La Reina De Los Demonios

El libro de los mil demonios...

 

 

-Tienes aquí una reliquia, algo valioso... Y este es uno de aquellos libros... –Sonrió.

Para que tener un libro que habla sobre demonios, si no tiene nada relacionado a mí que me pueda ayudar, solo es un simple libro que no puedo descifrar por su idioma y escritura rara, pero intrigante. Seguramente era algo muy valioso como menciona Mia, seguro yo era amante de la literatura sobre espectros malignos o algo así, pero aún no estaba tan segura de eso.

-Pero ¿Qué beneficio me trae? Con eso no sabré quien soy...

-No lo sé, seguramente hay algún documento escondido entre esas hojas del libro.

-Ya revise el libro antes, y no hay nada que me pueda ayudar... Lo que me intriga es saber que demonio es este. –Le señale.

-Leviatán... Es un demonio acuático asociado a la envidia.

-¿Cómo lo sabes? ¿Puedes leer este idioma?

-No, no entiendo mucho este idioma, es fácil adivinar por la imagen ya que se hace llamar “El dragón que está en el mar” en la escuela hablaron de él una vez... Es algo de lo qu-...

Algo se escuchó pasar detrás de nosotras, se escucharon unas ramas quebrarse como si alguien las hubiera pisado, el sonido de las hojas nos alertó, no estábamos solas, había alguien más... Tome uno de mis cuchillos y me levante dirigiéndome al lugar donde se produjo el ruido.

Voltee sobre mis talones y tire mi cuchillo, el cual quedó clavado en un árbol a centímetros de aquella persona que nos observaba.

-¡Harry! ¿Qué haces aquí? –Mia se acercó a su amigo el cual estaba paralizado por lo cerca que estaba el cuchillo a su cara.

-E-estaba pasando por aquí, para... verificar que estuvieran bien, no quise asustarlas...

-No vuelvas a hacer eso. –Dije un poco hostil.

Me acerque al árbol en donde estaba y quite el cuchillo mientras lo fulminaba, este chico no me daba buena espina, algo traía de raro... Me aleje de ellos para dirigirme a la fogata mientras guardaba el cuchillo en uno de mis bolsillos, tome el libro y lo abrí de nuevo mientras comía un malvavisco.

-¿Qué es eso? –Pregunto el amigo de Mia.

Se acercó hipnotizado por el libro, sus ojos brillaban como si hubiera encontrado un tesoro, sonrió de lado y dijo en susurro.

-El libro de los mil demonios...

-¿Cómo? –Fruncí el ceño. –Sabes sobre él... –Harry asintió.

-Tienes en tus manos un libro muy valioso... Algo que vale más que la vida de cualquiera... –Murmuro. –Siempre quise tener uno de estos libros, pero decían que solo los ángeles y arcángeles podían tener este tipo de libros.

-¿Ángeles? –Él asintió.

-¿Dónde lo encontraste? –Cambio su expresión a una seria.

-Solo sé que estaba entre mis cosas. –Frunció el ceño.

-¿Cuál es tu apellido? ¿De dónde vienes?

-Yo no lo sé...

-Como que no sabes... ¿Es una broma?

No sabía a donde quería llevar con todo esto.

-¿Por qué quieres saber? ¿Acaso este libro tiene algo que ver conmigo?

-Solo quiero saber cómo una... simple humana, tiene un libro de Ángeles en sus manos.

-¿Y tú crees que yo lo sé? Mejor dime si entiendes este idioma o no.

-Se un poco de este idioma, solo entiendo algunas cosas... Pero antes, quiero saber cómo te llamas.

-Ya te dije que no lo sé, perdí la memoria, desperté en medio del bosque sin saber quién era.

-Un demonio... –Dijo mirando la fogata.

-¿Qué? De que hablas Harry. –Pregunto Mia.

-Puede que un demonio la allá atacado, dicen que este pueblo está plagado de ellos. Te recomiendo que mires todas las imágenes de los demonios, seguramente te acuerdes de cual viste, o cual te pudo atacar...

-¿Crees que funcionara? –Mia no estaba tan convencida, por mi parte me mantenía callada escuchando.

-Claro que sí, o... eso creo. Bueno ahora empezare a leer el comienzo, o intentare...

El libro de los mil demonios es aquel que habla de todos los demonios del mundo, tanto de sus habilidades como de sus debilidades. Aquel libro solo puede estar en posesión de un Ángel o del mismo Dios, al caer en manos equivocadas este libro podrá ser utilizado para abrir las puertas del infierno y liberar a todos los demonios. Los siete reyes del inframundo gobernaran el mundo, yendo en la cabeza, Satanás.”

-Es todo lo que te puedo decir, no entiendo más, seguramente me equivoque en algunas palabras, como te dije, no sé muy bien sobre este idioma.

-¿Cómo es que sabes leerlo? –Fruncí el ceño.

Ya era muy raro que se apareciera por aquí, y ahora lo es más al saber que puede leer este libro.

-Me tengo que ir... Se está haciendo tarde... –Se alejó rápidamente sin responder a mi pregunta.

Bufe. –Mañana me iré, creo que es mejor.

-¿Tan pronto? –Asentí. –Está bien, me gusto pasar tiempo contigo, aunque fue poco. Vamos a dormir, ya me está dando sueño.

Apagamos la fogata y luego entramos en la tienda de acampar, Mia se quedó dormida al instante, por mi parte no podía dormir, la intriga me mataba, saque la agenda de mi bolso y leí una página al azar.

 

__________________________

Bel...

El fuego de nuestro amor es infernal, algo inigualable a los demás, es algo especial. Por esto hemos sido juzgados pero al fin y al cabo no nos ha importado, lo único que importa realmente es que él y yo estemos juntos.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.