La última hechicera

El Beso y la Llama ♡

La criatura de sombra se detuvo ante Alina, temblando… y luego, se deshizo como ceniza dispersa por el viento. No hubo batalla. Solo reconocimiento Kaelen, aún con la espada en la mano, observaba a Alina con asombro. La luz azul que la envolvía empezaba a apagarse, pero algo en ella había cambiado. Era más que una hechicera ahora. Era la heredera de un poder antiguo… y la portadora de esperanza.

—¿Estás bien? —preguntó Lyra con voz suave.

Alina asintió caminó hacia la fuente, donde la luz seguía girando como un corazón latente.

—Lo he visto todo mi madre, el juramento… el primer sello, lo que duerme bajo el mundo, soy parte de ello pero también soy algo más no tengo miedo.

Kaelen se acercó, lentamente con los ojos fijos en ella.—Alina… antes de que esto continúe, antes de que todo cambie… tengo que decirte algo.

Ella lo miró, sorprendida por la emoción en su voz.—¿Qué sucede?

Él guardó su espada, dio un paso más y tomó su mano.

—Te amo no por lo que eres, ni por tu poder. Te amo por tu coraje, por cómo luchas incluso cuando tienes miedo. Por cómo miras el mundo con esperanza… aun cuando todo parece perdido.

Alina lo miró fijamente. Sus ojos brillaban, no con magia… sino con algo más profundo.

—Yo también te amo —susurró.

Y sin más palabras, lo besó.

El beso fue suave, pero en él ardía una llama que no tenía nombre una promesa silenciosa, una verdad más fuerte que la oscuridad.

Y así, en el corazón del templo olvidado, bajo la mirada de estatuas que una vez custodiaron la magia del mundo… la última hechicera eligió no solo su destino, sino también a quien llevaría con me ella.

El futuro apenas comenzaba.♡




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.