La Venganza de la Rechazada ( Mate del alfa )

CAPITULO 2

Ajahahaha

 *

* * * * * * * * * * CAPITULO 2 * * * * * * * * * * * 

 

Ya había calmado mi semblante, no permitiría que Kiliam me viera débil o afectado. Fingiría no saber nada del asunto si me preguntasen algo.

Fije mi vista a la ventana mientras afinaba un pequeño instrumento que había llegado a mis manos

—Señorita, el Alpha vino a verla - Dijo Gracie mi asistente personal

Aunque se suponía que compartiríamos la habitación, jamás lo hicimos porque ambos ambos darlos el tiempo de conocernos, aunque eso nunca paso, y ahora me alegraba que nunca pasara. 

—Dile que pase— Respondí y la puerta se abrió

Aun no me atrevía a dirigirle la mirada, pero necesita ser lo mas normal posible. Respire cuanto pude, tranquilice de nuevo mi respiración; quería gritarle, pero ahora mismo solo bajaría mi estatus y sería más fácil para él traer a su amorío.. 

—Supe que estas mucho fuera de la mansión, ¿Acaso notaste algo raro afuera? - Fingí mi preocupación 

Cuide mis palabras para que no se note como si le estaba reclamando. Tal vez podría perdonarlo si me dijera a la cara la verdad._ Por la luna_ No iba a perdonarlo, solo quería ver su actuación. 

La maderas sonaron a medida que se acercaba, mi ambiente se hizo mas pesado y me contaba mantener mi boca cerrada "como buena señorita"

—Lo lamento “Luna”, estoy mucho afuera de la casa por algunos problemas— Dijo juntando mis manos con las suyas— Prometo que te lo compensaré

Ya estaba empezando a perder la cuenta, de cuantas veces había repetido la misma palabra: “Te lo compensare”. Me daba ganas de reírme en su cara. "Algunos problemas", si claro ya quisiera tener su tipo de problemas, pero como olvidar el día que me prohibió salir de la mansión a menos de una justificación. 

—¿Quieres que te traiga un regalo en mí regreso? —Preguntó— Estaré afuera un par de días -

Sabia en donde terminaría esta conversación, cada vez que le decía si podía al menos llevarme o decirme el lugar. Ya ni estaba de humor para pelear, no podía simplemente decir: "Me he cansado de tí y voy a ir a buscar otro amor"

—Solo quiero que vuelvas rápido a casa sin que nada malo te pase - Dije dándome la vuelta para irme a sentar, mientras asome una sonrisa

Él se retiro en silencio, y yo pase analizando el cielo toda la noche. Quería hablar de esto con alguien porque sintió que me carcomía, quería simplemente que alguien me escuchara. Si le contaba a Gracie sería buena idea, pero ella ya tenía mucho con sus problemas apenas y podía protegerla, si encontraban su comportamiento extraño y no hablaba la torturarían, eso no me lo perdonaría. 

Apenas cerré los ojos cuando escuché a las aves en mi ventana. Ya era de mañana y la luz alumbraba perfectamente toda la habitación. Pedí agua para lavarme la cara y asearme, después de mi baño decidí solo coger uno de los postres e ir al jardín.

En la tarde visitaría a mi prima, ya que desde que me había mudado al palacio no sabia nada de ella. Alisté postres y algunos regalos para ir a comer en su casa. Ella tan bien era de clase noble por lo cual me permitían irla a visitar.

Su casa estaba entre el bosque como la mayoría de los nobles, su terreno era grande y alojaba muchos plebeyos. Me excuse muy bien para salir del palacio, además nunca me había escapado y solo sería una pequeña visita. 

Seguía caminando en el bosque cuando vi varios soldados personales del Alpha, ¿Acaso mi esposo se detuvo por este lugar? 

—Luna— Todos sus sirvientes inclinaron sus rostros al pasar.

_Réstale importancia, quizás es coincidencia_ Decía en mi mente. Trataba de no pensar en lo que exactamente sabia que sucedería. Es que simplemente necesitaba una cachetada para decirme que era real, aunque estado asimilándolo toda la noche, aun no me había preguntado quien podría ser esa chica.

Mis manos tocaron la puerta, solo quería que él no estuviera en ese lugar, pero ¿Dónde más podría estar si sus guardias estaban aquí?   

—Luna— Inclino la cabeza la asistente de mi prima — La señorita Sofia no está en este momento

—¿Sabes en dónde está? - Pregunté y aunque no quise la voz salió con enfado

- Mi señora ella… —Se mordió el labio de nerviosismo, se podía escuchar su corazón acelerado y con miedo

—Entiendo, tal vez le dijo que era personal; por favor no le avises que vine—

Dicho eso me giré y advertí a los guardias que no dijeran ninguna sola palabra y me marché llevando todo lo que había traído, al igual que mi dignidad. Volví a casa con una sonrisa en los labios. Al menos estaba un paso delante de él. 

Kiliam cumplió su palabra y no regresó en dos días, contando el anterior. Sentir pena por mi misma jamás había estado en uno de mis planes. Estar decaída por un hombre menos, suficiente había tenido con mi padre, pero estar de esta forma no era algo que podía controlar, como esperan que sonrías en medio de su traición. 

Empecé a bajar las escaleras del segundo piso y me encontré con la amada sorpresa.

—Katy, ya estoy de vuelta — Dijo Kiliam

¿Solo Katy? ¿Ahora ya ni era “luna”?

Tranquilízate Katherine, todo estará bien_ Me dije a mi misma y suspiré para devolverle la sonrisa.

—Buenas tardes, primita— Dijo Sofía saliendo detrás de Kiliam

Trate de no enfocarme en ella, pero estaba haciendo el esfuerzo para que yo la notara

—Sofí, tiempo que no te veía — Mencioné con hipocresía - Parece que la edad no te ha quitado la voz de chica corriente




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.