Las Brujas también desean un final feliz

Capítulo 9 - Annabeth

Una vez en el cuarto de lavado me metí en la gran tina con agua caliente junto con Crow. El agua ya está algo fría, es porque hemos demorado en llegar, pero eso lo soluciono yo en un periquete.

Annabeth: -Quema, quema, más no hiervas.

Magia de palabras o Encantamientos, es mi favorito. Es una magia que usa las palabras para manipular con un mayor porcentaje de precisión la energía de la naturaleza y del núcleo mágico.

Annabeth: -Estamos metidos en un GRAN problema...

Le digo a mi despreocupado niño que juguetea contento en la bañera. Al menos, su fiebre no es muy alta, que un niño de su edad tenga fiebre podría ser mortal en un lugar tan gélido como este. Lo mantendré vigilado y calentito tanto como pueda. Por ahora su fiebre es el menor de nuestros predicamentos, este maldito Sello es el VERDADERO problema.

No sé quién es el dueño de este sello, ni quién lo conjuro, ni qué deseo se pidió y cuánto falta para que se realice.

No sé cuánto tiempo me queda para salvar la vida de este niño.

Los Sellos para Invocar Demonios pueden variar ligeramente según el tipo de magia, conocimientos o cultura del invocador, entre muchos otros detalles. Y cuando se firma un Contrato con el Demonio invocado, el Demonio pondrá su nombre sobre el Sello de Invocación y lo estampará en el cuerpo del invocador, como prueba de que el alma del invocador le pertenece. Eso es lo que usualmente los Demonios hacen. Pero sé, por Raven, que los Sellos Demoniacos pueden variar de apariencia según el “humor” y el poder del Demonio invocado en cuestión. Incluso algunos poderosos Demonios no dejan marcas en la piel, pero si en el alma.

Entre más alto el Rango del Demonio más inusual su Sello Demoniaco.

Raven me advirtió... que los Demonios que están en la cima del Infierno son tan temibles que podrían destruir el mundo con solo soñarlo o pisarlo.

Me da miedo de solo pensarlo.

Sí, soy una cobarde… lo soy.

Menos mal que el Sello de Crow no es tan “especial”.

Su Sello Demoniaco tiene una apariencia estándar como la mía: la estrella en el pentagrama dentro de un círculo; eso significa que el nombre y datos del Demonio fueron superpuestos sobre el sello de invocación. Aunque debo de admitir que su Sello Demoniaco… es más vistoso que él mío.

El Sello Demoniaco de Crow posee más símbolos que mi Sello Demoniaco, y parece más elaborado… Además, es de un color negro tan intenso que asusta un poco, quizás porque el mío es un negro rojizo. No creo que esto lo hiciera un simple Demonio de bajo rango, a simple vista esto parece algo hecho por un Demonio de alto rango. Solo espero que no sea un rango demasiado ALTO.

Raven me enseñó algunas palabras del idioma de los Demonios, si logro descifrar al menos alguna información del Demonio Contratado podré saber algo del enemigo que me enfrento.

Crow: -Jajajajaja.

La risa de Crow me desconcertó.

Le he estado toqueteando tanto su pecho que le he provocado cosquillas.

Annabeth: -Crow…

Si tan solo pudieras entender el problema en el que estás metido no te reirías tan despreocupadamente.

Suspiro con pesar, es por esto que siempre digo que la IGNORANCIA es buena para el que vive sin pesar y huye de la preocupación.

Crow: -¡Beth!

Tu radiante sonrisa regordeta es un puñal para mi corazón. Este pequeño niño no sabe el duro y peligroso futuro que le espera, quizás ni tenga futuro. ¡No! ¡No puedo ser pesimista!

Annabeth: -¡Yo te salvaré, Crow!

¡No permitiré que un Demonio devore tu alma!

Annabeth: -Es una promesa.

¡Bien! Me he trazado un objetivo, voy a ser la heroína que salve a este pequeño niño. Jajaja, heroína, eso no me pega, soy solo una cobarde Bruja, pero daré lo mejor de mí por Crow.

Además, si por cada niño y niña que he salvado me dieran un reconocimiento, yo sería la heroína más grande de la historia de este reino ¿o quizás del mundo?

Annabeth: -Jajaja, no te duermas, Crow. Esto es importante. Debemos decidir qué haremos desde ahora… ¡Necesitamos investigar!

Crow: -¡Ababa!

Annabeth: -¡Sí, ababa! jajaja.

Que adorable eres, mi pequeño regordete.

Jale: -Anna. Mi mamá me dijo que te trajera ropa.

La presencia de Jale me asustó, pero mi cuerpo reaccionó a tiempo. He logrado apoyar a Crow contra mi pecho para esconder nuestros Sellos Demoniacos de los ojos de la pequeña Jale.

¿Es qué en esta casa nadie sabe tocar la puerta?... La señora Winter también tiene la mala costumbre de entrar sin previo aviso en nuestra habitación por las mañanas. Como esta es su casa, no puedo quejarme.

Jale: -Mi mamá dice que usen esto. Dijo que esto es mejor que esa ropa delgada que tienes. Aquí lo dejo.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.