Intente dormir mucho pero sólo dormite cuando mi hermanito despertó lo aliste, vamos a casa de papá.
-¿A dónde vamos mami?
-a conocer a un señor.
Llegamos a la casa y Bernardo me recibe.
-Mila que milagro. Y este caballero quien es.
-el es Angelo Gabriel silver
Caminamos y llegamos con mi padre en la silla de ruedas. El me mira con duda y luego acaricia al pequeño.
Le muestro la foto de la mama de mi pequeño.
-Bernardo lleva a mi…
Sus ojos están llenos de lágrimas mi pequeño sube en sus piernas y lo abraza.
-no llores tus ojos son lindos.
Le da un beso en la mejilla. Lo abraza y veo a mi padre muy consternado.
-Bernardo podrías llevar a Angelo con Rosa y le de fresas con Chantilly.
-vamos pequeño.
Lo toma de la mano y se lo lleva.
-dime que ella…
-ella murió por cáncer y dejó al bebé con Claudio.
-¿dónde está Claudio?
-huyendo. Abandonó al pequeño pero lo más complicado es que él nunca te encontró.
-hija eso es mentira yo pagué para que Claudio la sacará y viniera conmigo. Tenía pagado una propiedad. Por eso fingí mi muerte. Pero luego lo de Gabriel.
Suspiro y me siento en el sillón. Dejó que mi mente busque respuestas.
-¿ era tu amante?
-Mi niña yo le fui fiel a mi esposa. Amelie la conoci hace seis años en una reunión con su padre. Él quería casar a su hija con Gabriel. Pero era tan niña. Le regale cosas y cuando la veía salíamos.
-El año en Alemania fue…
-Pase tanto tiempo allá, fui su primera vez y mi corazón… pero nunca supe lo del bebé.
-por Dios papá tienes un bebé.
Le sonrió porque sus ojos amenazan con desbordarse.
-te cuento que solo me queda Paolo para verificar.
-mila no quiero perderte, cuidate mucho. Ese tipo es un arrogante.
Suena mi teléfono y veo el mensaje. Pide vernos para comer.
-Hablando del rey de Roma. Donde lo veo para comer.
-Al osella. Allí podemos cuidarte.
Le comuniqué mi respuesta y está de acuerdo. Ahora sólo falta que llegue la hora. Juego con Angelo y mi padre. El pequeño se queda dormido.
-mila… puedes dejar a Angelo aquí por favor.
-Sí papá.
Le doy un beso al pequeño y otro a mi padre.
-cualquier cosa estoy al teléfono. Te amo papá.
Salgo y afuera está una guardia doble, me miran con asombro. Ellos bien saben que tenemos que ser más cautelosos. Paolo tiene muchos aliados y negocios. El cree que no se nada de eso.
-lista mila.
-nací lista.
Salimos en las camionetas y vamos a toda velocidad, en la camioneta revisamos todo el plan y las posibilidades. Cuando se detiene la camioneta todos repiten sus claves. Salgo de la camioneta y veo a Paolo. Esta parado en la entrada del local. Vestido elegante y con su sonrisa falsa y arrogante.
-mila querida. Tu cada día más hermosa.
-Paolo favor que me haces.
Me saluda de dos besos en las mejillas y caminamos por el interior del local muchas personas de nuestro círculo. Camino sonriendo.
-eres muy conocida.
Llegamos a la mesa y me abre la silla, llega un mesero y toma nuestras órdenes veo algunos de los chicos ya. Respiro profundo.
-mila y tu abogado donde lo dejas.
-en algún lugar y no es mio.
-Me parece extraño aseguró ser tu novio hace poco.
-Paolo. Estoy aquí para resolverte mi vida personal o para cosas más importantes.
-las dos o como mi líder no merezco saber quién te acompaña.
Mi intuición me dice que sabe más de lo que debería saber. Le sonrió y tomo un sorbo de mi vino.
-también debes de entender que como tu líder merezco respeto y obediencia. No me gusta que investiguen mi vida. Me imagino son tus gentes las de las mesas. Y los de los autos durante estos dias.
Sus pupilas cambian ya callo.
-mila…
Le hago señas de que deje de hablar. Mis chicos toman a cada uno de sus agentes y los desarman e inmovilizan. Me pongo de pie y miro a todos.
-me imagino que se despidieron de sus familias. Paolo sabes quien soy y aún así te arriesgas a querer dañarme.
-no es tan simple mila. Tengo en mi poder al abogado.
-que bueno. El no es nada mio.
-pero el sabe mucho de ti…
-solo dime de que te va servir eso en el infierno. Tu padre sabe ya todo esto y lo de las casas verdes.