Labios Sangrientos

Capítulo 22

​La travesía por mar duró dos tensos días, culminando con la llegada a la capital del Reino del Sol: Veridian.

​Desde la cubierta del Barco del Sol, Elara vio una ciudad que era el polo opuesto de Áuryn. Donde la capital del Ritual era de basalto oscuro y agujas góticas, Veridian era una vasta extensión de arquitectura greco-romana, construida con mármol blanco y piedra caliza. Todo brillaba bajo el sol del mediodía, pulcro, ordenado y, para Elara, extrañamente frío. Era la Ciudad de Mármol.

​"Aquí la magia es visible, Elara," susurró Kael, apoyándose en la barandilla, todavía débil. "El drenaje está prohibido. Su magia es la Transferencia Voluntaria en todos sus aspectos: energía solar canalizada a través de cristales y runas para el bienestar público. Pero no confundas la luz con la verdad."

​Kael se veía más pequeña bajo la luz brillante de su propia ciudad. El peso de la Runa de Seguimiento y el agotamiento de su magia la hacían parecer frágil.

​Fueron recibidas por una delegación de la Guardia del Sol, impecablemente uniformada, y por el primo de Kael, el Comandante Varen, un hombre de rasgos duros y ojos fríos que contrastaban con la calidez superficial de la ciudad.

​Varen miró a Kael, y luego a Elara, cuyo poder purificado ya no podía ser ocultado por completo.

​"Kaelen," su tono era de reproche. "Regresas al filo de la deshonra. Tu misión era obtener el Códice y asegurar a la Consagrada como un símbolo. Regresas sin el Códice, y visiblemente exhausta. ¿Qué sucedió con el Protocolo del Rescate?"

​"El Protocolo cambió, Comandante," respondió Kael con voz firme, aunque apenas audible. "La Alta Sacerdotisa Lyra intentó un ataque final. Destruí su arma, pero no sin un costo."

​Varen dirigió una mirada helada a Elara. "Y ella... ¿es la clave que prometiste? ¿O es una fugitiva de Áuryn con la magia de su enemigo en las venas?"

​Elara dio un paso adelante. No iba a dejar que Kael cargara con todo el peso político.

​"La magia que tengo no es de ningún enemigo," dijo Elara, alzando la mano y dejando que el Halo Dorado de su poder purificado brillara intensamente bajo el sol. "Es la prueba viviente de que la Transferencia Voluntaria es más fuerte que el drenaje, Comandante. Lyra ha sido neutralizada y el Cristal Central de Áuryn está en caos. He venido a ofrecer una paz basada en la verdad, no una guerra basada en la mentira."

​El impacto del poder purificado de Elara, visible en la Ciudad de Mármol, hizo que varios soldados retrocedieran.

​Varen se recuperó rápidamente. "Impresionante. Pero la política no se decide por una demostración de poder en el puerto. El Consejo del Sol te verá mañana, Consagrada. Tu valor se decidirá en la sala de audiencias. Kaelen, se te asignará alojamiento y serás interrogada. Tu madre, la Alta Comandante, te espera."

​Elara sintió un escalofrío. El encarcelamiento no había terminado; solo había cambiado de forma. Kael fue separada de ella, bajo el pretexto del protocolo.

​Mientras los guardias se llevaban a Kael, sus ojos se encontraron por última vez. En esa mirada silenciosa, Elara leyó la misma orden que le había dado Kael en la oscuridad de la cueva: Juega el juego, Elara. Sobrevive. Yo encontraré la manera.



#1310 en Fantasía
#201 en Magia

En el texto hay: fantasia épica, romantasy

Editado: 03.10.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.