Capítulo 3: los milagros en la actualidad

Cuando Jesús caminaba en esta tierra con las personas de su época (hace 2018 años aproximadamente) les hablaba acerca de la fe, el reino de Dios y siempre se dirigía a Dios como su papá, pero no era como muchos predicadores o personas cristianas de hoy que solamente hablan, sino que todo lo que decía lo respaldaba con acciones y me emociona pensar cómo vivió Jesús porque rompió muchos paradigmas culturales y religiosos de su época, era un hombre loco, en el buen sentido de la palabra, porque no le importaba lo que pensaran los demás Él lo único que buscaba era obedecer y agradar a Dios con sus palabras y acciones, Él enseñaba muchas cosas a los que le seguían, pero también accionaba todo lo que decía porque ayudaba a las personas pobres, sanaba a los que por muchos años estaban esperando un milagro, hacia sentir importante a las prostitutas, no despreciaba a los cobradores de impuestos (en ese tiempo, los cobradores de impuestos estaban en el top de personas más odiadas), entre más ejemplos que te podría dar.

En la actualidad vemos a cristianos muy hipócritas (obviamente no todos lo son) que solo dicen cosas bonitas y tienen buenos pensamientos, pero que no se ocupan de las necesidades de las personas de hoy en día, siendo que deberíamos estar en el top de personas que ayudan y las personas nos deberían conocer por esa razón y no por ser hipócritas o de mente cerrada, aún así estoy seguro que muchas personas nos continuarán odiando, pero eso es parte del paquete, es algo inevitable porque nunca terminaremos de agradar a las personas. Sin embargo, si queremos agradar a Dios, una de nuestras prioridades debería ser representar a Dios de la mejor forma (somos sus hijos y un hijo es el reflejo de lo que son sus papás). 

Jesús fue el mejor ejemplo y el mejor representante de Dios en la tierra, podemos destacar y aprender muchas cosas de Él. Por ejemplo, en una ocasión, Jesús se encontró con Mateo, un cobrador de impuestos (recuerden cómo eran ellos en esa época), y Jesús le dice sígueme y Mateo acepta e incluso lo invita a su casa a comer (me hace pensar que nadie hasta ese momento lo había tratado como Jesús, que siendo un Maestro, no tuvo desprecio hacia él). Cuando Jesús, sus seguidores y Mateo estaban en su casa llegaron unos fariseos (maestros de la ley) y vieron que Jesús estaba con un cobrador de impuestos y mucha gente pecadora, mala, de mala fama, etc. al ver eso, ellos preguntan ¿por qué Jesús se junta con gente como esta? y Jesús escucha lo que dicen y les contesta: el hospital es para los enfermos, no para los sanos. Yo vine a invitar a esta clase de gente (pecadores y de mala fama) para que me sigan y sean mis discípulos, no me interesan los que se creen buenos.

En otra ocasión, mientras Jesús hablaba a una multitud, llegaron a él algunas personas, entre ellas una mujer que le cuenta que su hija está muerta, pero que tiene confianza en que si Jesús la toca, ella volverá a la vida. Habiendo dicho eso, Jesús acompaña a la mujer y llegan a un lugar en donde ya estaban reunidas varias personas con música preparando el entierro de la niña, a lo que Jesús les dice, salgan de aquí, la niña no está muerta, solo duerme... La reacción de las personas es risa, pero una vez que toda la gente sale, Jesús se le acerca y la toma de la mano, en ese momento, la niña se levanta y todos quedan asombrados. Todos en la región se enteraron lo que pasó y muchos creyeron en Jesús. 

Y así como estos hay un montón de ejemplos en ocasiones que Jesús hizo milagros y sanidades con muchas personas, que si me pongo a contarte todas, se haría un libro solo con eso. Lo que quiero destacar es que Jesús era un hombre que ayudaba mucho a las personas necesitadas, sin importar sus condiciones, su pasado, sus pecados, etc. Dios le instruyó de manera que tenga gran compasión y amor hacia la humanidad al punto de entregar su vida por todos y hasta la última gota de sangre pedir perdón representando a la humanidad (si no lo sabías, mientras Jesús estaba sufriendo cuando moría en la cruz, siguió diciéndole a Dios: perdona a estas personas, no saben lo que están haciendo). Nunca nadie se preocupará ni te amará como Jesús te ama.

Ese amor de Dios, impulsó a Jesús para hacer todo lo que hacía: sanar enfermos, enseñar, ayudar a los pobres y prácticamente suplir todas las necesidades que el pueblo tenía. Podemos aprender mucho acerca de cómo Jesús actuó mientras caminaba en la tierra y hay demasiados ejemplos y enseñanzas en su vida, solo te puedo decir que vale la pena ser como Jesús y en ese sentido ayudar a todas las personas que tengan necesidades y de esa manera se puedan acercar a Dios porque diremos que todo lo que hacemos no es para que la gente nos admire o que seamos famosos, sino que Dios sea admirado y Él sea famoso en todos los rincones de la tierra. La mejor forma de hablar acerca de Dios siempre será con acciones porque todo buen árbol da buen fruto y así toda buena persona hace buenas cosas.

Algo muy importante también es que estas acciones las hagas con el enfoque correcto, es decir, que Dios sea el centro de todo eso y no sea porque tú quieres los agradecimientos, la honra o porque tienes tiempo libre y quieres actuar como una buena persona o porque quieres ayudar a los demás (esta última es muy engañosa ya que parece algo completamente normal y bueno, pero si lo que haces no es para agradar a Dios y por obedecerlo, entonces solo estás perdiendo el tiempo).