que despertaría siendo una mujer normal otra vez, pero cada mañana se guía descubriendo su nuevo poder, Elizabeth se encontraba sumergida en sus muchos pensamientos y de pronto, alguien llamó a la puerta, era Aris quien desde hace días había estado preocupado por ella, pero no se había animado a visitarla.

—Aris… ¿Cómo estás? —le preguntó Elizabeth sorprendida.

—Hola, estoy bien, pasaba por aquí y quise saludarte, saber si necesitabas algo, ¿hoy es tu primer día de clases no? —Aris era un joven muy guapo, de ojos azules y cabello castaño, él y su padre eran italianos, se habían mudado a los estados unidos hacia algunos años, así que el hablaba bien los dos idiomas.

—Si, estoy un poco nerviosa, ya sabes, seré la chica nueva y eso no es tan divertido jaja.

—Lo sé, es un fastidio, ¿no sales mucho de casa verdad?

–No conozco a mucha gente, entonces…no tengo a que salir jaja, además me gusta estar aquí. —Elizabeth había estado encerrada tratando de asimilar todo lo que le estaba pasando, no quería seguir siendo monstruosamente fuerte.

—¿Por qué no caminamos juntos hasta el autobús? Así nos haremos compañía, yo tampoco conozco a muchas personas, así que…

—Me encantaría, gracias. —le respondió Elizabeth con una sonrisa, Aris le parecía agradable, además de que era muy simpático.

—Su perfume es el mismo que el de la chica misteriosa…ella me recuerda mucho a esa mujer. —pensaba Aris en sus adentros.

—¿Pasa algo? —le preguntó Elizabeth confundida.

—¿Qué? ¡no! No es nada jeje ¿te has sentido bien con el departamento?

—De maravilla, ustedes han sido muy amables, me encanta la decoración. —exclamó Elizabeth sonriente.

—Me alegro, mi papá estaba algo preocupado.

—¿Por qué? Todo ha ido de maravilla.

—Por lo que sucedió aquel día, tenía miedo de que quisieras mudarte de casa, con tantos desastres sería algo normal.

—Sinceramente espero vivir mucho tiempo cerca de ustedes, lo de las puertas ya esta arreglado no se preocupen.

—Me refería al atentado que hubo cerca de aquí… —externó Aris pensativo.

—Ah…si, fue terrible.

—¿Crees que aquella mujer sea una especie de nueva heroína? —le preguntó Aris mirándola a los ojos.

—No lo sé, los héroes no existen…

—Ahí viene mi autobús, nos vemos. —le dijo Aris mientras corría y cuando ya estaba arriba, gritó con fuerza. —¡Oye! ¡cuando quieras puedes venir a cenar con nosotros!

—¡Lo haré! Gracias…

Aris era realmente agradable, aunque era más bajito que Elizabeth, tenía un encanto único por su corazón noble y heroico, ella por fin había llegado a su universidad, era más grande de lo que había imaginado, su registro lo había hecho en línea y esta era la primera vez que pisaba el lugar donde pasaría los últimos cinco años como estudiante.

Elizabeth ya había pasado a presentarse y el director la escoltó personalmente hasta su salón de clases, estaba tan nerviosa que el corazón le latía con fuerza.

—Espérame aquí, haremos esto a la vieja escuela. —le dijo el director guiñándole el ojo.

—Ah, está bien.

—Director Vincent, buenos días ¿Qué lo trae por aquí? —le preguntó el profesor Henry con amabilidad.

—Vine a escoltar a la nueva alumna, la dejó en sus manos. —El director le hizo una señal con la mano y ella entró al salón con timidez.

—Bienvenida. —le sonrió el profesor y después añadió. — Ok señores y señoritas…como saben ayer les anuncie que se incorporaría con nosotros una nueva compañera, no esperaba que se integrara esta semana, pero es bueno tener caras nuevas, aunque sea mitad del semestre, ella tiene el conocimiento necesario para adaptarse a nuestro plan de trabajo, su nombre es Elizabet, por favor trátenla bien, adelante señorita.

—Si, gracias, es un placer.

Elizabeth era una chica alta con un hermoso cabello negro largo, tenía una bonita figura y era muy hermosa, así que los chicos no tardaron en posar sus ojos sobre ella.

—Oye preciosa ¿Por qué no te sientas a mi lado?

—Aquí también hay lugar bebé jaja.

—Si te sientas a mí lado, te pasaré los apuntes bombón.

El profesor de percató de la situación he intervino.

—Cerca de Sam hay un lugar, el chico que se sienta ahí no ha venido, puedes ocuparlo sin problemas, estarás cómoda ahí.

Elizabeth ni siquiera se fijó, con quien se sentó, estaba tan distraída ante el nerviosismo de sentir las miradas de todos sus compañeros que mantenía la vita en la butaca.

—El profesor esta apuntando algo importante, deberías anotarlo todo. —le dijo aquella hermosa voz.

Al momento que Elizabeth desvió la mirada hacia él, se quedó perpleja, ese chico tenía una sonrisa preciosa.

—Es verdad… —le respondió sonriente, para su mala suerte, su bolígrafo no pintaba y comenzó a estresarse. —Maldición… ¿Por qué no sirve? Acabo de comprarlo. —se decía así misma mientras trataba de hacer que pintara.

—Toma. —Sam le prestó su pluma, escribía tan rápido que dejó a Elizabeth sin palabras.

—Te lo devolveré enseguida. —añadió apenada.

—Puedes quedártelo, lo necesitarás.

—Más les vale que repasen todo lo que les he mostrado, cada tema vendrá en el examen, así que estudien como locos. —les dijo el profesor quien acomodaba sus cosas para retirarse.

De pronto, Elizabeth sintió un horrible perfume que empalagaba todos sus sentidos, era tan dulce que la mareaba.

—Hola Sam ¿Qué harás el fin de semana? Estaba pensando que tú y yo podríamos ir al cine, hay una película muy buena que se esta estrenado hace poco ¿te gustaría ir? —le preguntó Jane mientras le agarraba el brazo.

Jane era la chica más popular de la escuela, una hermosa rubia de cabello semi largo y con unos preciosos ojos azules, le había dado la espalda a Elizabeth ignorándola por completo.



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En el texto hay: romance, accion, heroes vs anti heroes

Editado: 02.08.2024

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