Primer contacto
—He aquí, te he creado, eres la misma imagen de la perfección, lleno de sabiduría y belleza.
Estas fueron las primeras palabras que escuché de mi padre, era algo completamente indescriptible lo que sentía en aquel momento, fui vestido con piedras preciosas, colocadas en los encajes de oro que acababan de diseñar para mí.
—Serás el querubín protector, portador de luz, tu trabajo será comunicar el conocimiento de mi voluntad, tu nombre será Lucifer.
Desde ese día, me convertí en el comandante, y sobre mí solo se encontraba el intercesor Jashua.
Mi felicidad era inconmensurable, saludaba a las estrellas y me despedía cuando su luz perecía, mi corazón estaba completamente lleno de amor, amaba toda creación, ante mis ojos el universo era mi espectáculo favorito, mis hermanos me admiraban y yo a ellos, mi existencia era plena… —su voz se quebró.
~°~
Hace unos días me encontraba realizando un trabajo, cuando un video llamo mi atención, salió de la nada en la parte de recomendaciones, me gusta escuchar música para concentrarme, mi curiosidad fue superior en aquel momento, se llamaba pacto con el diablo, creí que se trataba de algún ritual con sacrificios con un pentagrama o algo por el estilo, el tema era cliché, pero no, era más bien algo simple, solo un gráfico, era un dibujo sencillo sin mayor geometría, más algunas palabras, símbolos y listo, podrías tener una “entrevista” con él y poder preguntarle lo que quisieras y el igual a ti, me pareció una broma, una total pérdida de tiempo, lo deje y seguí con mi trabajo, quería acostarme temprano, ya era mi tercera noche trasnochando y mis ojeras podían verse a la distancia; luego de unas horas di por sentado que no dormiría pronto, termine de redactar, guarde, cerré los programas, apague la música, en eso, una imagen se había abierto en una pestaña secundaria, no recordaba haberla abierto y quien sabe hace cuanto que estaba allí, no paso mucho para percatarme que, era el gráfico de aquel video del pacto, me llamo la atención pero no le di mayor importancia, cerré la ventana, apague y me recosté en mi cama con mi teléfono en la mano para revisar un poco los mensajes y notificaciones, no paso mucho cuando el sueño me vencía, apague la pantalla, lo coloque en mi escritorio y me quede dormida…
La mañana siguiente fue más tranquila, fue un día normal, como de costumbre hice mis quehaceres y fui a clase, al llegar a casa en la noche y luego de cenar, abrí mi laptop y me dispuse a realizar un trabajo para no dejarlo acumular el fin de semana y fue allí donde todo cambio…
Abrí el programa de Word, le di a la opción de nuevo documento, pero para mi sorpresa algo no estaba bien, definitivamente no estaba bien…
Estaba escrita la palabra “Hola”, por más que intentaba reflexionar sobre las posibilidades de que esto fuera normal, no hallaba una solución, cerré rápidamente el documento, no guarde por obvias razones y me tomo un rato darle nuevamente a la opción con temor que se repitiera, pero, aunque sería algo traumático, sería más fácil darle explicación, dando que era alguna configuración predeterminada con el texto pregrabado… me decido por fin a abrir un nuevo documento y esta vez estaba completamente en blanco… sentí algo de alivio y me convencí que había sido mi imaginación; así que me enrolle en el trabajo y luego de muchos textos y escribir, aquel suceso quedo atrás… este trabajo era algo más corto de lo normal, por fin descansaría temprano, al guardar el trabajo y cerrar, me percate que otro documento estaba abierto, sentí como mis pies se colocaron helados… era el mismo documento con la palabra “Hola”.
Mi mente quedo en blanco, no pensaba en nada más que en recordar perfectamente que había cerrado el documento anteriormente, no hice más que cerrar la pantalla y alejarme de la laptop lo más que pude, me dirigí a la habitación de mi hermana quien se encontraba hablando con su novio por llamada, me miro con cara de sorpresa cuando entre.
— ¿Estás bien? —pregunto.
—Si… —respondí nerviosa —, ¿Por qué?
—Porque estas pálida…
—No… estoy bien… —Cambie rápido el tema para olvidar aquel raro suceso—, Saluda a Daniel de mi parte.
Ella le dio mis saludes y siguió en su llamada, yo tome mi celular y comencé a distraerme a como fuera lugar, evitar al máximo pensar en lo que había sucedido, comencé a mirar historias, publicaciones y cualquier entretenimiento mientras estaba sentada a un lado en la cama, su risa y conversación con su novio ayudaban un poco como distractores, luego de un rato se despidió y volvió su atención a mí.
—Oye, ¡Ayúdame! —me lo dijo algo ansiosa.
— ¿Con qué? —Pregunte confundida.
—No sé qué regalarle a Daniel…
— ¿De qué? —Aun no comprendía a que se estaba refiriendo.
—Sí, de mes… la otra semana cumplimos meses y estoy bloqueada…
—Pues… —mi cabeza estaba aún más bloqueada—, ¿Qué le gusta a él?
—Muchas cosas…
—Me refiero a si ha mencionado algo últimamente que quisiera…
Se quedó pensando un momento.
—Creo que sí, me dijo que su loción se iba a acabar.
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Editado: 14.06.2022