41. Luchian Mikaelson

Baje los escalones lista para que nos fuéramos cuando escucho la TV encendida en el noticiero.

Llego a la sala y veo a Lucas mirando el televisor sorprendido, mire la noticia y había una foto mía en donde sonreía con mi padre y el video en donde daba mi confección. Alce ambas cejas, así que decidieron pasarlo por todos los noticieros. Que bueno, ahora se les hará más difícil ocultar los crímenes de sus hijos, ya todo el mundo sabe quienes son y de los que son capaces de hacer con tal de aparentar ser la familia perfecta.

— ¿Nos podemos ir ya?—pregunte con suma calma tomando mi teléfono como si no pasara nada.

— ¿Eso es cierto?—me pregunta.

—Si—conteste mirándolo aburrida— ¿ya nos vamos?

— ¿Por qué nunca dijiste nada sobre esto?

— ¿Por qué no vi la necesidad de hacerlo?—respondí encogiéndome de hombros— ¿podemos irnos ya?

—Rayos... Evangeline—se pasa la mano por su cabello todo revuelto—podías haber confiado en mí y decime lo que esas personas te hicieron. Sabia que no eran cosas buenas, pero... nunca imagine que harían tales cosas.

— ¿Y que podías a ver hecho tu?—pregunté inclinando mi cabeza hacia un lado— ¿denunciarlos?—me reí—por favor Lucas, esas personas llevaban años esperando justicias y no lo consiguieron hasta ahora. Si íbamos a denunciarlos a la policía así sin más quien sabe que podría a ver pasado con nosotros... ¿Muertos en una carretera por hablar? ¿Violada y ahogada en la piscina de mi casa? ¿Llamarme loca y demandarme por difamación?—me acerque a el y tome el control de su mano y apague el televisor— ya todo esta resuelto, no hay quedarle mas vuelta al asunto—dije mirándolo directamente a los ojos para darme vuelta y salir de la cabaña.

Camine directamente hacia la camioneta negra y lo escuche cerrar la puerta, entre y cerré la puerta poniéndome el cinturón y espere a que entrara.

El trayecto hacia mi casa fue en un total silencio, ninguno de los dos dijo nada al respecto. Suspire, estaba cansada y agotada. Me dolía todo el cuerpo y tenia mucho sueño, anoche no dormí casi nada, y como lo haría si perdí la virginidad. Luego de la primera vez, lo hicimos como tres veces mas a lo largo de la noche, en vez de ver Netflix, el nos termino viendo a nosotros.

Afuera de mi casa había algunas seis camionetas de cada noticiero diferente y un reguero de periodista y mis vecinos siendo entrevistados.

¿Y ahora como diablos entraba a mi casa sin ser vista?

— ¿Cómo...? ¿Cómo pasaras evitando a toda esa gente?—pregunta Lucas.

Negué con la cabeza—no tengo la menor idea...—a un llevaba puesto mi vestido de anoche y los zapatos altos de tacón y mi cabello hecho un desastre. Sería difícil correr y entrar a mi casa para que ningunos de ellos me molestaran.

Abrí la puerta— ¿Qué haces?—pregunto Lucas entrando en pánico.

—Pues a mi casa—respondí—no voy a quedarme aquí—sali y cerré la puerta.

Agarré el ruedo de mi vestido y empecé a correr hacia la puerta de mi casa. Escuche como decían mi nombre acercándose a mi rápidamente, chille y vi como la puerta de mi casa se abrió dejándome ver a un hombre grande fuerte y moreno.

—Rápido señorita—entre y cerro la puerta.

Respiré profundamente aliviada, y vi a tres hombres parados cerca de las escaleras y la cocina. Caminé hacia la sala y vi a mi padre con los ojos rojos sentado en el mueble y cuatros hombres alrededor de él. Joder, lo que me imaginaba. No tendré descanso por el resto de la tarde.

—Señorita Seller—habla un hombre de mediana edad. Rubio de ojos verde y bajito— que bueno que decidió aparecer... debemos hablar.

~*~

Tres meses después...

Luego de ese día en donde hice mi declaración y tuve que asistir a tribunales y al juicio final en donde a la ex esposa de mi padre su hija y su ex compañero le dieron veinticinco años por estafadores. A Trevoll y Brad cadena perpetua, A Sofía, Evan, y a las demás quince años por cómplices.

Merecían más, pero llegaron a un acuerdo y esos fueron los años que les dieron. Me negué a ir a programas y hablarles a los noticieros sobre mi testimonio, pero había salido mi foto en todos lados y muchas personas decían que era muy valiente y una heroína al igual que los renegados.

ahora vivía tranquila sin preocupación sin falsas gentes rodeándome.

La relación con mi padre empezaba a fortalecerse un poco más cada día y ya estaba aceptando el hecho de que Lucas y yo estábamos saliendo.

Entraría a la academia como policía, primero iniciaría como oficial de policía y luego ya veríamos que procedía después. El agente que había llevado el caso de Trevoll y su pandilla había dicho que seria excelente en mi trabajo, que sin duda llegaría lejos. Eso me motivo un poco y mi padre estaba orgulloso, decía que antes quería ser bombero, pero que su padre se había negado ya que tenia que seguir el legado de la familia. Trabajar en la misma empresa que a trabajado la familia Seller de tiempos inmemorable y yo cambiaria eso.

En otras noticias...

La loca de Dani ya era toda una señora, el día de su boda fue todo un desastre. Enserio, recuerdo que la boda fue un sábado y regrese un lunes a casa toda hecha un desastre porque nos habíamos embriagado a tal nivel que despertamos bien lejos de Londres y para regresar a casa fue toda una maldita odisea, no tengo recuerdo alguno de lo que paso ese día.