6. Rojo

“No juegues con T, perderás, pero quizás no”.

No entiendo nada de lo que significan esas palabras como tampoco entiendo lo que me dijo aquel señor y que supiera mi nombre y ¿porque me dijo esas cosas a mí?

Aun me cuesta un poco aceptar que esa chica se suicidó, no es que fuera imposible, pero si es un poco extraño que la viera dos veces y en las dos fueran dos personalidades distintas y el aspecto que tenía aquel día en el callejón.

Debo seguir con lo planeado a pesar de que todo sea tan extraño para mi debe seguir todo en marcha.

- ¡Ayúdame! ¡Ayúdame!-.

De nuevo esa voz en mis sueños, de nuevo debo dormir poco ante la molestia de escucharla, escucho perfectamente el sonido que hacen al caer las gotas del fregadero de la cocina, el silencio es sepulcral y empiezo a ver más amplio el techo sobre mi cama de tanto tiempo que llevo solo mirando a la nada, hasta que un leve escalofrió recorre mi cuerpo levanto la cabeza y puedo ver perfectamente como una densa niebla comienza a cubrir mi cuarto lo cual es imposible dado el hecho de que hace un momento estaba todo normal, un fuerte dolor en mi cabeza, y la niebla más y más espesa hasta el punto de llegar a mis rodillas, “no le temes a la muerte Adriel”.

Esa voz, es la voz de aquel hombre, miro la niebla mi cuarto casi por completo cubierta de ella, de nuevo ese escalofrió seguido de un fuerte dolor en mi cabeza que hace que agache la cabeza un segundo y cuando vuelvo a alzarla veo borroso a alguien en la puerta de mi cuarto, era ese hombre, no veo sus ojos solo una amplia sonrisa en su rostro y caigo al frio suelo.

Escucho cientos de voces seguidas de lamentos y gritos terribles, una voz dulce entre todas me logra despertar.

Estoy algo mareado y aturdido, me pongo de pie lentamente mientras aun siento ese escalofrió en mi piel, pensé que todo Fue un sueño hasta que vi que no era mi cuarto y la ropa que llevo puesta no es mía ¿Dónde estoy?, el lugar es amplio y de un tono gris bastante extravagante por lo que veo pero completamente vacío excepto por una silla, no entiendo nada, si es un sueño debe ser el más real que haya tenido pero estoy seguro que no lo es, la salida está completamente cerrada, imposible por ahí y en medio de ese lugar tan amplio logro ver unas escaleras, no sé qué tan buena idea sea subir pero no pienso quedarme acá, dudo que esto sea un secuestro, fue lo primero en lo que pensé pero seamos honestos salvo que sean contrabandistas de órganos no tengo valor alguno así que perdieron su tiempo y si se equivocaron de sujeto se llevaran un gran grito de sus Jefes pero dudo que sea eso, también podría ser algún tipo de juego macabro como en las películas, de esos que están todos encerrados y deben cumplir ciertos acertijos en un tiempo límite o alguien morirá y quizás si subo por la escalera encontrare a los demás participantes, pero eso tampoco encaja mucho, no veo más opciones y el tiempo avanza, solo lo hare y ya, algo debo encontrar o alguien que me explique que carajos hago aquí y sobre todo como hicieron eso de la niebla en mi apartamento y porque me siguió ese hombre.

No logro ver luz mientras subo cada escalón y siento que ya subí más de 8 pisos, solo me sujeto de una baranda que rodea las escaleras se siente eterno esto Hasta que después de mucho logro ver una puerta a la distancia y acelero el paso, confiando que no esté cerrada trato de abrirla, pero parece tener llave, empujo y empujo y solo se mueve un poco, doy un empujón y resbalo con un escalón, sujeto la baranda mientras miro hacia abajo y solo veo oscuridad ¿Cuántos pisos subí? Y como por arte de magia sentí como la puerta se abrió sin el menor esfuerzo y olvidando que solo hace segundos casi caigo por tratar de abrirla.

La empuje y no podía creer nada de lo que estaba frente a mis ojos, di dos pasos para salir de aquella oscuridad y poder confirmar lo que veía en esa gran altura en la que yo estaba sobre aquel rascacielos, estoy seguro que jamás vi un lugar así y jamás vi un cielo tan rojo como el que veía en estos momentos ¿Dónde estoy? .