La rosa del destino

sorpresas del día

Todos pensarían, fin de semana y siendo menor de edad estaría acostada hasta tarde, se equivocan, estoy levantada desde las ocho de la mañana un día convertido en especial por parte de mi mamá, es la limpieza de fin de semana, se hace cada sábado que pasa, esto dejando los domingos para hacer otra cosa, pero como estoy castigada, lo único que puedo hacer es esperar, al lunes. 

- Hija ya apresurate es hora de empezar el día - lo grita ya que estoy en el baño lavando me los dientes, escupo la pasta dental al lavabo. 

- Ya voy - término de hablar para dar un trato a Mi vaso de agua esto para enjuagar, una ves que terminó agarro la toalla de mano para secar me la boca, Salgo esta esperando Julían algo urgido por entrar - Perdona no me quise tardar mucho.

- No nada más te tardaste media hora - lo dice brincando como rana. 

Ya, ya entra estado tuyo el baño - veo que entra antes de que entre por completo suelto una patada de burro haciendo que entre mas rápido una vez adentro cierro la puerta - de nada oigo sus quejidos antes de irme , bajo las escaleras, mi felicidad no dura mucho tiempo - hola mama para que es son estas cosas?

- Bueno ya sabes que es limpieza de fin de semana Así que he querido limpiar - lo dice como si la casa estuviera muy sucia.

- Mamá, pero si te das cuenta no tenemos un plantas adentro de la casa - lo decía por que había tijeras y unas cuantas herramientas para jardín.

- No hija, la casa esta limpia, lo que vamos a limpiar es el jardín - creo que no escuche bien lo que me decía.

- Mamá, a ver si entendí bien, quieres que limpiemos el jardín - lo decía a ver si era lo que realmente escuché.

- Si ya que me la paso limpiando la casa a profundidad, creo que lo justo a que me ayuden a algo, y cuando digo a algo me refiero a todos - se queda viendo a mi papa.

- Si esta ves estaré en casa, no te preocupes - lo decía mientras se levantaba del sillón, pobre de mi papa, y decía yo que era a la que le iba mal, veo que Julían va bajando las escaleras.

- Bueno, como te fue hermanito esperó no te hayas lastimado - lo decía burlona dome de el.

- Muy graciosa, mama voy a ver a unos amigo - lo decía mientras me veía a la cara.

- A no, tenemos que hacer limpieza, que no se te olvide - me interrumpe mi mama.

- Puedes salir Julían, ya sabes regresas temprano - me quedo si palabras.

- Mamá dijiste que había que hacer limpieza en el jardín porque Julían puede salir - me interrumpe.

- El a sacado dieses y llega temprano, otra cosa - apenas podía pensar pero tenia razón me cruzo de brazos muy molesta por lo que paso.

- Bueno, ya empecemos - salimos de la casa al jardín, ya que era algo grande a decir verdad era lo mas hermoso que tenia esta casa, flores de varios colores y de diferentes nombres, habían aquí, mi mama le gustan mucho las flores, pero su favorita es una que esta en la sala un rosal, ella dice que ya tiene tiempo conservándola, desde que era niña, suena ilógico ya que una rosa no dura mas de una a hasta tres semanas que se me hace que la cambia una ves que la ve fea para que no nos demos cuenta.

- Amor, ayudas a nuestra hija a limpiar un lado del jardín - lo dice mientras se va al otro lado del jardín.

- Lo haré, bueno donde quieres empezar - me pregunta, a mi me da igual lo que quiero es acabar lo más rápido posible, mis plantas favoritas son las petunias por su diseño las de color morado son mis preferidas del jardín mi papa me ayuda ya que no soy muy buena cuidando plantas - Hija, te puedo decir algo - me decía mientras dejaba las plantas. 

- Si papa que pasa - le preguntaba mientras arreglaba las flores de el jardín.

- Por que no le pones interés a lo que tu mama quiere y te evitas regaños - me mira aun que no quiero siempre sale algo mal creo que no lo entendería.

- Se que no suelo hacerlo quiero, pero aun que lo intente, de todos modos no sale - agarro el tallo de la flor creo que ella si me entendería, aún que no hable.

- Se que tu mamá suele ser muy estricta contigo, pero lo hace por que te quiere - lo interrumpo.

- Papa, no sabes cuantas veces lo intento, han sido demasiadas que ya perdí la cuenta - sin duda no soy muy buena y luego que mi madre busca que sea perfecto, así no se puede.

- Sea lo que sea, hija sabes que cuentas conmigo - hizo que me sintiera mejor, hasta se me olvido la preocupación que tenia, luego de un rato de estar limpiando, no sabia que el jardín tenia su tiempo al ver el celular ya eran la una y media.

- Que papa, ya es tarde y no hemos comido nada - lo decía sollozando.

- Si es verdad ya llevamos mas de dos horas aquí, espera me voy hablar con tu mamá de esto - se dirigía a donde estaba mi mamá mientras oía como mis tripas rugían, era una orquesta ahí a dentro, luego de un rato llega mi papa de hablar con mi mamá - ya esta en un rato vamos a comer algo - eso fue musica para mis oídos y mi tripa seguía con la mismo ruido, mi papa empieza a reír cuando escucha mi estomago.

- Ya papa deja de Reírte - le digo algo molesta.

- Lo siento es que suena chistosa tu pansa, hasta diría yo que tiene ritmo - no podía negarlo hasta a mi me dio risa de solo escucharla una ves, esperó que se apresure, aveces tarda mas en su jardín incluso mas de lo que ya tardamos aquí, no se que puede ser peor, suena es el timbre de la casa, de seguro es Julían que tampoco comió viene a ver que hay, se la he de aplicar - hija sal a ver quien es.



#31622 en Otros

En el texto hay: romance y aventura

Editado: 22.10.2018

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.