La verdadera Naturaleza del Ser

Cuento

Mis padres siempre me enseñaron que debemos seguir nuestras descendencias, y estar siempre en el camino de Dios, si eres hombre conocer una mujer maravillosa, casarte tener hijos y sobre todo ir a misa cada domingo por la mañana. Si eres mujer conocer un hombre el cual debes seguir sus pasos, obedecer, tener hijos, ser una madre ejemplar; pero que pasaría ¿si no quiero seguir esa regla? ¿Si quiero ser alguien libre, tomar mis propias decisiones y no depender siempre de alguien?

 

Les resumiré mi vida en un breve cuento:

 

Era una niña de tan solo 7 años, vivía en un pequeño pueblo en Texas, mis padres siempre me enseñaron que Dios nos veía desde arriba y que nos iba a castigar si hacíamos algo malo, yo tenia una amiguita llamada Alice ella era totalmente diferente como me educaron mis padres, ella tenia 10 y siempre hacia lo que quería rompiendo las reglas, bailar, llegar tarde a casa, ponerse ropa de moda y a veces no iba a estudiar, nuestra amistad aunque éramos totalmente diferentes, siempre estaba ahí para mí, mis padres siempre me decían que me alejara de ella porque Dios en algún momento me iba a castigar, temí por sus palabras y poco a poco me alejaba de su presencia, al principio admito que su compañía me hacia falta pero con el tiempo me acostumbre a estar nuevamente sola, cuando cumplí los 18 empecé a estudiar en una escuela pequeña en Texas me mantenía rodeada de chicas que de chicos, un pequeño pueblo que con un susurro todos los habitantes sabían de tu vida en un solo segundo.

 

Pasaron los meses y llegaba el festival más importante de Texas, en la escuela todo era un cao; estudiantes preparando carteles y comida, pero la persona que mas me importaba venia donde mí, ¿se acuerdan de Alice? Luego de varios años me volvió a contactar y me dijo que se iba a volver a mudar a Texas ya que su padre había recuperado aquel negocio, y estaríamos en el mismo instituto, era alta, piel morena, cabello largo negro, y un hermoso rostro angelical así es… ¡Alice me gustaba!  Era un secreto que iba a morir conmigo; no quería que Dios me castigara o que al otro día amaneciera muerta porque Dios me estaba vigilando desde arriba, decidí cerrar mi casillero e ignorar aquellos pensamientos y solamente ser su mejor amiga, mientras caminábamos en el pasillo me contaba sus viajes, sus novios fracasados, y como su padre se había recuperado de la economía las clases en Texas eran aburridas, escuchar al profesor, tomar nota y pensar  que tu vida era un fracaso; y que el profesor Mike quien dictaba la clase era el único guapo que los demás profesores, todas las estudiantes morían por él, pero yo Moria por ella… por  mi Alice, estaba decidida en decirle mis sentimientos el día del festival; y luego mudarme a otra ciudad y desaparecer de su vida, a continuación las calles estaban llena de festividad, gente alegre y las tiendas tenían un buen surtido de objetos que se vendería ese día. Al llegar a mi casa, saludo a mis padres con un abrazo cariñoso y entro a mi habitación para pensar en como seria mi plan de conquista, y que no se desmayara en plena confesión o…. solamente pidiendo a Dios de por vida que me perdonara por no fijarme en un hombre guapo, e inteligente como era el profesor Mike; llame Alice para hacer la tarea que nunca hacíamos, una vez que nos reuníamos siempre veíamos películas en su casa o solamente hablar de…chicos

Llegada las 3 de la tarde, estaba tocando el timbre de su casa llevaba unos jean y una camisa granjera que se me veía al descubierto los hombros, ella sale de su casa con una sonrisa besando ambas mejillas, entro a su casa con una sonrisa amplia observando aquella sala rustica y su piso de madera, tomo asiento en el sofá mientras me ofrece jugo y yo asiento con la cabeza, aquí recordé lo que me decía mi padre: “ cuando estas enamorada de un chico solamente hazle caso y vivirás feliz a su lado” en este caso no era el, si no ella, pero esas palabras fueron como un viento al tomar aquella limonada pensando como seria su reacción al descubrir la verdad, toda la tarde pasamos viendo películas del viejo oeste en su viejo sofá comiendo palomitas en vez en cuando ella reía; que hacía resonar toda la habitación amaba su risa y junto a ella reía como una niña feliz era el momento más hermoso que tenía con ella.

Pasaron la tarde y me despedí de ella con  un pausado y corto beso en su mejilla para que supiera que ella me interesaba y mucho, el trascurso de la semana se acercaba el festival y mi casa era un total caos, mis padres de alguna razón discutían porque llegaban un familiar de Oxford pero se habían mudado en un hotel en Texas hace meses al parecer eran familiar de mi padre, ya que mi madre le irritaban que le sacara el tema, sentada en el sofá escribiendo en mi portátil aquella tarea vaga mientras los días pasaban y pasaban llego el día del festival ¡estaba lista! Estaba prevenida, estaba pensando como me iba a rechazar, pensaba en el litro de helado que tenia en aquella nevera esperando por mi mientras veía una película triste llorando en mi habitación.

 

El festival empezó a las 6 pm las calles estaban iluminadas por hermosas farolas y cinta de luces que, hacia juego con aquella carpa roja con blanca, llame muy temprano a su celular, pero no contestaba las llamadas, mis padres se habían ido a recoger a mis tíos en el hotel, que quedaba en el centro de la ciudad, y conocer al fin mis primos, pero lo importante ahora ¿Dónde estaba Alice?  Después de timbrar varias veces le mande un mensaje de voz:
“ Alice necesito verte, hay algo importante que tengo que decirte y te lo diré en el festival nos encontramos a las 10 pm en la parte de atrás del viejo árbol.” Una vez finalizada la llamada, recojo mi mochila y decidida iba a declararle mi amor a mi bella chica, mis padres llegaron y junto a ello un leve grito masculino: ¡Rachel baja a la sala, te tengo que presentar a tus primos! Me miro por ultima vez en el espejo dándome el ultimo retoque y me acomodo mi cabello en una coleta, suspiro leve y baja las escaleras rápidamente, pero al encontrarme de frente con ellos supe que Dios me había castigado



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En el texto hay: lgbti, primer amor

Editado: 09.11.2020

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