CAPITULO 4 (El futuro planeado, pero jamás soñado. El milagro de mi vida)

1er sub. cap. “¿Cómo me imagine mi ayer?

–Bueno, ¿y cuando empezamos la prueba en personas? Digo ósea, se tendrá un poco de problema al tener que buscarlas–.

(La persona le responde muy respetuoso).

Claro, pero eso es lo de menos, le queremos agradecer primero por confiar en nosotros, ahora conforme respecta a esta semana le vengo a decir e informar que varios científicos de los alrededores de la ciudad lo andan buscando, empezaremos principalmente con eso, le quieren hacer una que otra pregunta, obvio respecto a como logro este a avance y que fue lo que hizo.

(En ese preciso santiamén fue cuando el chico sintió la verdadera adrenalina correr por cualquier parte del cuerpo, incluso en aquellas que jamás se habían topado. Claro sería un error decir que solo lo soñó y ya está. Pronto vera en joven que fue mala idea, mejor debió seguir siendo un estudiante, aunque sueno lo más aburrido, no querrán ser como él, ¿Por qué no? la respuesta es muy predecible, pero quédense a ver y reflexionar).

–¡Sigo algo confundido! ¿Me dice que puedo liberarme de mis padres, del dolor, de las reglas, de las leyes, de obedecer, de parecer un robot, por fin tener respeto entre las grandes sociedades y que no piensen que solo soy un adolescente con un futuro normal o debajo de un puente? –.

(Vaya, que apresurado esta, pero los planes apenas inician, y su agente solo responde con un “¿Cómo? A que se refiere con liberarse de sus padres”. El cual nuestro héroe responde con…)

–Perdón, estoy tan emocionado como confundido, dice que vendrá para acá, ¿cierto? –.

En realidad, ya estamos en el fraccionamiento principal, solo paramos por combustible, en unos minutos llegamos, solo le pido que empiece a juntar sus cosas.

–Gracias, era lo único que quería escuchar, en realidad es lo único que he querido escuchar en cinco años–.

(¿Acaso será el milagro majestuoso de Dios, o una trampa tentadora mortal del mal? Cual quiera que sea, su oportunidad de volverse una leyenda susurrada al oído por millones de personas se haría realidad).

–¡Esto es genial! Por fin saldré de esta prisión de puras reglas sin sentido y tratos como si fueras su mayordomo persona. Esto sin ver tanto en el futuro la gente por fin me dará el debido respeto, es más, se hincará ante mi al verme, todos suplicando perdón por sus pecados, y aquellos que me hicieron como basura estarán arrepentidos llorando de sangre por una segunda oportunidad. Tal vez me excedí, por el momento no soy nada, tengo que seguir obedeciendo tontas órdenes. ¡Esperen, saben que! No tengo por que seguir haciéndolo, ya no. Dentro de poco empezara un nuevo ciclo, y quiero que este último se cierre como yo desee. El estudio lo veía como una forma simple de la vida, pero ahora con lo que paso con la nueva normalidad es un total asco. Ya nada ni nadie me dirá que no nunca más, seré yo el que diga “no”, comienza la etapa del paraíso–.

(Este… no creerán que el chico habla en serio, porque yo sí creo, es capaz de lo que sea por tan solo tener lo que siempre a querido, siempre y cuando no sobrepase los límites, en un par de segundos verán el comienzo de un fin principal o un principio sin final).

*¡Oye hijo, ¿qué haces ahí sentado?, póngase a estudiar porque lo necesito para el quehacer de la casa. Luego de eso y de las clases de tiene que ir a trabajar, no creas que la vida es así de fácil*.

–Sabes que papá, no siempre la vida es como tu la vez, no por que te hallan pasado cosas malas y dolorosas significa que será la misma suerte con quien te topes en tu camino–.

*No sé de qué hablas, pero ya te di una orden*.

–Siempre das ordenes, pero yo digo que ya es hora de dejar de seguirlas, ¿porque siempre todos los días lo mismo? –.

*No discutiré eso, ya sabes lo que tienes que hacer, mejor ponte a hacerlo, si quieres tener tu propia vida solo, pues empiézale a buscar como, por que con esa actitud será hasta los cuarenta años*.

–No lo sé, puede ser tarde o temprano, mas temprano que tarde, y cuando pase sentirás un dolor y una confusión masiva jamás conocida en tu vida–.

*No, no lo creo, ¿cómo le vas hacer para lograr ese objetivo tan difícil si ni ordenes quieres acatar? Aquel maravilloso día en el que sueña no te va a llegar en esta semana ni en ninguna otra, no mientras mantengas esas actitud tan pésima y crédula*.

(Pues sí, esa semana llego, y la hora al chico le toco. Cada minuto de espera para nuestro héroe eran milenios de siglos, no lo culpo. De tanta la emoción que sentía el chico no pensaba si esto se trataba de una broma o trampa de algún tipo malvado).

–Al fin Dios hace justicia y equidad sobre mí, lo ciento por decirlo, pero lo merezco por todo este tiempo siendo un prisionero de la infelicidad, pionero de la ansiedad en la actualidad–.

(En seguida su padre le habla)

*Oye hijo, ven, queremos hablar de eso que dijiste de que alguien se iba a sabe donde tarde o temprano. ¿Cómo esta eso? Eso fue en sentido figurado cierto*.

–¡No, que diga si!¡Bueno ya no lo sé! Lo que te trato de decir es que ya no quiero ser tu robot que tiene que hacer todo lo que tu digas solo porque lo dices–.

*Te lo digo una y otra vez hijo, tu misión en esta vida, solo tu lo sabes, pero dime, ¿acaso ya lo sabes? Mientras lo descubres, tienes que estar aquí, en mi casa donde el que paga todo pone las reglas, es totalmente justo e igualitario*.

–Quieres decir, ¿qué me podre ir en cuanto tenga la oportunidad y el dinero suficiente? –.