La Reina Del Mafioso

Capitulo 61

 

Canciones:

Convolk - Lonewolf

Cesar Santalo - Moving On

Lil Peep -Star Shopping

 

  Mi mente comenzó a procesar sus palabras y coloque los hechos que el me estuvo contando entre el recuerdo de su partida y lo que sucedió luego de eso. Pensé que con aquello me bastaría para resolver todas mis dudas y dejarme más tranquila pero no fue así, sentía que nada me resultaba suficiente para resolver el misterioso desaparecimiento de mi mejor amigo y creo que estoy entendiendo aquello, Milo se había convertido en otra persona, una persona muy diferente a la que yo conocía y sentía que el miedo de que el estuviera muerto se estaba convirtiendo en realidad, mi Milo estaba muerto y nunca iba a regresar.

 - Martina.- Deje de observar el vaso que estaba en la mesita de café para mirarlo a los ojos con frialdad. No es mi Milo y me costara un tiempo en superarlo.

 - ¿Que?- Conteste cortante. No se merecía palabras dulces de mi parte, no aquella persona frente mio.

 - Dime algo.- Hablo algo desesperado lo cual me desconcertó logrando que lo mirara con el ceño fruncido otra vez.

 - ¿Que?¿Tengo que tenerte lastima por lo que pasaste y decirte cosas hermosas de hermanos?¿De familia?-  Negué con la cabeza sin poder creer lo que deseaba de mi.- Fue tu decisión no la mía, tu decidiste meterte en esa mierda y mira como has terminado, hecho mierda, un muerto viviente. Te lo advertí millones de veces y decidiste hacer oídos sordos a mis palabras, ahora aguanta tu mierda.- Señale su cuerpo con mi mano abierta con repudio en mi rostro.

 - Entiendo que estés lastimada porque me fui así de tu vida y lo siento ¿De acuerdo?- Se sentó adecuadamente.- Y quiero compensarte todo ese tiempo sacándote de esta vida de mierda.- Mis ojos se abrieron del asombro por sus palabras y lo mire como si estuviera demente.- No tienes porque estar con ese maldito controlador de mierda de novio que tienes porque ahora estoy aquí, yo puedo darte la vida que mereces y ademas que puedo pagar tu universidad y darte dinero para que vivas cómoda sin trabajar hasta que termines tus estudios y...- Me pare de golpe y lo observe con rabia.

 - ¿Que mierda estas diciendo Milo?- Le pregunte con los labios apretados. Milo se paro y parecía no darse cuenta del odio que estaba teniendo hacia el.

 - Se que estas con el por su dinero y yo puedo solucionar todo eso, ahora tengo dinero ademas de...- Lo volví a interrumpir pero esta vez no me contuve ni en palabras ni en calma.

 - ¡¿ESTAS INSINUANDO QUE SOY UNA RAMERA?!- Le pregunte gritando con todas mis fuerzas. Los matones de Enzo comenzaron a salir de la habitacion de entrenamiento asustados y alterados por mis gritos.- ¡YO ESTOY CON EL PORQUE LO AMO Y ME IMPORTA UNA MIERDA SU PUTO DINERO, ASÍ QUE MEJOR CIERRA TU SUCIA BOCA Y VUELVE A TU TRABAJO ANTES DE QUE YO MISMA TE MATE Y TEN MÁS RESPETO CUANDO TE DIRIJAS A MI!- Milo observo a los hombres que nos rodeaba con cautela y luego sus ojos se encontraron con los míos de los cuales salia fuego y magma.- Cuida las putas camionetas y cuando volvamos a la mansión quiero que para mañana todas brillen de lo limpias que las dejaras, y cuando me refiero a todas es todas.- Me estaba comportando como una maldita perra pero eso es lo que el se merecía por haberme insultado a mi, a Enzo y a mi nueva vida de la cual estaba aprendiendo a sobrellevar.

 - Si, mi reina.- Su voz sonó asqueada y odiosa cuando se dirigió a mi con la mirada de todo el mundo clavada en el.

  Milo salio del piso con mala cara. Todos habían quedado completamente callados mientras yo seguí observando con odio la puerta por donde se había ido Milo.

 - Que alguien lo vigile de cerca y nadie le dirá nada de esto a Enzo, yo se lo contare cuando lo vea.- Me gire sobre mis pies y me encamine de nuevo a la sala de entrenamiento.- Sigamos con el entrenamiento.- Los hombres se comenzaron a mover mientras yo ingresaba a la sala para seguir practicando king boxing.

  Me enfoque en pegar duro y correctamente sin fallar ni una ademas de esquivar golpes. Las palabras de Milo me resultaron dolorosas más proviniendo de el. Las personas ajenas a mi vida opinaban de mi de esa forma, que era un ramera, una zorra, una prostituta, que solo me importaba el dinero y el poder que conlleva ser la novia del gran magnate Cock Enzo pero las cosas no eran así, yo no quise enamorarme de Enzo pero todo sucedió como no quería y termine perdidamente enamorada de un hombre peligroso, guapo y adinerado, y con tan solo en pensar en no verlo por las mañanas y hablar tonterías todo el tiempo cuando estábamos a solas me ponía muy triste hasta tal punto de perder todo conocimiento de como tengo que hacer para que me cuerpo funcione para poder vivir o que tengo que hacer para cuidarlo. Ahora solo quería volver a casa y llorar entre los brazos de mi amando porque mi corazón dolía porque la persona que consideraba mi única familia pensaba que era una puta y ahora tendría que distanciarme de el para no querer asesinarlo por sus palabras crueles y ignorantes.

  Salí del gimnasio con mis auriculares cubriendo mis oídos mientras una canción se reproducía tras otra y otros y así sucesivamente. Vi a Milo entre las camionetas esperando totalmente tenso a que nos vallamos.



#3733 en Novela romántica
#231 en Otros
#231 en Acción

En el texto hay: armas, romance, mafias

Editado: 06.07.2021

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.