No desperdiciarás la oportunidad de contradecir.
No es un problema: Yo también me considero un óvalo
Hasta que me añaden líneas rectas mis emociones
Y lo arruino todo.
No te verás entre dos líneas paralelas, agregarás una tercera para avalar un triángulo. La geometría no es tan simple.
Agregarás otra recta, da igual cómo se alinee todo:
Tres hacen un triángulo y cuatro un cuadrado.
Una lógica paradójica, culpa del tirano de la perspectiva.
Envasa cuatro kilos de paréntesis en una bolsa de interrogaciones:
Tienen proporciones curiosamente parecidas
Pues el contenido original de esa bolsa se irá disolviendo
Hasta quedar esas preguntas tan sólidas que necesitan demasiados paréntesis.
Por culpa de Einstein los absolutos no existen y esto tampoco es tan cierto para ti como para mí.
Cuadrados ¡Todo lo queremos encerrar en cuadrados!