La Verdad Detrás de La Mentira (editando)

Doctor Fuentes...

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...Las sirenas se escuchan a lo lejos, no siento mi cuerpo, el dolor físico es inexistente, pero el dolor de mi alma es más mortal que la vida misma, cómo puede la vida cambiar tan drásticamente, sin darte respiro alguno, deseo morir con todos mis fuerzas ya no hay nada que me ate a este mundo...

Estoy en el hospital con Fabian, ya que tuvo dos convulsiones seguidas, y como siempre tiene que hacerse muchos exámenes y análisis para ver como va progresando la enfermedad, es como sentarte a ver una película la cual no puedes evadir, ni detener, y te ves obligado a presenciar, es triste la verdad, cuando eso pasa no solo muere lentamente la persona enferma sino también todos a su alrededor.

Mi noche fue muy agotadora y dos años de estar viviendo entre hospitales me da cierto derecho a la cafetería de los médicos de piso, estoy por sorber de mi rico café cuando.

-¿Vienes llegando o ya terminas el turno?- me giro y ¿Que creen? pedazo de hombre el que tengo enfrente, como es que en dos años nunca lo he visto, alto, castaño, ojos verdes, músculos bien definido bien definido, me lo como.- holaa, creo que vas saliendo, te ves cansada- sip el cansancio ya me hace pensar en cosas para las que no estoy preparada- ¿Como te llamas?

-Kira- logró decir y esque con esa bata de doctor y el estetoscopio en su cuello no me dejan pensar en otra cosa que no sea saber si tiene una tableta de chocolate debajo de su camisa, con solo una lamida en ella bastaría para... - perdona ¿Que me decias?- sonrio, y si tenia una sonrisa deslumbrante.

-Te decía que me llamo adrian y te pregunte que de que area eres- por mi gesto de desconcierto adivino que por alguna razón no le había entendido a qué se refería- yo soy de oncología ¿Y tu?- y ahi lo entendi, y me rei, pero a él no pareció hacerle gracia.

-¿Crees que soy doctora o enfermera?- el se giro pero no habia nadie mas, con una afirmación de su cabeza supe que si- nada más lejos de la realidad, no trabajo acá -dije y luego bebí de mi delicioso cafe.

-Y… ¿Que haces aqui? si no trabajas aquí, no puedes estar en esta área, es solo para médico- permanecí en el mismo lugar, se estaba tornando muy grosero el chiquillo -tienes que salir- ok ya se estaba pasando.

-¿Que hago aqui? vine por un café, y ya me iba- para mi era tan obvio- ¿Sabes que trabajas en el hospital de niños? deberias de ser más amable- caminé hacia la salida.

-Tu no eres lo que se diga una niña, y aparte eres una arribista que se cuela a la cafetería- arribista eso si que no, yo iba a la cafetería por que el doctor encargado de ese piso me había dado permiso cuando mi hermano pasaba meses en ese hospital

-Yo que tu mejor me callaba, a no ser que quiera visitar al dentista, yo no soy ninguna arri… 

-Tan de mañana y ya estas peleando, que forma de empezar el dia kira, doctor Fuentes- saludo el doctor Carvajal, encargado de piso- ¿Como amaneció tu hermano?

-Mejor que ayer, aunque ya sabe de muy mal humor como siempre.

-Por lo que veo eso es de familia- comentó en impresentable doctor Fuentes- a todo esto ¿Que hace la familiar de un paciente en esta área?

-Tiene algún problema con ello?- el chico negó mientra soplaba el humo del café- si no hay ningún problema, no veo el motivo de su pregunta, los familiares de los doctores pueden estar en esta área, veala como mi familiar- juro que si no tuviera diecinueve años le sacaría la lengua al doctor Fuentes.

Mi hermano salió a las pocas semanas del hospital, esas convulsiones era solo un síntomas de la enfermedad a la vez un claro recordatorio que eso solo sería el principio, recuerdo la vez que me dijo con su vocecilla.

-Kira me voy a morir, los doctores no tienes un medicamento para mi- me partió el corazón el escuchar su afirmación, luego sonrió y siguió coloreando en el desayunador, pero yo ya no pude seguir pelando papas, el estaba conciente de su enfermedad y la asimilaba.

Los doctores recomendaron la neuropsicología, al menos dos veces por semana, ella le ayudaba con las habilidades motoras, para mi hermano las cosas no eran fáciles constantemente tenía que estar aprendiendo lo ya aprendido, luchando en contra de la enfermedad aun sabiendo que perdería, pero no se rendía.

***

En la universidad no tenía amigos, estudiaba sabatino diseño gráfico, me gustaba porque era creativo y podía ser independiente sin horarios fijos, trabajaba reforzando a los niños del barrio con las tareas, eso no daba mucho pero también tenía un trabajo los sábados y domingos por la noche en un bar donde podías ir a leer o simplemente ir a hablar siempre que consumes algo, los jueves había micrófono abierto para el que quería recitar algún poema, lo que ganaba era suficiente para no dejar la universidad, y aparte las propinas.

Era un viernes por la tarde, fui con Fabian al cine, me gustaba pasar todo el tiempo que podía con él, he ahí el punto por el cual no tenía amigos, mi hermano siempre era primero. ese dia habiamos visto Cars ya las habia visto todas pero le gustaba.

-Mira- señalo un sitio donde hacen tatuajes- cuando sea mas grande me haré un tatuaje.



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En el texto hay: misterio, sexo, romance y luto

Editado: 10.08.2019

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