Capítulo 4

- ‘‘Ya mi aventura comienza, yo necesito calmarme, recuerda que tengo el arma, todo saldrá bien. ’’. Aquello era lo que yo me mentalizaba para no estar con nervios.  

En ese mismo instante que yo me decía eso, escucho pasos viniendo de los pasillos, me asomo por las ventanillas de aquel duco de ventilación y eran los guardias buscándome. 

- ‘‘El prototipo 6001 se ha escapado. Le informamos a todos que se mantengan en sus habitaciones’’. Eso salía de los parlantes y yo temblaba del miedo. 

El pavor no debía dominarme, sin embargo, ya mi mente andaba en blanco. Los guardias desaparecieron pero ahora se encontraba mi mayor temor, mejor dicho el mayor miedo de todos que están en la nave… las máquinas usadas para la guerra espacial. Me habían dicho antes de venir acá que utilizaban eso con el fin de combatir, no en situaciones de escape.  
Yo lentamente me movía hacia la sala en donde se encontraban las naves para salir de esta pesadilla hasta que un perro guía ladró tan fuerte que las máquinas se dieron cuenta de una presencia en ese lugar. Ya no había tiempo para temer, yo corrí tan rápido que pude finalmente llegar a la nave. 

Ya afuera de aquella cárcel mi mente quedó en blanco, ahora yo me quedaba en medio del vacío sin poder realizar alguna acción, yo sentía que me iba a desmayar, no sé por qué la verdad, quizás mi miedo hizo que me sintiera de esta forma.  

Mi cuerpo lentamente se desvanecía, ya yo no estaba en esta realidad sino en otra, parecía de una época del pasado. Otra vez me encontré con aquel hombre con un rostro que hablando del visagismo era tipo diamante, sus ojos rasgados pero un poquito grandes y su sonrisa que cautivaba a cualquiera que lo mirase, yo estaba allí nuevamente con él pero en esta ocasión me dijo que nos reencontraríamos en la siguiente vida, él se veía que era de un cargo muy importante de la marina, como un capitán o general. Al parecer en esa vida murió porque yo lloraba desconsoladamente y pidiendo otra oportunidad, no importaba el país en el cual yo iba a nacer, no importaba el momento, yo solo quería volver a estar con él.  

Ya no sé lo que estoy viendo, si sigo en este estado entre la realidad y alucinar en poco tiempo yo dejaría de existir. Es cierto que siento poca energía pero necesito llegar a La Tierra para reencontrarme con mi hermano. Necesito por lo menos intentarlo esta vez, no importa cómo pero de que llegaré, lo haré.  

Poco a poco yo estaba llegando al planeta Tierra, pero en eso veo que le están disparando a la nave, si siguen haciendo esto perderé el oxígeno y mi cuerpo tardaría poco tiempo para tener anoxia por la falta de aquel vital oxígeno en las células. Que le disparen a los vidrios es súper peligroso porque los el aire saldría de los pulmones rápidamente.  

Ahora mi pregunta es por qué esta nave tiene los vidrios tan delicados, ¿no se suponía que era para usar en caso de un ataque? Está bien, las preguntas luego, falta poco para llegar a La Tierra. 

Estando en este planeta, puedo descansar en paz mientras tanto porque lo más seguro es que también me estén buscando aquí. Tengo que ir a un centro de llamadas rápidamente.  

- Ciudadanos, le informamos que un alien ha llegado a este planeta y se camufla como un ser humano, aquí está una foto de aquella criatura espantosa. Cuando me acerqué a un comercio para saber qué fecha y hora eran, anunciaron eso en plena televisión nacional.  

¿Ahora cómo voy a un centro de llamadas si todos piensan que soy un alien y llamarán a las autoridades? Las personas me miran raro, necesito cubrirme la cara. Estoy en un vertedero de basura, intentando buscar algo que me tape, creo que esta sábana me ayudará.  

Yo estaba caminando hacia un centro de llamadas pero el más cercano se encontraba a 20 cuadras, la otra opción era pedir un teléfono prestado ¿pero cómo lo hago si llamarán a los agentes especiales cuando me lleguen a ver? En eso veo a un hombre sentado en una plaza con un celular, intentaré acércame pero que no note mi rostro.  

- Hola, ¿por casualidad me puede regalar una llamada? 

- Disculpe pero ¿por qué no muestra su cara primero? 

- Si quiere, le doy el número de teléfono, es urgente, está en este papel. No puedo decir mucho, dile a mi hermano que ya me encuentro en la ciudad y necesito verlo antes que sea demasiado tarde. 

- ¿Se encuentra en peligro? Podemos ir a la policía. 

- La policía no hará nada. 

- Claro que sí, ellos son los que nos protegen. 

- Mienten, todos mienten. Ellos solo se encargan de defender las atrocidades de la agencia espacial. Si todos se enteraran de lo que hacen, nadie los apoyaría. Más bien están mintiendo al decir que un alien está en La Tierra. 

- ¿Cómo conoces tanto de la agencia espacial? 

- Soy el supuesto alien que buscan. No recuerdo mi nombre, yo era astronauta de la Agencia Espacial Internacional de la Costa Este. Me escapé ayer, ando deambulando. Ellos nos llaman como prototipo, yo soy el prototipo 6001. Me querían usar de experimento, a un compañero lo utilizaron como conejillo de indias y ya no se encuentra con nosotros.