Las 3 Guitarras

19 Últimos Días en el Seminario.

Durante esos días Will hablo conmigo para que organizara el coro de una misa especial; el Hermano Will tendría una misa especial ya que iba a realizar algo que se llama “profesión perpetua o votos perpetuos” en la cual el Hermano que la realice, de alguna forma da el “si” definitivo a su vida como religioso, ya que antes de… aún pueden decir que no y retirarse de la congregación. Will me dijo que en poco menos de un mes seria su profesión perpetua y quería que yo organizara y dirigiera el coro de esa celebración, yo acepte el compromiso con gusto y le prometí el mejor coro que pudiera hacer.

Para esto comencé a buscar cuales serían los cantos que tocaríamos, y empecé a ver con cuantas personas contaba para esto; Will me dijo que podía invitar a compañeros de la preparatoria. Una vez que tome en cuenta a todos los seminaristas que sabían algo de música o tocar algún instrumento me di cuenta de que éramos menos de lo que esperaba, no éramos tan pocos, eran unos 7 u 8 seminaristas que tocarían en él coro, entonces fui a buscar ayuda en la preparatoria; recuerdo que hable con Bruno y otro amigo llamado Jassiel para que me ayudaran con más guitarras; hable con un amigo de mi grupo que sabía tocar violín, el mismo que me había ayudado hace tiempo con el villancico; también hable con una amiga de primer año llamada Amelia, yo ya había tocado en algunas ocasiones con ella, como por ejemplo la vez que fue la inauguración de la copa deportiva en octubre; hable con Mayra para que también me ayudara cantando, pero cuando le dije que día era la profesión Perpetua me dijo que no podría asistir ya que estaría algo ocupada; uno de los que iban a tocar me dijo que ya había hablado e invitado a Melody a cantar y me pregunto que si no habría problema, le conteste que no había ningún problema, me pareció buena idea que Melody nos ayudara; otro amigo hablo con una chica de primer año que también cantaba, no muy bien a mi parecer pero ella al mostrar gran interés por participar la acepte sin ninguna molestia; una vez que revise la lista de todos los que conformaríamos el coro, teníamos lo siguiente (incluido yo):

  • 2 guitarras eléctricas
  • 5 guitarras acústicas
  • Batería
  • Mandolina
  • 2 violines
  • 5 coristas (aproximadamente y sin contar a los que además de tocar algún instrumento cantaban al mismo tiempo)

Con el pasar de los días ambos Violines fueron descartados, ya que Amelia me dijo que no podría asistir ese día, ya que saldría de la ciudad con su familia durante esos días y en cuanto al otro violinista, este jamás se presentó a los ensayos y lo termine sacando. Los ensayos los comencé a organizar para cuando terminasen las clases y empezaran los exámenes finales, al medio día.

También el seminario cumplía 75 años de estar en el pueblo y se haría un gran evento en el que incluso se haría un recorrido por las calles del lugar.

Volví a ir a ver a Dora un domingo y recuerdo que nos quedamos un buen rato platicando, su primo quien era mi profesor de artes también estaba ese día ahí pero solo me saludo y se fue a otra habitación, Dora y yo nos quedamos sentados en el recibidor, Dora me regaño un poco, esa vez debido a que le explique que para que no me descubrieran, yo brincaba las rejas de la preparatoria para poder entrar, entendí muy bien el regaño ya que fui consiente a lo que me arriesgaba cada que pasaba esto y entendí mi error… a lo estúpido, ya que esa ocasión volvimos a “clavarnos” en la conversación y terminaron pasando otras dos horas, de nuevo no queria irme de ahí, aunque eso fue muy estúpido de mi parte; ese día fue la última vez que Dora y yo nos besamos; después de estar mucho tiempo ahí con ella nos despedimos y volví a correr al seminario, cuando llegue volví a brincar las rejas de la preparatoria pero esta vez había llegado más tarde que nunca, todos me estaban buscando, todos con sus instrumentos y ya trajeados estaban saliendo a la misa parroquial en la que tocábamos todos los domingos, yo apenas estaba llegando completamente despeinado, casi sudando por correr desde casa de Dora hasta el seminario sin arreglarme, en ese momento pensé:

Ahora si la “rege”… ya todos se están yendo… Will y los Padres me están buscando… ¿qué voy a hacer?...

Fui corriendo a los dormitorios y me cambie lo más rápido que pude, fui a los baños y moje por completo mi cabeza de manera que pareciera que me había bañado, salí corriendo al cuarto de música por mi guitarra y cuando el Padre Marcos me vio dijo:

Alex… ¿en dónde estabas?, el hermano Will y yo te estuvimos buscando por todas partes

Discúlpeme Padre… me bañe y se me hizo algo tarde…




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