la tragedia del cazador

un paso menos al abismo

Se que voy a morir, es un hecho, una decisión, no tengo miedo, pues nunca lo he tenido. Desde aquella noche en ese bar he comprendió que nunca nada será igual... Mientras camino en este frío, solitario y lluvioso bosque, pienso: ¿que es la vida?. Envidio a todos aquellos que se regocijan con su poder Y odio a los que desperdician el poco que tienen.

El bosque puede ser frío y escalofriante, pero es hermoso, amo ver caer las hojas de los árboles y amo ver como los animales viven entre el. Pero aquella noche era diferente.

Después de caminar unas cuantas horas la lluvia cesó, el silencio Reino en el bosque así que pare. Entre los árboles se empezó a sentir unos pasos, alce mi Ballesta apuntando hacia el lugar donde provenía el ruido y espere...

El ruido incrementaba, mi pulso se aceleraba y el sudor caía por mi rostro. Estaba apunto de apretar el gatillo hasta que depronto entre el oscuro  y horripilante bosque salió una mujer, tenía un hermoso cabello negro al igual que sus hermosos ojos, una piel blanca como la nieve y una vestimenta un tanto peculiar, ya que parecía una guerrera. su traje era en su mayor parte de cuero con sierto puntos donde traía hierro para evitar los ataques certeros.

Baje la Ballesta y le pregunté su nombre, ella con una voz dulce pero dominante me dijo que se llamaba arisa.

Mi corazón latía rápidamente como si estuviera asustado pero... no era asi. ¿Que era lo que me estaba pasando?. Esa pregunta no me la pude responder.

Arisa me pregunto hacia donde me dirigia, yo con un tono de desconfianza le dije que no tenía rumbo definido. Ella me sonrió y con unos segundos de silencio me dijo que la siguiera, yo la seguí de inmediato no se que me paso, sólo sentí la necesidad de hacerlo.

Caminamos un largo rato, hablamos, reímos y en cierto modo lloramos. Fue algo extraordinario por una vez en la vida aquel interminable vacío se desvaneció. pero como todo lo hermoso tenía que llegar a su fin.

Después de una larga caminata llegamos a un poso donde ella se detuvo, guardo silencioso por unos segundos y luego con un tono de tristeza me dijo: cazador, vete. Yo de inmediato le pedí una explicación a lo cual ella me respondió: soy tu muerte si te quedas más tiempo con migo tendré que matarte.

Mi rostro se paralizó, mi voz se torno temblorosa y aquella felicidad se convirtió en dolor.

Sin decir ni una palabra, dirigí mi camino hacia el otro lado, la lluvia volvió a caer, el frío se intensificó y cuando di exactamente 6 pasos pare. ¿De que me servía seguir viviendo si no la volvería a ver?, no volvería a sentir a la única persona o bueno cosa que me ha hecho feliz. Voltee a ver de nuevo al pozo y para mi sorpresa ella ya no estaba allí.

Lágrimas caían de mi rostro, el dolor y La desesperación me domino y sin pensármelo ni un segundo corrí y me lancé hacia el poso. Mientras caia cerre los ojos, pues por una vez en mi existencia aceptaría la muerte.

De repente unas manos suaves me tomaron y un delicioso aroma domino el ambiente. Cuando abrí de nuevo mi mirada, era ella con sus hermosos ojos negros, ella me sonrió y con su hermosa voz me dijo: si que eres idiota cazador. Yo respondí: no es ser idiota, al contrario es ser demasiado listo.

Entre un cataclismos de luces y sonidos del bosque, nos besamos y en ese mismo momento comprendí que a veces la motivación se encuentra justo frente de ti.



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En el texto hay: desesperacion, un romance, una dura decisión

Editado: 28.04.2019

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