MADEINHELL,PT2

Todos saben que fui creado en el infierno, en el infierno del infierno y para el infierno. A veces me encanta la agonía que siento cuando llegan los momentos de dolor; los disfruto tanto como quien disfruta un buen café por la mañana.

Aparentemente bien por fuera, pero realmente jodido por dentro: en mi alma reina el odio y en mi corazón, el suicidio. Si vivir en este infierno te parece lindo, pues ven, te invito a que camines junto a mí.

Puedo pretender estar bien, pero también puedo pretender estar mal. Mi percepción se pierde cuando los días de oscuridad empiezan a acariciarme, y a veces son tan agobiantes que me hacen llorar; otras, tan placenteros que los contemplo con ojos de amor.

En el infierno cálido fue creada una parte de mí, en esos lugares donde el sol es insoportable para muchos, pero no saben cuánto lo disfruto yo. Quizás por eso me gusta el calor, esos días en que es sofocante, porque para mí son un paraíso donde quiero quedarme.

La otra parte de mí fue creada en un infierno donde el frío y las fuertes tormentas azotan las viviendas. Tal vez por eso también me gusta estar bajo la lluvia, viendo cómo la vida de todos se derrumba al paso de las pequeñas gotas que nacen de las nubes oscuras.

En el infierno fui creado, un infierno donde el clima es inestable, donde el sol azota al mediodía y la lluvia nos atrapa por las tardes. Pero tú no sabes cómo disfruto el caos del clima de mi infierno, porque cada cambio es un momento en el que puedo vivir de la mano de la señora inspiración.

Con todo el amor en mis manos corro hacia la cima de una montaña para entregárselo al mundo, a ver si así podemos cambiar de actitud, dejar la arrogancia y empezar a perdonar, para que el sufrimiento se transforme en felicidad, para que el infierno de cada uno de nosotros se vuelva un campo verde lleno de vida silvestre.

Con todo el odio en mi corazón golpeo la tierra con tanto furor que no podrías entender por qué lo hago. Corto una parte de mi alma y la uno con otra parte de mi corazón, arrancada de mi pecho. Los sepulto en esta vasta tierra para que sean purificados y nazca algo bueno de mí.

Yo fui creado en el infierno, un infierno lleno de violencia y malos tratos, un infierno de palabras que cada día me hacían caer más profundo en el abismo… un abismo que, con el tiempo, llegué a apreciar, y de ahí nace mi amor por la oscuridad, esa oscuridad donde me siento más seguro que en la luz donde habitan los demás.

Y si sigo viviendo en el infierno, es porque ahí fui creado, porque ahí viviré toda mi vida, y el infierno será la tumba donde sepulten todo lo bueno y malo que fui.