La última bruja del aquelarre

1 El inicio de todo

Corro por el denso y frio bosque sintiendo la lluvia impactar contra mi piel, con un solo pensamiento acarreando mi mente como un mantra

“DEBO SALVAR A MI BEBÉ”, no bajo la vista pero se que su pequeño rostro esta oculto y a salvo de la violenta lluvia, su cuerpo caliente por las mantas de piel que la cubren, no quiero alejarla de mí, solo he tenido una semana para verla, amarla… pero debo hacerlo. Ese solo pensamiento me hace apretar el paso y correr hasta que mis piernas duelen y el aliento en mis pulmones quema

Los gritos apenas y se oyen como ecos, pero sé que están cerca, que no se rendirán, lo único que me interesa ahora es salvarla, darle una oportunidad, llevo su cuerpo contra mi pecho evitando que la lluvia la toque, las gotas que caen del cielo se mezclan con mis lágrimas, la muestra factible de mi dolor, por un momento pienso que el cielo llora por mí, sabe lo que pasara. Llego hasta un pequeño paramo donde el agua cae en pocas gotas por la maleza y arboles que la rodean, apurando oxigeno en mis doloridos pulmones doy lo ultimo que puedo para salvarla, me pongo de rodillas y hundo mi mano en la suave tierra, las raíces empiezan a brotar formando una base lo suficientemente alta como para no tocar la humedad, pero lo suficientemente baja como para estar oculta, no reprimo el sollozo que emerge de mi corazón, es la hora, lo sé, pero saberlo no lo hace mas fácil, le doy un ultimo beso en su frentecita antes de dejarla con cuidado en las raíces, dejo entre las mantas mi collar, ese que paso generación tras generación entre las hechiceras más fuertes de mi estirpe,  quito las lagrimas de un manotazo y corto la palma de mi mano apenas y sintiendo el ardor

"Aer celeritate placant 
lustrare igni 
aquam benedictam 
Manifestum est autem terra 
Et oblinito Spiritus 
vultum tuum super vos vento trahentium super vos doceamini quæ optimus via 
Illumina faciem solis semper 
Et donec iterum conveniant in magica et custodiat te"

(español)


"Invoco al aire por la velocidad
al fuego para purificar
al agua para bendecir
a la tierra para manifestar
que el viento que sopla a tu espalda te cuide
que el sendero te enseñe el mejor camino
que el sol siempre ilumine tu rostro
y hasta que nos encontremos de nuevo la magia te protegerá”

La sangre mancha su pequeña frente mientras murmuro las palabras, no necesito revisar para saber que una marca ahora plasma su piel, la marca muestra que es una de nosotras, una marcada por la magia, se me rompe el corazón al saber que no puedo hacer nada mas por ella, creí que seriamos feliz, fui estúpida, una ira se enciende al mí, estará sola desde ahora, no queda ninguna de nosotras,  están muertas, la muerte también me alcanzara a mi en poco tiempo, antes de irme creo una barrera para que el agua no la moleste, solo durara hasta que yo desaparezca, pero confió que sea suficiente, debe serlo

Me alejo sintiendo cada paso como una tortura, mis brazos están vacíos, mi corazón roto, ella no tendrá a su madre para guiarla… no dejo de conjuran sus rasgos mientras doy un paso tras otro. Están cerca, tienes que correr, eso hice corrí hasta que el frio quemo mis mejillas

Me detengo cuando no queda mas camino que recorrer, frente a mi hay un acantilado que ruge con fuerza, aspiro aire escuchando los pasos acercarse, el rastro que me empeñe en dejar sirvió de algo después de todo

—¿Dónde esta Alatar? —Me tenso al oír su voz, esa que hace meses me juro promesas de amor, una vida llena de felicidad, ahora solo podía relacionarla con el que asesino a mis hermanas, que acabo con mi hogar, al que amé, me gire gallándolo con ojos ardientes y una mueca de desagrado, estaba dispuesto a matarme, bien no caería sin pelear

—Muerta—Casi grite, Wolfgang me apunta con su espada real—Somos animales, no amamos a nuestros hijos, era una molestia de la que había que deshacerse—No dejo que vean cuanto me mata esta mentira—Llegas un poco tarde, pero es tu problema no el mío

—¿Dónde esta mi hija, bruja? —Brama dando un paso más cerca de mi—Se que no le hiciste daño, ella necesita a su padre—Sus ojos dejan ver un rayo de miedo, eso es interesante

—¿Tu hija? —Me burle con crudeza—Nunca fuiste el único Wolfgang, no eras tan bueno de todos modos—Sus hombres sisean ante el insulto para con su señor, eso concéntrate en mi

—Perra—Murmura—Esta es la ultima vez que te lo pregunto Alatar, ¿Dónde. esta. mi. hija? —Abre las manos de manera conciliadora—Si me lo dices me asegurare de que tu muerte sea rápida

—Estoy segura que si comandante, pero le diré algo—Mis manos empiezan a sentir los hilos de la energía —No me iré sola—Desvió una flecha con trayectoria a mi corazón, pero otras dos llegan a la vez, una de ellas me da de lleno en el hombro, me tabaleo apretando los dientes por el punzante dolor —Muchos de ellos caerán—Murmuro como una promesa, los rayos empiezan a iluminar el cielo haciendo que un sonido retumbante llene el bosque—Los tuyos no merecen nada—Grito, la lluvia respalda mis palabras cayendo ahora como un diluvio, muchas de las flechas quedan suspendidas en el aire, un destello de la cara de Medea llega a mi mente avivando mi furia, la tierra tiembla, siento cada gota de magia corriendo por mis venas, me voy a romper, la magia tenia sus limitaciones y yo las estaba pasando todas por alto, de todas formas moriría, ese era mi destino, pero necesitaba acabar con tantos como pudiera, por ella, por su futuro



#207 en Fantasía
#29 en Magia

En el texto hay: secretos, aventura, magia

Editado: 04.07.2023

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.