La Reina Del Mafioso

Capitulo 66

 

Canciones:

Ariana Grande - God is a woman.

HALSEY - Control.

 

  La luz de la televisión iluminaba la habitación. Así doler los ojos ya que había que hacer un esfuerzo para poder ver los rasgos faciales del otro y ademas para localizar el cuenco de pelotitas de colores de un dulce sabor y suave pero a la ves crujiente textura.

 - Perdón que te diga esto Mart pero tu novio es un imbécil.- Trayce hablo luego que yo le contara todo lo sucedido entre Enzo y yo.

 - No hay problema, últimamente yo creo que es un imbécil por como se comporta.

  Tome un puñado de bolitas y me las lleve a la boca al mismo tiempo.

 - ¿Planeas perdonarlo?- Me pregunto mientras me copiaba mi forma de comer.

 - Si, pero si admite que el cometió un error y me pide unas disculpas adecuadas para el asunto.- Me tire para atrás y mi cabeza aterrizo sobre una suave y peluda almohada mientras que el resto de mi cuerpo descansaba sobre aquel colchón que no me parecía de lo más cómodo comparado con los que hay en la casa de Enzo.

  Mire hacia la televisión y mire el programa que estaba transmitiendo. Era un programa en el que se dedicaban únicamente a meterse en la vida privada de las personas reconocidas. Escuche lo que debatían tres mujeres y un hombre. Hablaban sobre el asesinato de aquel maldito modelo que me arruino la existencia. Tantee sobre la cama en búsqueda del control remoto y cuando lo encontré inmediatamente lo cambie a otro canal que diera alguna película desconocida por mi parte.

 - También odio ese programa, ademas que no paran de hablar de ese modelo.- La voz de Trayce me sobresalto ya que estaba concentrada en mis pensamientos.

  Mire a mi amiga la cual estaba tomando de un popote su bebida light marrón y burbujeante.

  Me sentía extraña en aquel complejo de departamentos privados. Sentía el lugar frió y no cálido como la enorme casa de mi novio. Para algunas personas le resultaban cálidas las casas de un tamaño mediano o pequeño y no una casa clasificada como "mansión". Siempre supe que era rara en gustos y personalidad pero esto era diferente, lo sabia dentro mio, aquello era porque en esa mansión pasaba los mejores momentos con la persona que amo y también malos pero a pesar de todo amaba estar en ella porque sabia que luego de un día largo en la universidad y en el trabajo el estaría ahí para mimarme y calentarme con sus brazos anchos, fuertes y llenos de garabatos en tinta.

  Mi corazón se hizo pequeño en su lugar cuando bellos recuerdos en donde se encontraba Enzo recorrieron mi mente. Deseaba estar a su lado y abrazarlo pero eso seria dar el brazo a torcer ademas que me volvería sumisa hacia el y eso obviamente no era lo mio, puedo ser tímida, amable, inocente y cariñosa pero nunca dejaría que nadie me falta el respeto de tal manera y salirse con la suya. Odio la injusticia como odio a la policía, nunca sabre porque odio aquellas personas que trabajan para resguardar nuestra seguridad, solo que no me transmitían confianza.

 -¿Que te parece?- Nuevamente la voz de Trayce me tomo desprevenida y lo único que hice fue mirarla con los ojos bien abiertos. Ella suspiro.- Deja de darle la vuelta por un momento a el problema que tiene con tu novio y relájate, mujer.- Ella se arrastro hacia mi y me sentó a mi lado.- ¿Quieres ver alguna película que te guste?- Me pregunto mientras sostenía el control remoto del televisor entre sus manos.

  Me dispuse a contestarle pero unos golpes en la puerta de la habitación nos hizo callar a las dos y mirarnos con sorpresa. Trayce se paro sobre la cama y de un salto se bajo de ella para poder abrir la puerta. La luz amarilla del pasillo que colo en la habitación haciéndola ver más oscura de lo que ya estaba.

 - ¿Que sucede amor?- Pregunto con coquetería mi amiga a su novio, Diego, uno de los matones de mi novio.

  Diego asomo su cabeza dentro de la habitación y cuando sus ojos me encontraron sobre la cama hablo.

 - El jefe quiere hablar contigo, Martina. Esta fuera, en la puerta de entrada.

  Y luego de esas palabras Diego se largo por el pasillo a otro lado del departamento.

 - ¿Iras?- Me pregunto Trayce desde la puerta abierta de la habitación.

  Me mordí las uñas un tanto nerviosa por verlo pero al final me decidí.

 - Iré a ver que quiere, tal vez me ha traído ropa o algo.- Dije mientras me bajaba de la cama.

  Me coloque mis zapatillas en un rápido movimiento y salí de la habitación. No necesito cambiarme ya que aun no me había puesto el pijama que me había prestado Trayce el cual aun descansaba sobre una esquina de la cama. Baje las escaleras y me dirigí a la puerta de entrada la cual estaba abierta de par en par. Pude ver como Enzo mantenía su mirada sobre sus zapatos de vestir y con sus manos ocultas en los bolsillos de su pantalón. Estaba tan concentrado que no sintió mi presencia frente suyo.

 - ¿Que sucede?- Pregunte mientras me cruzaba de brazos.

  Enzo Levanto la mirada rápidamente y no pude evitar que algo me pinchara al ver sus ojos brillozos y bellos bajo la luz de la entrada americana del departamento.



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En el texto hay: armas, romance, mafias

Editado: 06.07.2021

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