Capitulo 6

Miriam

Al regresar al dormitorio me acosté a la par de violet y me dormí rápidamente.

-Miriam, es hora de levantarse-dijo Violet mientras me daba unos pequeños empujoncitos ,lo cual fue efectivo porque me levante de a poco, al abrir completamente los ojos ya me alzaba una taza de agua tibia y algo oscuro en un vaso pequeño.

-Toma-dijo, tome primero el pequeño vaso que tenía ese líquido oscuro y me lo tome de un solo trago, mis ojos estaban llorosos y tenía ganas de vomitar, esos eran los efectos que tenía cualquier medicina en mí, era una herencia de parte de mi abuela materna, Violet me tendió la taza de agua y con gusto lo tome, pues eso calmaba un poco los efectos, al probarla me di cuenta de que el agua estaba mezclada con miel, fue una gran alegría para mi paladar.

-Gracias-dije

-Tock Tock-se escuchó débilmente-Buenos días, señoritas, soy Janeth, el señor Mc.Gregor me envió para ayudarlas a arreglarse.

-Pase-Dijo Violet mientras se levantaba de la cama y ponía la taza y el bazo en la repisa. Janeth entró a la habitación acompañada de otras tres muchachas, que por sus uniformes llegue a la conclusión de que eran sirvientas del hotel.

-Preparen el baño-ordeno Janeth a las dos muchachas de pelo negro.

-Molly , tú trae los vestidos para las señoritas

-Si-Dijo la chica y enseguida salió de la habitación.

-Ya está listo el baño - informo una de las chicas -mientras la otra esperaba en la bañera.

-Ayuden a Violet primero-dije rápidamente.

-Pero- quiso replicar Violet pero la pare.

-No te preocupes por mí, hazlo tu primero para que sea más rápido, no estoy mal y tú has estado cuidándome todo este tiempo, creo sinceramente que tú necesitas ese baño más que yo para poder recuperar energía y si después de ello quieres cuidarme no me opondré-dije sonriendo, ella aceptó por mi gran insistencia, ella entró y salió en unos pocos minutos.

 Las sirvientas eran bastante eficientes porque en minutos ya tenían preparado el baño para mí. Fui y al volver mi hermana ya estaba lista y me esperaba sentada, tomando una taza de té. Molly me ayudo a ponerme el vestido azulado pálido y Janeth arreglo mi pelo en una hermosa trenza suelta con un pequeño listón azul oscuro al final de ella. Al finalizar las sirvientas más jóvenes se despidieron y solo quedo Janeth, quien nos escoltó  a la pequeña sala donde nos reunimos con nuestro padre y Angelo a tomar el desayuno.

Al vernos ambos se levantaron y nos saludaron con una sonrisa.

-Te siente bien pequeña-pregunto mi padre. Sonreí.

-Si padre, gracias a los magníficos cuidados de Violet, no tienes por qué preocuparte más.- Todos nos sentamos en la mesa y desayunamos sin hablar. Al finalizar Angelo informo que podíamos partir en unos minutos 

-Eso sería magnífico-respondió padre abrazándonos a ambas - su madre debe de estar muy preocupada. Así, sin más demora, partimos hacia la mansión, yo completamente recuperada y Violet algo cansada. 

Mi padre y Angelo , habian decidido ir a caballo, así que solo éramos las dos en el carruaje de regreso a nuestro hogar. Violet había caído dormida a mitad de camino, así que para no aburrirme saque un pequeño cuadernillo que siempre llevaba conmigo y escribí todo lo que había ocurrido en estos dos días. Después de unos minutos llegamos al camino que se usaba para llegar a la mansión, saque un poco la cabeza por la ventana y vi a mi madre esperándonos en la entrada.

-Violet- susurré mientras le daba unos empujoncitos 

-mmm-respondio

-Ya llegamos -dije, ella se incorporó rápidamente, en unos minutos más el carruaje paro y alguien abrió la puerta del carruaje, además extendió su mano para ayudarnos a bajar.