Lalo Mateus

CAPITULO 6

Han pasado 7 días después de lo sucedido, he ido a la cafetería a comer y por supuesto a verla, ahora ni nos saludamos y me molesta mucho ya que veo a los demás jóvenes molestarla o coquetearle, esta noche iré nuevamente a verla, sé que dije que me alejaría pero eso es algo imposible, no quiero que otro chico se le acerque o la bese.

Llego a la cafetería y todos mis amigos están afuera esperándome con sus novias, veo a Isabel la cual me coge de gancho y entramos. Busco ese cabello naranja llamativo, inmediatamente la localizo, nuestras miradas se encuentran pero como siempre me quita la mirada, quiero castigarla por eso como se le ocurre ignorarme. Hoy esta vestida de conejita y esta ropa le queda pegada al cuerpo, por lo visto Peter ya se acostumbró al trabajo de Milagros.

Nos sentamos en una mesa, estoy tratando de quitarme a Isabel de encima pero es peor ahora se sentó en mis piernas, veo a Milagros pero ya no me mira, se acerca a nuestra mesa a anotar lo que vamos a pedir. Empiezan los chicos a pedir cuando llega a Isabel dice que no quiere zanahoria y se que lo dice por su cabello a lo que Mateo le contesta que al menos ella si tiene un buen cuerpo y culo algo que ella no tiene, todos hicieron bulla por el comentario de Mateo, Isabel se molestó mucho y solo pidió un licuado.

Al rato llega con nuestro pedido, le entrega el licuado a Isabel pero esta le dice que no quiere de fresa sino que de mora, Milagros no le dice nada esta por irse cuando Isabel le hace la traba a lo que Milagros casi se cae pero un muchacho la alcanza a coger de la cintura y la pega el. Me molesta mucho eso, quien es ese man para tocarla veo que le dice algo y ella le responde pero inmediatamente se aleja de él, ja esa es mi chica.

La veo irse y cambiar el licuado pero ahora es la compañera quien lo trae, Isabel ya no dice más nada y lo recibe, mis amigos hacen bromas pero no les pongo cuidado porque no dejo de mirar a Milagros y que ese chico la mira mucho no deja de mirarla y siento que la sangre me hierve. Él se le acerca a Milagros y le da algo exactamente no es lo de la cuenta ella le sonríe y lo coge, estoy por unírmeles cuando veo a mi padre y hermana entrar.

Me les acerco y los saludo, veo como Peter mira a Milagros y no le molesta que un chico le este tirando el ala pero a mi me molesta demasiado, me despido de ellos y vuelvo con mis amigos más molesto que antes, no puedo evitar disimular mi malgenio, lo bueno que llego mi padre es que Isabel se quitó de mis piernas y se sentó a mi lado. Termino de comer y salimos con mis amigos a una fiesta  llego y lo único que hago es tomar ni siquiera le pongo cuidad a Isabel, la cual ya prácticamente se me está desnudando y yo no le pongo ni cinco de cuidado.

Son las 1 am y lo más seguro es que Milagros ya esté en su departamento, así que decido dejar la fiesta e ir a buscar a Milagros, manejo hasta allá estoy por bajarme del auto cuando veo a Milagros parada hablando con él mismo muchacho de esta, por lo que veo ella está en pijama y se ve sexy aun con su sudadera, enciendo el auto y paso por el lado de ellos, nuestras miradas se encuentran pero yo sigo manejando el carro.

Llego a mi casa y le pego a la pared, pensé que ella era distinta a las demás  pero por lo veo es igual, como es posible que yo le creí distinta, de solo imaginármela en brazos de otra o que otro la besara me estresa, decido recostarme en la cama pero no consigo descansar.

Hoy es viernes, por lo que se hoy no trabaja Milagros así que comerá está noche con Peter, salgo a recoger a Isabel que iremos todos a discoteca, en el camino veo a una chica de cabello naranja trotar, con esa ropa se ve linda, tiene un short y como un caso ombliguero gris. Paso por el lado de ella, tiene unos audífonos puestos me ve pero sigue trotando, acelero un poco el carro hasta alcanzarla, pero ella  entra al parque así que me bajo y la sigo, la ventaja mía de ser alto es que la alcanzo rápido.  La acorralo contra un árbol me empuja, y tira de mi pero no me retiro ya que quiero encararla o al menos robarle otro beso.

Me va a decir algo cuando junto mis labios con los de ella, se sienten tan suaves y como siempre ella me corresponde al beso, bajo a su cuello y en la parte de atrás del cuello le hago un chupón, la escucho gemir, apenas me separo de ella me le acercó al oído y le digo que nos veremos en estos días, me alejo del lugar y la dejo atontada, me subo al auto feliz y victorioso, llego a la casa de Isabel y solo han llegado tres personas, me siento en el sofá recordando el beso que le robe y por inercia me rio, “estas sonriendo por mi”, me dice Isabel de

cido ignorarla y me concentro en el celular. Me aburro de la espera así que decido dar una vuelta en el carro y como siempre se me pega Isabel.

 

Manejo sin rumbo mientras escucho a Isabel hablar de la fiesta que harán esta noche antes de iniciar el curso, estamos pasando por la cafetería y veo a Milagros hablar con el chico de antes, pero que será para ella, decido aparcar el carro y dirigirme a la cafetería, tomo de la cintura a Isabel y la pego a mí llegamos a donde están ellos.

 - Hola Milagros

 - Hola Lalo

 - ¿Cómo estas?

 - Bien y tu

 - Bien pero no tan bien como tu

 - Si como digas

 - Mira te presento a Isabel.

 - Encanta



#28172 en Novela romántica
#6640 en Joven Adulto

En el texto hay: amor, sueos, descepcion

Editado: 13.12.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.