(¡Pst! Tu voto en esta historia me es de gran ayuda ^_^)
Sí, sí... ya sé que no se llaman créditos. Pero bueno, me gustaba más así.
Quería agradecer aquí a todas las personas que me han ayudado a lograr terminar esta historia, entre ellas:
-A mi family (Primero la family), que además de darme su apoyo moral se encargaron de que no muera de hambre.
-Kalú, la maga del zodíaco, la cual me a ayudado con los dibujos, con promoción y con algunos nombres no solo para este libro, sino para toda la historia.
-Annie, la empresauria bannannie (De la escuela de escritores Mnemósine), la cual me a guiado tanto en la parte promocional como moral y empresaurial.
-Rin Rin Mapache y Dénixon de la muerte, los cuales también apoyaron moralmente y me aconsejaron a la hora de escribir ciertas partes importantes.
-A mis lectores (Otsea, obveo, los más guapos de todo el oeste), porque son ustedes los que hacen crecer esta historia. A pesar de que casi todos sean fantasmones, sé que están ahí y los aprecio muchísimo.
-Y, claro está, no puedo terminar estos agradecimientos sin nombrar a alguien tan esencial como el desgraciado que aparece arriba de este capítulo: Conequi (Puse una foto de cuando era joven, así no nos quita rating) . Sin él, probablemente ya hubiese caído en la locura y, quien sabe, quizás aún estaría revolcándome en el piso por corregir esta historia por cuarta vez.
Desde ya, muchas gracias a todos. No se olviden de votar en los capítulos del libro si les gustó. Ustedes saben que esos votos son muy preciados para mí, ya que son los que hacen crecer y reconocer a esta humilde historia que, obviamente, recién acaba de comenzar.
Próximo libro: "La verdad secreta: una vieja promesa"
¡A seguir!