Capítulo 7: Cenicienta en el Elevador

Narra T/N:

El señor Jung es muy amable a comparación del señor Min, tiene una linda sonrisa encantadora y radiante que sin ninguna duda sería popular para las latinas, incluyendome, pero por ahora no me interesa en citas además es mi “jefe” y yo respecto a mis jefes. El me ha hablado todo lo que hacen en el departamento pero ya que el señor Min me incluyo también en traducir alguna información y papeles entonces debo dar una muy buena presentación de la marca para los clientes internacionales, así que el señor Hoseok me dio diferentes cuadernos folders todo acerca de la marca MiN, desde el año que se comenzó desde cero hasta el año actual, si que son muchos pero esta bien asi se me pasara el dia mas rapido, asi que me ahi me quede leyéndolas en mi nuevo escritorio que me dejó el señor Jung, extraño mi viejo escritorio donde se encontraban mis amigos extranjeros pero ya que, fuimos contratados y estamos metidos en nuestros departamentos correspondientes, igual los veré en la cafetería en nuestra mesa eso es lo bueno.

Cheque mi reloj de mano y ya faltan diez minutos para mi hora de salida, vaya en serio que me duelen mis ojos que siento que no parpadee todo el dia, creo que usare mis lentes de descanso

- Señorita Leal - dijo el señor Jung - ¿cómo se encuentra? ¿Está bien? - preguntaba mientras se acercaba con una sonrisa

- Oh, hola señor Jung, si estoy bien, bueno tengo mis ojos cansados después de tanto leer todo esto y me apena mucho de que no lo haya terminado - decía mientras limpiaba mis lentes hasta no ver ningún polvo por el reflejo de la luz de la lámpara del techo

- Ah, no te preocupes, no tienes que apresurarte en leer todas así en un día - comentó e hizo un chasquido con su dedo - tómatelo con calma -

- Ojala pero por las prácticas del señor Min y por su gran actitud de querer todo terminado en el día exacto que lo pidió bueno… - sonreí con una media sonrisa mientras levantaba mis hombros y el afirmo con la cabeza mientras sonreía

- Te entiendo perfectamente y no te culpo, así lo entrenó su padre y terminó como esta ahora pero por el otro lado igual lo entiendo a el, quiere crecer más el negocio de su padre, que sea reconocido por todo el mundo como la marca Dior, Gucci, Louisvuitton, Ysl, entre otras -

- Si, pero se requiere de tiempo - comente

- Lo se, pero Yoongi no es tan paciente, por eso lo quiere todo rápido y perfecto, pero no sabe que para hacerlo todo bien hecho debe tener la mente activa pero calmada, porque con eso tendrá mucho estrés -

- ¿Tiene un ataque de estrés o ansiedad el señor Min? - pregunte un poco curiosa pero por alguna extraña razón mi tono sonó a preocupada haciendo que el señor Hoseok me mirara de forma impresionado

- ¿Cómo lo supo? -

- Ah… nomas lo pregunto, nada mas - decia mientras lo negaba con mis manos, lo se porque he leido que en corea hay mucho suicidio de los jovenes estudiantes por sus estudios porque son demasiados competitivos, eso me hace sentir pena por ellos

- Ok - dijo y se aclaro la garganta - pero ya que el señor Min no está aquí, se puede ir señorita Leal -

- ¿Como? pero… - cheque de nuevo mi reloj y aun falta unos minutos para irme - aun no son las ocho - decía con pena

- No te preocupes, el señor Min no se da cuenta de mi pequeño secreto, solamente su madre porque igual no le gusta ver a los empleados estresarse, en los últimos diez minutos dejó que se estiren un poco antes de irse -

- Entiendo y se lo agradezco mucho señor Jung pero en serio, ya me acostumbre a irme después de mi hora, me pone mas tranquila asi que salir un poco antes de mi hora, lo siento - lo ultimo lo dije con una leve reverencia de disculpa

- Oh no tienes que disculparte, es su elección, se nota que eres muy educada y tomas en serio tu trabajo siguiendo las reglas del señor Min, eso le gusta al señor Min - al decir eso puso una cara rara pero coqueta que lo mire rara

- ¿Ok…? - espero que no quiso decir de que le gusto al señor Min porque si asi lo fuera, agarraria la primera bebida que me encuentre para luego tomarlo y asi escupirlo - bueno, gracias señor Jung - dije después de aclarar la garganta

- De nada señorita Leal, bueno, nos vemos mañana -

- Igualmente, ¡oh espera! -

- ¿Si? -

- Amm, ¿está bien que saque copias de las carpetas? ¡pero no es para que las robe! sino para poder sacar la información importante y usarlos para poder traducirlas y pasarlas con los idiomas que el señor Min quiere que traduzca -

- Oh claro, no hay problema, puedes llevarte una por una a tu casa, pero si quieres estar mas tranquila le puedo preguntar al señor Min -

- Oh no, yo lo hago, se lo diré mañana en la mañana porque ya es la hora de irnos -

- Entendido, pero si quieres que te acompañe para que no te grite avisame sin problemas ¿de acuerdo? -

- Lo tomare en cuenta señor Jung, gracias -

- Bueno ¿no ocupa algo más? -

- No estoy bien, nos veremos mañana señor Jung, buenas noches -

- Para ti tambien señorita Leal, buenas noches y bienvenida a la empresa MiN que se me olvido decirtelo en la mañana - me lo dijo con una leve reverencia como los príncipes

- Muchisimas gracias, bye bye -

- Bye - dijo y asi lo perdí de vista en el pasillo, suspire para luego pararme y estirarme por estar todo el tiempo sentada, creo que en mis descansos volveré a acompañar a mis padres coreanos con sus clases de yoga en el parque, guarde mis cosas, acomode las carpetas en mi cajón y me puse mis lentes de descanso para ya agarrar mi maletin y así salir de mi oficina, aunque no tenga ninguna habitación mi oficina por ser un simple escritorio que se comparte, me dirigí al pasillo hasta llegar a la puerta del elevador, toque el timbre y se abrió al primer segundo y dentro de ella me encontré con el señor Min y la asistente que igual se impresionaron a verme, no de nuevo